La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) rechazó una propuesta del presidente Alvaro Uribe para pactar la paz en 90 días si los rebeldes liberan a personas que tienen secuestradas. Raúl Reyes, vocero del grupo insurgente, recibió la iniciativa de Uribe como una «cortina de humo» y advirtió que el canje no […]
La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) rechazó una propuesta del presidente Alvaro Uribe para pactar la paz en 90 días si los rebeldes liberan a personas que tienen secuestradas.
Raúl Reyes, vocero del grupo insurgente, recibió la iniciativa de Uribe como una «cortina de humo» y advirtió que el canje no puede estar supeditado al comienzo de un proceso de paz.
Uribe propuso que si el grupo guerrillero libera a los rehenes con supervisión internacional, desmilitarizará por 90 días una zona del país para negociar allí un acuerdo de paz, durante un discurso en la Plaza de Bolívar tras reunirse con el maestro Gustavo Moncayo, padre de un sargento secuestrado por las FARC hace 10 años, quien un día antes culminó una caminata de mil 200 kilómetros en la que invitó a los colombianos a apoyar la realización de un intercambio de prisioneros entre el gobierno y la guerrilla.
«El intercambio humanitario es independiente del eventual proceso de paz. Realizando el acuerdo de canje de prisioneros se abren las puertas a los diálogos en busca de las salidas políticas a la crisis colombiana», agregó Reyes.
En medio de abuchecos, Uribe se había declarado la semana pasada dispuesto a liberar a unos 500 guerrilleros de las FARC que están en las cárceles, con la excepción de los comandantes Ricardo Palmera, Simón Trinidad y Anayibe Rojas, alias Sonia, extraditados y juzgados en Estados Unidos, a cambio de 45 rehenes que permanecen secuestrados por las FARC.
En este contexto, el profesor Moncayo criticó hoy la «intransigencia» del gobierno y ese grupo para llegar a un acuerdo.
«Quedamos fríos con esta respuesta (de las FARC), pero voy a seguir insistiendo (en el tema del intercambio humanitario). Aquí me entierran», dijo el profesor Moncayo, llamado por los medios de prensa «el caminante por la paz».
Uribe hizo la propuesta después de reunirse con Moncayo en la Plaza de Bolívar, en el centro de Bogotá, donde el profesor se instaló a vivir bajo una carpa tras culminar su marcha iniciada 45 días antes en el sur del país para exigir la libertad de su hijo, el sargento Pablo Moncayo.
De otro lado, murió en cautiverio el sargento retirado del ejército colombiano Alexánder Cardona, secuestrado por las FARC en marzo pasado, informó este miércoles su madre, Ana Lucía Marín.
Según el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Cardona, de 33 años, falleció junto con el sargento del ejército Jesús Alberto Sol Rivera, cuyo deceso fue informado a la prensa el pasado martes por su esposa, Viviana Garay.
La jefe de la delegación del CICR, Bárbara Hintermann, confirmó la muerte de los dos secuestrados y dijo que están trabajando no sólo para recuperar los dos cuerpos, sino también el de un capitán del ejército muerto en poder de las FARC hace más de un año, y los de los 11 ex diputados fallecidos el 18 de junio.
Por último, la agencia Dpa informó que un juez colombiano llamó a declarar en calidad de testigo al presidente Uribe, por la muerte del alcalde del municipio de El Roble (norte), Eduardo León Díaz Granados, quien había advertido al mandatario de amenazas en su contra por parte de grupos paramilitares, dijo este miércoles la prensa colombiana.