El llamado canciller de las FARC, Rodrígo Granda, fue liberado este lunes por orden del presidente Álvaro Uribe, quien aseguró que el insurgente participaría como «gestor de paz». Sin embargo, el defensor del líder rebelde reitera que la medida es contraria a la voluntad de Granda. Las Farc desde tiempo atrás tiene nombrados a sus […]
Ya el presidente Álvaro Uribe había anunciado el mes pasado que liberaría de forma unilateral a los rebeldes de las FARC, sin embargo, este lunes en cadena nacional, dijo que fue a petición de su homólogo de Francia, Nicolás Sarkozy, que se procedió a la excarcelación de Rodrígo Granda y a su «inclusión en el proceso como gestor de paz».
Uribe reveló además que Granda fue excarcelado pese a que no renunció a su militancia en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Granda fue secuestrado en el 2004 en la ciudad de Caracas por un comando de efectivos militares colombianos coordinados desde Bogotá. Ricardo hace parte de la lista de los canjeables de las Farc. Esta organización desde tiempo atrás tiene nombrados a sus tres voceros encargados de hablar sobre el intercambio o canje en zona libre de militares. Según su Secretariado son los encargados de llevar a cabo este tipo de negociaciones con el gobierno colombiano, con Uribe o con el que le suceda.
Miguel González, abogado de Rodrígo Granda explicó que éste fue liberado contra su voluntad y que por ello «las posibilidades y las expectativas de un acuerdo humanitario están en serias dudas y están en punto muerto».
El insurgente colombiano Rodrígo Granda, conocido como el «canciller» de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue trasladado este lunes desde La Dorada, prisión de seguridad en la que estaba recluido en la localidad de Caldas (Antioquia), hasta la sede del Episcopado en Bogotá.
Granda abandonó la cárcel acompañado por el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, y el director del Instituto Nacional Penitenciario (Inpec), Eduardo Morales, con quienes abordó un helicóptero de matrícula HK-4025, de Helistar.
Con esta liberación, el Gobierno pretende que Granda restablezca las relaciones entre el grupo insurgente y los tres países amigos -Francia, España y Suiza- que buscan la liberación de la ex candidata fraco-colombiana, Ingrid Betancourt, en poder de las FARC hace poco más de cinco años y de otros 55 retenidos.