En estos días mis hijas y yo hemos recibido como un baldado de agua fría que el informe sobre los resultados del conflicto colombiano se hayan contabilizado solo desde hace 58 años. ¡Qué berraquera la de la oligarquía nuestra! ¡Tan habilidosa, maquiavélica y torticera! Con «vaselina» y mucho caramelo logró que en el imaginario guerrillero […]
En estos días mis hijas y yo hemos recibido como un baldado de agua fría que el informe sobre los resultados del conflicto colombiano se hayan contabilizado solo desde hace 58 años.
¡Qué berraquera la de la oligarquía nuestra! ¡Tan habilidosa, maquiavélica y torticera! Con «vaselina» y mucho caramelo logró que en el imaginario guerrillero e izquierdista se aceptara que el conflicto que padecemos se inició con el nacimiento de las FARC.
¡Qué berraquera de oligarquía la colombiana! Hábil, astuta, manipuladora, mentirosa y engañosa. No pierde una, mientras que la izquierda come cuento, halagada con el cascabel del protagonismo. Les meten en la cabeza que la historia comenzó con ellos.
Así, con esta treta de fijar la violencia solo desde hace 58 años se elimina la posibilidad – históricamente exacta – de que el surgimiento de la guerrilla es un justo acto de rebelión contra el Estado genocida que, deliberadamente, sistemáticamente y en forma generalizada, procedió a asesinar al pueblo que, desde 1946, con Gaitán a la cabeza, adquirió la dinámica suficiente para llegar, indefectiblemente, al poder, de no haber desatado la violencia la oligarquía.
Léanse, por favor, por favor, por favor, la Oración por la Paz que mi padre pronunció en febrero de 1948 en la Manifestación del Silencio en la Plaza de Bolívar de Bogotá. Allí señala DIRECTAMENTE AL GOBIERNO COMO GESTOR DE LA VIOLENCIA. Y dice textualmente dirigiéndose al presidente genocida Mariano Ospina Pérez: «Bien comprendéis que un partido que logra ésto (una manifestación gigantesca en absoluto silencio y disciplina) muy fácilmente podría reaccionar bajo el estímulo de la legítima defensa».
ESO FUE LO QUE SUCEDIÓ. E L PUEBLO EJERCIÓ LA LEGÍTIMA DEFENSA PARA DEFENDERSE DEL GENOCIDIO DE QUE ERA VÍCTIMA POR EL HECHO DE SEGUIR EL CAMINO QUE LE SEÑALÓ GAITÁN.
¿Acaso la familia de Manuel Marulanda no era gaitanista y por eso fue que se tuvo que ir al monte y así comenzó su lucha el propio Marulanda? Tratar de desvincularse del gaitanismo y enterrar la memoria de Gaitán, como lo ha querido promover Álvaro Uribe y las FARC no solo es un crimen a la memoria histórica ES UNA ESTUPIDEZ, que es lo que más rabia me da.
Porque la Declaración de Roma y de las Naciones Unidas avalan la REBELIÓN, que está a la raíz misma del origen de las FARC. Por ello el conflicto lo marca la oligarquía a partir de 1958 y la izquierda, como corderos, aceptan semejante trampa.
La Revista Semana se pregunta si los dirigentes de las FARC deben ir a la cárcel o al Congreso. Pues si no fueran tan ingenuos y la oligarquía tan habilidosa, reconocerían que el conflicto comenzó como un CRIMEN DE ESTADO en 1946 y que, en consecuencia, el Estado DEBE PEDIR PERDÓN y reconocer que la guerrilla es el fruto de un acto de REBELIÓN, legitimado internacionalmente como acto en defensa de la vida.
¡Qué desesperación, ver a nuestra oligarquía tan astuta y a la izquierda y a la guerrilla comiéndose el veneno envuelto en grandes dosis de estímulo a la vanidad y al ego, pensando que la historia del conflicto comenzó con ellos!!!!!! ¡Qué desesperación que pierdan el argumento de la rebeldía!!!!
TENGO 75 AÑOS Y EN ELLOS HE VIVIDO DIRECTAMENTE LA ASTUCIA DE LA OLIGARQUÍA QUE MANEJA LA VANIDAD DE LOS DIRIGENTES DE IZQUIERDA PARA TIRARSE TODO PROCESO REVOLUCIONARIO.
La fuerza de Gaitán radicó en que no se dejó envolver en las jugadas mañosas y torticeras de la oligarquía, porque su amor por el pueblo era MUY SUPERIOR a su ego.
¡Qué astuta es nuestra oligarquía! Hasta llega uno a valorar (no a apreciar) su capacidad de maniobra.
Con desesperación,
Gloria Gaitán
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.