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Rostros (Zikuani, Nasas, Zenu, Wayuu) y repertorios de la resistencia agraria

Fuentes: Rebelión

Wayuu, Zikuanis, Zenu, Nasas, Guambianos, Pijaos, son los rostros de la resistencia indigena organizada en la Minga popular para exigir del gobierno cumpla con los acuerdos y compromisos. Paros, bloqueos de vias, plantones, concentraciones y manifestaciones, hacen parte del repertorio de la movilizacion nacional que recoge el apoyo y la solidaridad del pueblo.   La […]

Wayuu, Zikuanis, Zenu, Nasas, Guambianos, Pijaos, son los rostros de la resistencia indigena organizada en la Minga popular para exigir del gobierno cumpla con los acuerdos y compromisos. Paros, bloqueos de vias, plantones, concentraciones y manifestaciones, hacen parte del repertorio de la movilizacion nacional que recoge el apoyo y la solidaridad del pueblo.

 

La Minga de la resistencia indígena, campesina y popular que involucra millones de colombianos presenta múltiples rostros y acude al repertorio de recursos de los movimientos sociales y populares para exigir del Estado y el gobierno de turno respuestas a los pliegos y demandas de las masas agrarias, étnicas y populares que hacen formidables demostraciones de rechazo a la modorra gubernamental frente a los compromisos adquiridos al termino de las movilizaciones ocurridas en el año 2013.

 

Hagamos un recorrido por lo que ocurre en diversos puntos del territorio colombianos con el desarrollo de la Minga de la resistencia agraria.

 

Hay bloqueos de vías, manifestaciones, concentraciones y plantones. Son los repertorios de la protesta social.

 

El movimiento social en curso es una sumatoria de movimientos sociales clásicos como los agrarios y de nuevos movimientos sociales como los ambientalistas, indígenas, derechos humanos, la paz y contra la megamineria.

 

Cauca.

 

La vía que de Cali lleva a Popayán se encuentra bloqueada en varios puntos por indígenas.

 

Tras un día de bloqueos y enfrentamientos entre indígenas y el Esmad, este miércoles 1 de junio/2016, permanece cerrado el paso en la vía Panamericana debido a que varios camiones fueron atravesados en la vía durante las protestas de indígenas.

 

El bloqueo persiste en el kilómetro 53, sector Caldono, lo que ha generado que centenares de vehículos estén represados sobre la vía en un trancón que se extiende hasta Santander de Quilichao.

 

La situación se ha empeorado porque los indígenas han derramado Acpm sobre la vía.

 

Los indígenas destruyeron algunos sistemas eléctricos de los tractocamiones que los dejaron sin poder utilizarlos en la mitad de la vía, además que pararon varios vehículos que transportaban cerveza Pilsen y tiraron los envases vacíos a la carretera.

 

Los cabildos del norte del Cauca protestan contra lo que ellos llaman «el incumplimiento» por parte del Gobierno y el Ministro de Agricultura de varios compromisos adquiridos.

De acuerdo con el Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, Acín, al menos 12 mil personas están desde el lunes pasado en La María, Piendamó, haciendo parte de la movilización general.

 

A pesar de la presencia paramilitar en todo el departamento y de las últimas amenazas que hemos recibido varios líderes indígenas, nosotros saldremos a manifestarnos y a presionar hasta que el Gobierno se reúna con las comunidades», indicó Luceida Juricué, consejera de la Acín.

 

Son alrededor de 60 mil personas, entre indígenas y campesinos, que se están concentrando en cuatro puntos de este corredor vial porque manifiestan que el Gobierno Nacional no les está cumpliendo a estos grupos poblacionales luego de pactos registrados en pasadas movilizaciones del 2013.

 

Para el consejero mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca, Cric, José Ildo Pete, la movilización estaba ya pactada desde finales del año anterior, como consecuencia del incumplimiento de acuerdos en temas de tierras, derechos humanos, autonomía indígena, minería, entre otros.

 

El líder nativo agregó, además, que son varias las razones para que estas comunidades se declaren en asamblea permanente, entre ellas las pocas acciones del Estado frente al tema de la minería ilegal, no solo en sus territorios, también es la persecución y asesinato de sus líderes y el incumplimiento del Gobierno a temas ya pactados como la compra de tierras para estas comunidades.

 

Esta misma posición es la esbozada por los líderes campesinos de Piendamó, El Tambo, Timbío y el Macizo Colombiano, como el caso de Daniel Ulcué, representante de los labriegos cocaleros asentados al occidente del Cauca.

 

Son varias localidades tambeñas que marchamos, como son Huisitó, Playa Rica, entre otras, ya que no encontramos una solución real al problema de los cultivos ilícitos y solo conocemos la violenta represión del Estado a la hora que se busca solucionar un problema que no solo es del campesinado. Por ejemplo, dice, donde yo vengo, la única fuente laboral y de ingresos para las familias es el cultivo de coca porque no hay más. Uno siembra plátano y termina es arruinado. Además, habitamos una zona olvidada donde no hay carreteras, ni escuelas, ni puestos de salud. Para vivir en esas condiciones hay que echar mano del único cultivo que es restable, el cual ya mencioné, explica Daniel Ulcué.

 

Los puntos de concentración sobre los costados de la Panamericana son a la altura de la vereda El Uvo, Timbío; La María, Piendamó, Mondomo, Santander de Quilichao y Villa Rica, en este último punto hay reuniones de comunidades afrodescendientes.

 

Los Sikuani del Meta.

 

Unos 1.562 habitantes de las poblaciones indígenas sikuani se unieron al paro agrario nacional en Puerto Gaitán, al oriente del Meta.

 

El consejero mayor de la Asociación de Autoridades Indígenas Únuma, Antonio Rubio Yespes, que representa diez resguardos indígenas que agrupan a unos 27 mil habitantes de la etnia sikuani, aseguró que se unieron al paro nacional para reclamar los derechos especiales que el Estado suscribió hace dos años y que no han cumplido.

 

Los Zenu de Cordoba y Sucre.

 

Mientras que en Sampués (Sucre), el cacique de la etnia Zenú, Ferney Hernández Santos, denunció atropellos por parte del Esmad, a quienes señalan de arrojarles gas pimienta en la concentración en el cabildo menor de Tierra Grata en el municipio de Chinú (Córdoba).

 

Hay diez indígenas heridos tras protestas agrarias en Chinú

 

La caminata, que se inició en Chinú con dirección al departamento de Sucre.

 

Enfrentamientos entre un grupo del Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, con indígenas de la etnia Zenú en Chinú, en una sorpresiva jornada de protesta pacífica en el marco del paro agrario dejan varios manifestantes lesionados por el Esmad.

 

Pese a que la Asociación de Usuarios Campesinos, Anuc, capítulo Córdoba, había anunciado que no había manifestaciones preparadas, los indígenas salieron desde el mediodía a reclamar por sus derechos ante el Gobierno Nacional.

 

Los aborígenes de los resguardos Zenú de Córdoba y Sucre exigen al Gobierno que cumpla con los compromisos del Pacto Nacional Agrario. El inconformismo de los indígenas durante la protesta se deriva de la utilización de gases lacrimógenos por parte del Esmad para aplastar la protesta.

 

Oriente de Colombia.

 

Mientras tanto, en el oriente del país, cerca de 15 mil campesinos procedentes del Magdalena Medio y Norte de Santander se concentraron en varias vías. Al sitio conocido como La Lizama, kilómetro 35 de la vía Barrancabermeja-Bucaramanga, llegaron 12 mil labriegos que viajaron desde el sur de Bolívar, Santander y el Catatumbo.

 

José Vidal, uno de los líderes de la protesta en la zona, indicó que a lo largo de la manifestación, las autoridades han montado retenes en los que, según él, los obligan a descender de los buses para caminar hasta el sitio de reunión.

 

Organizaciones sociales de Barrancabermeja anunciaron que desde el puerto petrolero apoyarán la manifestación. Y en la vía a Bogotá, en un sitio ubicado entre Socorro y Oiba, cerca de 10 mil campesinos del sur de Santander y occidente de Boyacá se instalaron en los extremos de la carretera.

 

Antioquia.

 

En Antioquia, unas 8000 personas, entre campesinos, afrodescendientes e indígenas, se unieron a la concentración en cuatro regiones: Bajo Cauca, Urabá, oriente y suroeste.

 

En el coliseo de Valdivia se congregaron mineros y pescadores artesanales de la región que se sumaron al paro nacional agrario. Más de 5000 mineros y pescadores artesanales se concentraron en el casco urbano de Valdivia en el marco del paro agrario convocado por las organizaciones campesinas.

 

La retención por la guardia Indígena de 5 soldados que dijeron estar evadidos en la vía Quibdó-Medellín, en Chocó, y un bloqueo en la vía a la Costa, en Tarazá, norte del departamento, reportaron las organizaciones que encabezan la protesta.

 

Mientras tanto a la comunidad Las Palmas de Apartadó llegaron 6000 indígenas de Urabá.

 

Su protesta es por lo que ellos consideran una afectación del proyecto Hidroituango para sus actividades económicas tradicionales.

 

Los manifestantes, pertenecientes a asociaciones comunitarias de mineros y pescadores artesanales de Valdivia, Caucasia, Briceño, Toledo, Sabanalarga, Peque e Ituango, comenzaron a llegar desde el lunes al casco urbano de la localidad y permanecen en el coliseo polideportivo desde donde reclaman atención de los gobiernos nacional y departamental.

 

El motivo principal de la protesta es la vulnerabilidad que nos está causando el proyecto Hidroituango», señaló Eimberto Vargas, presidente de la Asociación de Mineros Artesanales del corregimiento Puerto Valdivia, de Valdivia.

 

Anoche seguían llegando campesinos e indígenas a distintas concentraciones en Antioquia.

 

En Guajira los wayuu se unen al paro nacional.

 

Uno de los puntos donde se mantiene una concentración es la vía que comunica a La Guajira con Cesar, donde hay represamientos de vehículos por la manifestación a la altura de los Resguardo Indígena de San Francisco, en el corregimiento de Papayal, en Barrancas.

 

Alrededor de 500 indígenas wayuu se tomaron la vía que une a La Guajira con el Cesar.

Desde la madrugada de este martes unos 3500 indígenas wayuu se tomaron la vía que une a La Guajira con el Cesar, a la altura del corregimiento de Papayal.

 

Según los indígenas de esta región, la protesta se hace para continuar con la defensa de su territorio, por la crisis del agua en este departamento, la desnutrición infantil y la explotación minera, que según afirman, busca acabar con los cuerpos de agua existentes, específicamente el arroyo Bruno que será desviado en el marco de un proyecto de Cerrejón.

 

Armando Valbuena Gouriyu, miembro de la comisión política de la Onic, afirmó en Riohacha que también es por los incumplimientos del Gobierno Nacional que prometió en el 2013 la creación de 400 resguardos indígenas y la inversión en compra de tierras.

 

También ha incumplido en las políticas públicas que están en el Plan nacional de desarrollo, por ejemplo de la educación, donde no hay inversión en el sistema indígena educativo propio e igualmente con el sistema de salud.

 

El dirigente dijo que en el 2013 la Minga tuvo una duración de nueve días y nueve noches, en los que se paralizaron 23 departamentos y que este año también será de manera indefinida.

 

Según los manifestantes, este llamamiento también responde a la indiferencia e incumplimiento sistemático en el que viene incurriendo el gobierno a los acuerdos alcanzados tras los Paros Agrarios y Minga Indígena de 2013, así como las jornadas de indignación de 2015 y los pliegos de exigencia presentados tras las movilizaciones del 24 de enero y 17 de marzo de 2016.

 

En el sur del departamento se congregaron los integrantes de las organizaciones Aciwasug, el resguardo de Mayabangloma, el de Painwashi, la Organización Yanama y Fuerza de Mujeres Wayuu, entre otras.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.