El Estado Mayor del Décimo Frente Martín Villa del Comando Conjunto, adscrito al Secretariado Nacional de las FARC-EP informa desde las sabanas y montañas del oriente y nor-oriente colombiano, aclara e informa:
Lamentando los hechos, que en el marco de la confrontación política y militar que continúa en nuestra patria, que enlutan a un sector del bloque revolucionario con la caída de forma aleve, traicionera en que los compañeros SANTRICH, ROMAÑA, EL PAISA, EL LOCO IVÁN.
Que después de su compromiso con los acuerdos de La Habana, los cuales no solamente construyeron y suscribieron, confiando en la palabra empeñada y la voluntad del estado, como muchos otros ante la perfidia y la traición retoman el camino de la insurgencia como única opción posible para lograr los caminos del desarrollo social. Si bien es cierto nosotros no fuimos partícipes y mantuvimos nuestra posición consecuente con el pueblo y sus decisiones de mantener el legado revolucionario sin arrepentimientos, sin súplicas de perdón, sin arrodillamientos, sin acuerdos. Lo que es una clara contradicción entre revolucionarios, somos consecuentes y leales a los principios que nos rigen y determinan que nuestras diferencias, se resuelven en el marco del debate político e ideológico y que bajo ninguna circunstancia damos o daremos tratamiento de enemigos a los revolucionarios.
Por tal razón aclaramos al pueblo colombiano que el DÉCIMO FRENTE MARTÍN VILLA y ninguna estructura de las FARC-EP tiene participación o acción alguna con la caída de los camaradas y que no hemos emprendido y que jamás emprenderemos acciones sobre ninguna organización revolucionaria. Los hechos demuestras que estas operaciones de fuerzas especiales han sido desarrolladas en el marco de acuerdos BILATERALES, con las agencias norteamericanas en el marco de los planes contrainsurgentes. Con el empleo de mercenarios. O como igualmente pretenden incitar una guerra de nuestra parte con el ELN.
Conminamos a las fuerzas militares de ambos lados de la frontera a que hagan honor a la verdad y reconozcan su responsabilidad en estos hechos que se alejan de la ética de la guerra y de los protocolos internacionales.