Es un momento crítico en el que debemos de hacernos algunas reflexiones desde una posición de clase y democrática ante la situación que se está dando en España, con una crisis política iniciada en el 2010 por quienes rompieron la Constitución al invalidar el Estatut aprobado por los parlamentos central y autonómico y refrendado por […]
Es un momento crítico en el que debemos de hacernos algunas reflexiones desde una posición de clase y democrática ante la situación que se está dando en España, con una crisis política iniciada en el 2010 por quienes rompieron la Constitución al invalidar el Estatut aprobado por los parlamentos central y autonómico y refrendado por el pueblo de Catalunya.
Los cuerpos policiales contra la movilización popular.
¿Quién o quienes han roto la constitución española de 1978?
El PP agitador del fascismo, único responsable del impulso del independentismo catalán.
¿Es posible la independencia de Catalunya?
El independentismo, movilización sostenida y base social.
¿Dónde está el poder del pueblo?
Vía independentista sin acabar con la austeridad.
Aplausos y vítores a los cuerpos policiales que reprimen las legítimas movilizaciones.
Ni hispanofobia, ni catalanofobia. Unidad de las clases populares.
¿Identidad nacional o lucha de clases?
¿Es Catalunya una nación oprimida?
Las contradicciones de la izquierda no nacionalista en Catalunya.
Las contradicciones de la izquierda española no nacionalista.
La igualdad de las naciones y el derecho de autodeterminación en la UE.
La posición de Lenin sobre la reivindicación del derecho de las naciones a la autodeterminación.
La alternativa. Ruptura Democrática. IIIª República Federal y Referéndum de autodeterminación pactado.
ADVERTENCIA: El artículo fue cerrado el 16 de Octubre. Todos los acontecimientos relacionados con la DUI y la suspensión de la autonomía (art.155 CE) están actualizados hasta esa fecha.
Los cuerpos policiales contra la movilización popular
El 1 de Octubre pasará a la historia como el día en que el gobierno del PP rompió definitivamente las líneas rojas de la democracia y el Estado de Derecho, secuestrando urnas y reprimiendo brutalmente en Catalunya, a quienes se concentraban de forma pacífica en los colegios electorales. Los autores de los disturbios no fueron los «radicales», sino los cuerpos policiales que repartieron a diestro y siniestro.
La actuación de los cuerpos de seguridad del Estado ha sido tan desproporcional como un calco a la llevada a cabo por el régimen franquista en los años 60/70 contra el movimiento obrero y estudiantil. 893 heridos/as en un solo día por la Policía y la Guardia Civil, fueron atendidas en urgencias, 319 colegios de 2.315 (13,8%) fueron cerrados por los Mossos, Policía Nacional y Guardia Civil (1). Esa fue la «gran labor» de los policías desplegados en Catalunya, con un coste económico de 31,7 millones de € (2), factura que no para de subir y que pagaremos todos/as incluyendo los 893 heridos/as.
Los que hoy defienden las cargas policiales son los mismos que defienden lo que está pasando en Murcia, donde todo un pueblo lleva movilizándose desde hace más de 3 semanas contra el muro del AVE reivindicando el soterramiento, y la respuesta del PP ha sido la misma que en Catalunya, ¿diálogo?, no, cargas policiales y represión. Lucha vecinal que los media mantienen en silencio de forma vergonzosa (3), lucha que ha dado su fruto, el compromiso de adelantar las obras de soterramiento de las vías del AVE (4).
Que las cargas policiales no tienen justificación legal alguna se demostró el 9N, donde no hubo ninguna intervención policial contra las personas, y se mantuvo la convivencia. El 1-O los cuerpos policiales rompieron la convivencia y la seguridad ciudadana. Fue un referéndum sin garantías pero no ilegal ya que no es ilegal ni ilícito que los ciudadanos voten (5). Rompieron el estado de derecho ya que el mandato judicial del TSJC sólo contemplaba intervenir material del referéndum (urnas, papeletas y colegios) no intervenir contra las personas. Lo ilegal y preconstitucional es colocar al fiscal general del Estado para invadir la jurisdicción de los jueces, llevar a los cuerpos policiales estatales saltando por encima de la autonomía catalana, prohibir la libertad de expresión, manifestación y voto.
Aún así la respuesta policial fue un sonoro fracaso tanto por no conseguir el objetivo de generar el pánico entre la población para impedir la votación como por la imagen internacional, donde el gobierno del PP señalado por la prensa internacional recibió un tirón de orejas por la Comisión Europea y el alto comisionado de la ONU.
El escrutinio ha contabilizado 2.286.217 votos, una participación ligeramente inferior al 9N (2,3 millones), un 38,5% del censo, con un 90% a favor de la independencia, según los convocantes. Aún así con estos datos el Govern de la Generalitat anunció su predisposición a la declaración unilateral de la independencia (DUI).
Aunque éste no era el referéndum que la mayoría de los catalanes deseábamos, ya que no contempló las garantías democráticas de participación, la presencia de diferentes opciones, la imparcialidad en el recuento de votos, etc., el PP con su doble actuación de impedir un referéndum y utilizar como respuesta la fuerza ha conseguido que el 1 de octubre se convirtiera en una masiva movilización por el derecho a votar contra quienes lo niegan. Es el PP el principal responsable de que en Catalunya no haya un referéndum con garantías. Y paradojas de la vida mientras que en Venezuela la «dictadura» de Maduro permitió a la oposición votar, y dio protección policial a los venezolanos que votaron la Constituyente contra las agresiones de la ultraderecha, en España el «demócrata» Rajoy mandó reprimir a los votantes, amenazar con suspender la autonomía, encarcelar a los portavoces de la ANC y el Omnium por la manifestación del 20 de septiembre…, suma y sigue. Todo un ejemplo de democracia europea (sic).
¿Quién o quienes han roto la constitución española de 1978?
Si hoy hay que acusar a alguien de romper España, no es al independentismo catalán sino al PP.
Fue el PP quien promovió la primera ruptura de la constitución, cuando impugnó el último estatut catalán que supuso un cambio constitucional ratificado por mayorías cualificadas en los parlamentos autonómico y central y aprobado en referéndum en Catalunya. El Tribunal Constitucional, controlado por el PP, con su decisión de anular 14 artículos del Estatut rompió el título VIII capítulo 3º de la constitución española al desautorizar el pacto entre los dos parlamentos y el referéndum pactado, dejando de ser independiente como institución judicial. En consecuencia, más ilegal y golpista que el PP actuando contra en el Estado de derecho que tanto cacarean no hay nadie, pues se supone que la constitución es lo más sagrado que hay en el ámbito del derecho en un país, y van y la rompen.´
Si repasamos la letra de la constitución española de 1978 veremos cómo se ha pisoteado la separación de poderes, y se ha incumplido infinidad de artículos de la constitución, entre el 9 y el 50 ahí van algunos: libertad e igualdad del individuo, derechos fundamentales, derechos de reunión y manifestación, derecho de opinión, derechos a la vida e integridad física (terrorismo de Estado), derecho al trabajo, derecho a la negociación colectiva laboral, derecho a la protección de la salud, derecho a disfrutar de un medioambiente adecuado, derecho a la vivienda, derecho de rehabilitación e integración de los disminuidos, y el derecho a las pensiones actualizadas y suficientes para la tercera edad.
Bien es sabido que la constitución española que apoya el régimen capitalista y el mercado libre, lo que es una contradicción para la garantía de tales derechos, es un papel mojado, que se gobierna contra sus contenidos de planificación económica y derechos sociales, el derecho al trabajo, a la sanidad, las pensiones y enseñanza pública son pisoteados con privatizaciones y brutales recortes y reformas laborales neoliberales, y el derecho a la vivienda es ninguneado con desahucios declarados ilegales por los tribunales de la UE. Bajo este esquema que hace de la constitución española un batido de declaraciones sin obligado cumplimiento, la política económica es la de servir a la acumulación de capital.
Pero bajo el gobierno de Zapatero, fueron más lejos, para obedecer los mandatos de la Troika volvieron a romper la constitución española cambiando el artículo 135, consagrando la estabilidad presupuestaria y el pago de una deuda cuyo origen es privado como prioridad, dando carta legal a los recortes sociales. Esa vez a diferencia del estatut catalán ¡¡¡sin referéndum!!!, saltándose la soberanía del pueblo español que tanto dicen defender (sic). El PSOE recibió el inestimable apoyo del PP para su aprobación en el parlamento.
En consecuencia, quienes han roto la constitución española y han dado carta de naturaleza política a la ilegalidad, no son quienes se reúnen en locales públicos para opinar y son censurados, ni los independentistas catalanes, sino los gobiernos neoliberales que en España han gobernado los últimos 35 años, la está rompiendo jurídica y políticamente el bipartidismo español.
Y si hablamos de ilegalidades, el PP, el partido de los 800 imputados por tramas de corrupción, que tiene a todos sus tesoreros de AP y PP imputados por financiación ilegal con fondos públicos, y al que la fiscalía anticorrupción pide que se condene al PP por lucrarse por la Gurtel (6), es el campeón de la ilegalidad en España.
El PP agitador del fascismo, único responsable del impulso del independentismo catalán
Nadie puede dudar que tras la decisión del Tribunal Constitucional y la manifestación de Barcelona el 9 de julio de 2010 bajo el lema «som una nació, nosaltres decidim», el mapa político catalán ha dado un giro radical, si bien al principio las movilizaciones fueron para defender el Estatut propuesto por las izquierdas que reconocía a Catalunya como nación dentro de España, la negativa a reconocer su carácter plurinacional por el gobierno del PP desde entonces ha potenciado el independentismo el cual ha tenido un crecimiento exponencial pasando de un 19% a un 45% desde la anulación del Estatut, según la encuesta que realizó la Generalitat tras el 9N. ERC y CDC antes federalistas, pasaron a posiciones independentistas. El PSC federalista se partió en dos, pasándose una parte al campo independentista. En el momento en el que se cerraba la posibilidad de cambio dentro del Estado español una parte creciente de catalanes se desconectaban ya de España.
Es justo decir que el independentismo catalán tiene un chollo con el PP, pues gracias a ese partido, ha alimentado sus fuerzas. Gracias a la actuación policial de la semana previa al 1-O en nº de independentistas se ha incrementado en 182.285 con respecto al 9N, según los convocantes de la consulta (7).
¿Y qué es el PP? Es la explicación del por qué en España no existe partidos ultraderechistas como en otros países de la UE. Su cultura y visión de España es netamente franquista, uninacional, racista y neocolonial (8), sometido a los intereses del imperialismo, antes la Alemania nazi, ahora la UE y EE.UU. Partido enemigo de toda visión plurinacional de España, que atiza el sentimiento anticatalán para enfrentar y desviar a la clase obrera con mensajes identitarios. No se ha conocido en nuestra historia un nacionalismo más cerril y violento que el nacionalismo españolista que hoy encarna el PP, antes AP, antes Movimiento Nacional, antes FET y de las JONS, bajo el franquismo. Vox, Falange, PXC, España 2000 y Democracia Nacional sólo sumaron el 0,25% de los votos en las generales del 2015, porque el franquismo sociológico ve al PP como su referente electoral, hasta el 90% de los votantes que se consideran de ultraderecha votan al PP (9), ese PP que recogió firmas contra el Estatut y llamó al boicot a los productos catalanes. Los Aznar, Aguirre, Rafael Hernando y Rajoy entre otros defienden esa España uninacional y excluyente, ¿cómo no se van a sentir representados los ultras en el PP que ha encontrado al «enemigo interno» en el independentismo catalán y como el PP no va a dejar de azuzarlos para obtener réditos electorales? Cs también bebe de esas aguas. ¿Nos acordamos de quienes en el PSOE, y corrientes de Podemos e IU defendían un «gobierno de progreso» con los Rivera, Garicano y Girauta? ¡Ay!, que equivocados que estaban.
Y en la manifestación del 8 de Octubre convocada por la oligarquía financiera española, el PP-Cs y todos los partidos de la ultraderecha (10) , a la que se adhirió el PSC, con miles de personas venidas de todos los lugares de España, vimos su falso constitucionalismo en sus consignas: «¡Viva la Guardia Civil», «Han hecho más daño unas papeletas que todas las bombas de ETA», «¡Puigdemónt a prisión!», «Artículo 155, ya!», sus aplausos a la policía que mamporreó ancianas el 1-O, que desahucian a familias de sus viviendas, sus banderas, saludos y canciones preconstitucionales, y su respuesta a las masivas manifestaciones sin banderas por el diálogo, del sábado 7 de Octubre en Madrid y Barcelona: «¡no al diálogo!». Esas fueron las consignas predominantes lanzadas por la ultraderecha, el PP y Cs, mientras que las de diálogo y referéndum pactado fueron silenciadas.
El PP está dando cabida y organización a una ultraderecha que ya actúa sin freno y con total impunidad policial y judicial, como hemos visto en la manifestación anual del 9 de Octubre, día de los valencianos, a la que se cruzó una contramanifestación ilegal protegida por la policía del grupo ultraderechista Yomus los cuales agredieron a la izquierda valencianista (11). Ya hemos visto el 12 de Octubre en Barcelona las bandas fascistas luciendo sus emblemas y su violencia un día que representa la violenta imposición cultural, política, militar y colonialista, que incluye el exterminio de millones en nombre de la religión católica en América.
Las incendiarias palabras de Pablo Casado amenazando a Puigdemont de que le pasará lo mismo que a Companys, que fue encarcelado en 1934 y fusilado por Franco en 1940, y la petición de que ilegalicen al independentismo y quienes los apoyan (12), son la muestra más clara de que el PP se ha convertido en un agitador del fascismo. Es muy peligroso pues están teorizando un «frente constitucionalista» PP-PSOE-Cs-CC, donde el resto de partidos políticos e incluso sindicatos de la Mesa de partidos por el diálogo con Catalunya pueden ser puestos fuera de la ley. Una involución del régimen que nos afectará a todos/as.
La historia se repite, la campaña contra el Estatut aprobado dentro del marco constitucional en el 2006 siguió un camino tortuoso ya vivido hace más de 80 años. Recordemos que en septiembre de 1932 el parlamento de la república convirtió en ley el Estatut catalán con la furiosa oposición de la derecha, y que luego bajo el bienio negro en 1934 fue suspendido por el gobierno de Lerroux y la CEDA, encarcelando a todo al govern de la Generalitat con Companys y Comorera a la cabeza, simplemente porque se les ocurrió reivindicar el encaje federal dentro de la república (13).
La intervención de las cuentas de la Generalitat, el registro de las consejerías, la detención de 14 altos funcionarios, la declaración de 720 alcaldes, la intervención en imprentas, el local central de la CUP, la imposición a los mossos d´esquadra de un coronel de la Guardia Civil progolpista (14), procesado por torturas, por orden de la fiscalía, estaban diseñadas en el mundo ilusorio del PP, para frenar la movilización social. Por el contrario, impulsaron movilizaciones masivas y pacíficas contra las decisiones del gobierno y la fiscalía en Catalunya, y en 40 ciudades del resto de España contra la represión y por los derechos de reunión y opinión, aumentando con ello la cifra de los partidarios de participar como repulsa en la consulta. Y el masivo paro general en Catalunya convocado por la Taula de la Democracia (15) el 3 de Octubre contra la represión, con concentraciones en casi todas las localidades catalanas nunca vistas, va dando continuidad a una movilización social que no decrece por mucho que el PP y Cs se empeñen, además de las grandes concentraciones en la puerta del sol y otras ciudades como Zaragoza después de las votaciones con banderas republicanas y en solidaridad con Catalunya. Ahora con el encarcelamiento de Jordi Sánchez y Jordi Cuixart la maquinaria para la movilización nuevamente está servida.
Es la táctica de siempre del PP de buscar el enemigo interno, aparte de que sirve para conseguir votos fuera de Catalunya, también sirve para esconder la corrupción y las políticas de clase, para dar término a una legislatura en la que se apliquen los planes de ajuste pactados con la Troika. Planes de ajuste que vienen siendo rechazados por la movilización popular del 15 M y las 2 últimas huelgas generales. Planes de ajuste (reformas laborales, de pensiones, recortes sanidad, enseñanza, dependencia, saqueo del fondo de pensiones…) adornados con la ley mordaza que criminaliza la movilización social. Planes de ajuste, que está convirtiendo a España en un país que vuelve a emigrar al extranjero y ser líder junto a Grecia en la tasa de paro en la UE, donde la precariedad laboral, la pobreza infantil y el empobrecimiento generalizado, alcanzan cotas récords desconocidas en los últimos 50 años mientras el capital agranda sus tasas relativas y absolutas de ganancia. Cada vez hay más pueblos y familias trabajadoras deprimidas en España que se mantienen con la pensión de sus mayores.
Mientras tanto, los ingresos por impuestos en España están 10 puntos por debajo de la UE15, se van reduciendo los recursos económicos que se necesitan para garantizar los servicios sociales públicos por el fraude fiscal, que no tiene fronteras (16), la reducción de impuestos a las grandes fortunas y empresas, y el coste del rescate a la banca, líder en la UE, que según Montoro terminaremos por pagar todos/as.
¿Es posible la independencia de Catalunya?
El PP viene agitando la opinión pública mintiéndole con que la consulta del 1 de Octubre implica la separación de Catalunya. Gran parte del independentismo también pero por diferente motivo repite la mentira. Tras la DUI que no existió Catalunya sigue con el mismo Govern, sin leyes propias, sin control del territorio, población e infraestructuras. ¿Pero de verdad nos creemos que el gobierno español va a renunciar pacíficamente a un territorio que aporta el 20% del PIB, va a retirar amistosamente al ejército, la guardia civil, la policía nacional, y ceder los resortes económicos del Estado para la creación de una hacienda y seguridad social catalana? Según el independentismo, la UE y la ONU intervendrán. En realidad España, aliado del imperialismo yanqui, estado miembro de la UE, miembro de la OTAN, plataforma política frente a África, Rusia, China, Venezuela, etc., tiene todos los apoyos internacionales del imperialismo occidental, la UE se ha pronunciado a través de Juncker contra la independencia (17) mientras que el independentismo sólo dispone de declaraciones internacionales contra las cargas policiales del 1-O que no obligan al gobierno del PP ni tan siquiera a dialogar, mucho menos para negociar la independencia de Catalunya.
Ello no quiere decir que la independencia sea imposible en un futuro de continuar la crisis de Estado, son muchos los catalanes que no se consideran españoles en primer orden, y dentro de ellos muchos que sólo se consideran catalanes, y esta parte ha sido creciente entre la población de Catalunya desde la anulación del Estatut del 2006.
Tampoco olvidemos que en caso de ejecutarse la independencia según el reglamento de la UE Catalunya debería de solicitar el ingreso. Esto es algo que los líderes independentistas siempre ha desmentido porque saben que la mayoría de los catalanes son proUE, excepto la CUP que es antiUE.
Pero si no hay independencia, si seguimos en la UE y la eurozona por mucho que se proclame la DIU ¿a qué ha venido el traslado de sedes de bancos y empresas catalanas (Banco Sabadell, Freixenet…)? El cambio de domicilio social facilitado por el gobierno del PP mediante un cambio de ley exprés es un acto administrativo y no implica deslocalización de plantillas y producciones, por lo que la Generalitat seguirá recaudando su parte de impuesto de las renta salariales e IVA, excepto el impuesto de sociedades que es estatal, siendo mínimo el impacto sobre la economía catalana. El impacto real sólo tendría efectos la deslocalización de actividades económicas, aspecto que no se prevé en ningún escenario (18). Es una acción más del PP y la oligarquía financiera y empresarial para presionar al Govern de la Generalitat metiendo miedo a la sociedad catalana. Y una demostración que cuando se quiere se modifican las leyes, en este caso para los intereses financieros y empresariales, pero no para facilitar un referéndum pactado. Curioso.
Lo que realmente nos debiera preocupar no es esta mascarada mediática, sino el toque de atención del FMI por el «desliz» de de Guindos anunciando que no se cumplirán los objetivos de crecimiento del PIB en España en el 2018 (-1,2). El PP con su estrategia incendiaria está perjudicando no sólo a la economía catalana, sino a la española, y le está dando herramientas a la Troika para que nos agreda a toda la clase obrera otra vez con nuevas recetas de recortes si no se cumplen los objetivos de deuda y déficit previstos, en base a las leyes de estabilidad presupuestaria y al famoso artículo 135 de la Constitución reformada sin referéndum.
Con una oligarquía financiera y empresarial enfrente y un Estado que está actuando a través de la fiscalía y deseoso de suspender la autonomía, el 10 de Octubre asistimos en el parlament a una DUI que no fue proclamada, ni siquiera se votó, siendo suspendida su proclamación (tal y como entrevió Iceta -PSC- en la sesión parlamentaria), para abrir la puerta al diálogo con el Estado y mediación internacional. Posición rechazada por la CUP que puede abandonar el parlament dejando sin mayoría absoluta al Govern de la Generalitat. Una demostración de que si no hay acuerdo con el Estado ni reconocimiento internacional no hay independencia. La suspensión de una independencia no proclamada, obedece a una táctica de evitar la aplicación del artículo 155, mientras que el PSOE se compromete con el PP a reformar la Constitución dentro de los márgenes del régimen del 78 y no cuestiona el 155, Cs que sigue contando votos exige su aplicación inmediata. Y ante la respuesta de Puigdemont, primer requisito del 155, la ANC, parte de ERC y la CUP piden que se levante la suspensión de la DUI, mientras parte del Govern y el PDCAT con Mas a la cabeza disienten. La espada de Damocles pende sobre la cabeza del independentismo, coyunturalmente dividido y desmovilizado, pero una reacción negativa por parte del PP, como el reciente encarcelamiento los portavoces ANC y Omnium (primeros presos políticos de la crisis catalana) o la disolución de la autonomía, reactivaría la movilización y unidad independentista a niveles ya vistos. En consecuencia, por el 155 no hay vía de solución política.
Entonces, ¿dónde está la solución? Esta no pasa por la DIU, ni por la aplicación del art. 155, y ni por seguir manteniendo al PP en el gobierno ni un minuto más, pasa ineludiblemente por cambiar el mapa político español, con un nuevo gobierno, y la realización de un referéndum de autodeterminación pactado. Lenin planteaba la resolución del derecho de autodeterminación mediante referéndum de la nación afectada (19) y que la alternativa al independentismo pasaba por ampliar la democracia y defender república federal (20).
El PSOE está partido en varios trozos. Dicen diálogo y vociferan artículo 155, ¿qué será lo próximo, artículo 8 (intervención del ejército) y artículo 116 (estado de sitio) haciendo de teloneros del PP? Pedro Sánchez sigue siendo incapaz de dar un paso a la izquierda sin que esto genere fisuras en las CC.AA. donde el felipismo sigue siendo mayoría (Andalucía, Extremadura, Castilla la Mancha…). El PSOE orgánicamente es lo más parecido a un anarquismo de taifas. Hemos visto la rebelión de barones (Susana Díaz, Rodríguez Vara en pos del 155), y la vieja guardia, los Ibarra, González, Bono y Guerra movilizados por la derecha diciendo barbaridades en los media, exigiendo la anulación de la autonomía y equiparando las movilizaciones pacíficas en Catalunya con el nazismo y las cargas policiales con la democracia (sic).
Pedro Sánchez sólo se compromete tras la suspensión de la DUI, a reformar la Constitución con el PP dentro de 6 meses manteniendo la monarquía, nada de referéndum pactado y vinculante de autodeterminación, y no excluye su apoyo a la suspensión de la autonomía catalana (21).
Ni si quiera el PSOE está en la mesa de partidos por el diálogo con Catalunya por un referéndum pactado la forman UP, ERC, PNV, PDCAT, y los sindicatos UGT y CCOO (22). La encuesta de Demoscopia es un indicador clamoroso que la gran mayoría del pueblo catalán, incluyendo a esa «mayoría silenciosa» a la que Arrimadas y Albiol invocan, está por un referéndum pactado, nada menos que el 82%, más del 90% de los votantes de partidos independentistas, el 75% de los votantes del PSC, el 57% de los votantes de Cs, el 49% de los votantes del PP y el 100% de los votantes de En Comú. Acusar como hace la derecha y el felipismo a los partidarios del referéndum pactado de autodeterminación, de independentistas y fomentar el independentismo, es como diría Lenin «tan necio e hipócrita como acusar a los partidarios de la libertad de divorcio de fomentar el desmoronamiento de los vínculos familiares» (23).
Todos sabemos la incapacidad del PP para llevar a cabo una negociación con Catalunya, ni siquiera ha anunciado la reforma de la Constitución siendo el gobierno, lo hace el PSOE (sic). El Partido conservador del Reino Unido fue capaz de pactar hasta un referéndum, hacer concesiones al independentismo escocés, y meterse de lleno en la campaña del referéndum. La política del PP respecto a Catalunya ha sido ninguna concesión para no perder votos (ni fiscal, ni política), siendo con esa actitud el máximo valedor del independentismo y la rotura de España. Lo único que han sido capaces es escupir hacia arriba con la amenaza de las pensiones y del menor crecimiento económico del previsto para España en el 2018 anunciado por De Guindos, haciendo encender las alarmas del FMI que exige acabar con la crisis política en Catalunya emplazando a las dos partes (24).
Y aún así Pedro Sánchez cayendo en la trampa del fantasma de una seudoreforma que no va a cambiar nada, en medio de la agitación y aplicación del 155 que unirá y movilizará al independentismo. ¿Y… es este el PSOE que iba a pedir moción de censura cuando había primarias (25), que iba a negociar con Catalunya, que iba a reprobar a Soraya por las cargas policiales, que…?
La posición de izquierdas en el PSOE hoy no se encuentra en Pedro Sánchez que al final se alinea con el PP y Cs tras el mensaje del rey (que ha supuesto un giro de tuerca a la política dura del PP), y la suspensión de la DUI por Puigdemont, sino del secretario general de las juventudes del PSOE, partidario de plantear la república como forma de Estado, propuesta que el propio Sánchez impidió que se discutiera en el último congreso del PSOE. Claro, ya sabemos que es monárquico-republicano (sic).
La alternativa» promovida por el PP , Cs, y los sectores felipistas del PSOE, la intervención de la fiscalía, la aplicación del art. 155 o el adelanto de elecciones en Catalunya, son medidas que favorecerán sin duda el incremento del independentismo en Catalunya. Por tanto, la única alternativa democrática y pacífica pasa por echar al PP con una moción de censura. Por mucho que se exija diálogo, paz y convivencia como en las masivas manifestaciones sin banderas de Madrid y Barcelona del 7 de Octubre, convocadas por intelectuales de la izquierda, la derecha responde que no hay dialogo con Catalunya.
El independentismo, movilización sostenida y base social
El independentismo cuya hoja de ruta lidera la derecha catalana (PDCAT) que impuso la lista conjunta a ERC a través de las presiones de la ANC y el Omniun, se ha consolidado como un movimiento amplio de masas, y sí, ha contado con los media (TV3, Cat/info) y la infraestructura institucional de la Generalitat, pero ello no explica por sí solo la extensión y capacidad de movilización. Son 5 diadas consecutivas con un millón de catalanes en la calle cada año reivindicando el derecho a decidir y la independencia. Un movimiento dirigido por la ANC y el Omnium que está integrado por gran parte de la intelectualidad catalana, más de 700 municipios que se suman al procés, la mayoría de universitarios y estudiantes, de la pequeña burguesía urbana y rural, y una parte creciente de la clase obrera. Eso de que la clase obrera catalana de las comarcas metropolitanas no es independentista, es hoy relativo, aproximadamente el 40% de los afiliados a UGT o CCOO se consideran independentistas (26), y el 33% de las clases populares (rentas más bajas) se considera independentista, mientras que el 56,2% no (27).
El panorama ha cambiado desde el 2010 y mucho, incluso en el área metropolitana el procés ha penetrado con peso, en las protestas no sólo participan obreros de servicios, estudiantes, pequeña burguesía y pageses, también hubo obreros industriales en el 1-0, aunque no todos son partidarios de la independencia ya que el objetivo de la movilización cambió para mucha gente que no pensaba ir a votar y lo hizo contra la represión del Estado (28) y en las movilizaciones del 3 de Octubre, en muchas ciudades del área metropolitana.
Aunque la mayoría de la clase obrera no apoya el procés porque está dirigido por PDCAT y porque se considera española, parte importante y creciente de la misma se ha convertido en una fuerza motriz auxiliar del independentismo, mientras que la intelectualidad y la pequeña burguesía en vías de proletarización conforman la fuerza social dirigente. Y sí, vale, seguro que muchos obreros optan por la independencia por entender que sólo ésta puede lograr la república en Catalunya y liberarnos del régimen del 78 corrupto y monárquico, pero al final cuentan como base de apoyo del procés. Seguir insistiendo que no son independentistas es una tontería.
La oligarquía financiera catalana, las grandes empresas y la patronal catalana (Foment) se posicionan contra la DUI. Foment busca la reforma del Estatut con un referéndum pactado que reconozca un nuevo pacto fiscal, más inversiones del Estado, reconocimiento de identidad y representación en organismos internacionales y competiciones deportivas (29). No es casual que ya antes del 1-O el PDCAT manifestase sus reticencias a la declaración unilateral y que haya impuesto la suspensión de la DUI. La búsqueda de un acuerdo con el Estado es el objetivo de PDCAT y la burguesía catalana, dentro de la permanencia en la UE de la austeridad.
En la clase obrera tenemos un movimiento obrero y una izquierda «antineoliberal» presa desde Maastrich a los tratados y leyes de la UE. ¿Nos acordamos del Sí crítico de Gutiérrez, Ribó, Almeida, Garrido…? Una izquierda que abandonó los objetivos de ruptura democrática y república que aún le cuesta resituar, dejando ese campo al independentismo. Cuando la clase obrera que sufre injusticias, precariedades y se siente decepcionada, sin referentes sociales y políticos de clase, tiende a caer en posiciones ajenas, independentistas, y así es fácil de que se olvide de quienes han gobernado y gobiernan en Cataluña con idénticas políticas económicas a las del bipartidismo. Hace falta una propuesta republicana federal que ni la izquierda, ni el movimiento obrero están ofreciendo en España con claridad, y que en Catalunya no quieren o no se atreven a defender.
El proyecto independentista de Catalunya goza de un gran apoyo por la creencia en el espejismo de que es posible mediante su conversión en un nuevo Estado de la UE, ser tratado como un país centro europeo, de la donde se concentra el poder de decisión política, financiera, y tecnológica, de las economías exportadoras y acreedoras, alejarse del intercambio desigual y el empobrecimiento de los países de la periferia y el sur.
Esta creencia es consecuencia de la ineficacia de la izquierda política y social al alejarse de la centralidad de la lucha de clases (burguesía/clase obrera), en no combatir el origen de los problemas de la crisis uniendo al movimientos obrero con los movimientos populares, en no disponer de un proyecto propio de Estado (la IIIª República), en no batallar contra la ideología pequeño burguesa del «europeísmo» y la «Europa de los pueblos» vinculado a la UE de las transnacionales y el euro y no señalar el verdadero enemigo, que no son los «gandules» del sur, ni los inmigrantes del «tercermundo», sino el imperialismo alemán, y su arma de destrucción masiva de conquistas obreras, el euro.
¿Dónde está el poder del pueblo?
El derecho de autodeterminación sólo puede ejercerse si el poder real reside en el pueblo. Y ahí es donde afloran las contradicciones del independentismo, ya que el pueblo no es homogéneo, hay clases explotadoras y explotadas, y excepto la CUP, la mayoría de los independentistas pretenden defender una Catalunya encuadrada en la UE y la OTAN, o sea, a las órdenes del imperialismo y sus instituciones político-económicas en la UE: la Troika con recortes sociales de lujo en aras de las leyes de estabilidad presupuestaria que nadie cuestiona en el Govern. Por tanto, en la Catalunya independiente dentro de la UE con una deuda pública del 35,4% del PIB la austeridad seguirá siendo la marca blanca de la política económica (30). Nada de una Catalunya popular, obrera y antiimperialista.
¿Cómo va a ser posible ejercer el derecho de autodeterminación de Catalunya, cuando las principales palancas de la economía industrial y financiera se encuentran en manos de una oligarquía dependiente de los imperialismos yanqui y europeos?
Sigue siendo válida la definición de Lenin de la supremacía del poder financiero sobre todas las formas de capital, que significa la hegemonía de la oligarquía financiera y rentista, lo que genera una situación privilegiada para un número pequeño de Estados rentistas-usureros a costa de un número mayor de Estados deudores. En la crisis actual el ataque de los Estados-rentistas acreedores hacia los Estados y naciones deudoras comenzó por los eslabones más débiles de la periferia, (Irlanda, Grecia, Rumanía, Letonia, Finlandia, Portugal y España).
Y en este contexto de crisis del capitalismo, precisamente las entidades financieras catalanas están endeudadas hasta las cejas con los bancos europeos, igual que el resto de bancos españoles, griegos, irlandeses, etc., con una deuda pública del La industria catalana en su mayoría de empresas industriales tanto de bienes de producción como de bienes de equipo, pertenecen a transnacionales extranjeras desde donde se controlan las patentes y se toman las decisiones de asignación de producciones y mercados. Catalunya dispone de una capacidad industrial alta, cierto, pero muy dependiente de las transnacionales extranjeras, una industria pública y nacional débil, y una capacidad de investigación y patentes baja, lo que nos muestra la excesiva dependencia del capital extranjero. También hay que destacar que el tamaño de las pymes catalanas igual que las españolas es inferior al europeo, el 93,5% de las empresas catalanas (proveedoras de monopolios transnacionales) tienen menos de 10 trabajadores, un 0,2% entre 200 y 1000 trabajadores, y sólo 150 empresas con más de 1000 trabajadores. Catalunya cuenta con una estructura industrial viable en el contexto español, pero su economía está centrada en una estructura de bajo nivel tecnológico y competencia (baja composición orgánica y tecnológica del capital), siendo el peso de la economía intensiva de alto nivel tecnológico muy leve. Con este diagnóstico, es cuestionable que dentro de la UE, y aplicando los recortes para pagar la deuda, Catalunya vayamos a gozar de «más soberanía».
La crisis capitalista ha elevado la incapacidad soberana de los Estados, las decisiones dominantes en la UE responden a los intereses financieros y empresariales de los países más ricos, como Alemania y Francia.
Actualmente la burguesía catalana y española forman parte del mismo proyecto imperialista europeo, y los partidos políticos que les representan y las hordas neoliberales incrustadas en sus partidos (PP,Cs,PSOE,PNV,PDCAT,CC) ejecutan tales políticas. No pretenden realizar una política soberana que haga frente al brutal ataque del capital financiero español y transnacional contra los intereses de la clase obrera, ni mucho menos que impulse un desarrollo económico sostenible e independiente. No debe extrañar que acepten que los estados europeos de la «Europa rica» dominen nuestras economías, que el Banco Central Europeo (controlado por la banca alemana) como poder financiero sin ningún control democrático subaste nuestra deuda pública a la banca privada, que no cuestionen la OTAN ni la implicación en las intervenciones y guerras imperialistas de saqueo y control de las rutas y recursos (Yugoslavia, Afganistán, Líbano, Congo, Libia, Siria, etc.), que apoyen una UE que no reconoce la ley de huelga, que promueve las privatizaciones de la sanidad, enseñanza, etc., que den apoyo a regímenes autocráticos como Arabia Saudí, Marruecos, y colonialistas como Israel, que criminalicen el comunismo y el antifascismo.
Fue Comorera quien dijo que colocar al derecho de autodeterminación al margen de la lucha de clases es caer en el campo del imperialismo. Tras el referéndum en el que el pueblo griego rechazó un rescate con más recortes demostró lo que le vale a la UE la soberanía de los pueblos. Tsipras al defender la UE sin una alternativa de clase claudicó ante la Troika aceptando un rescate mucho más duro. La independencia política no tiene nada que ver con la independencia económica bajo el imperialismo. Ya dije en otro artículo (31) que la democracia no es sólo votar, sino el poder del pueblo, y votar más allá de ejercer un derecho irrenunciable, en realidad, no es disponer de los principales medios de la economía que está hoy en manos de las oligarquías catalana y española, vasallas del imperialismo.
Vía independentista sin acabar con la austeridad
En las elecciones catalanas del 27S del 2015 planteadas como plebiscito por ERC-CDC los partidos independentistas consiguieron el 47,81% de los votos, menos de la mitad, perdiendo 1 diputado respecto a las anteriores, pero logrando la mayoría absoluta gracias a la Ley d´Hont, algo que la izquierda independentista ya no cuestiona, una ley predemocrática donde el voto de las grandes ciudades donde predomina el voto obrero, tiene menos valor que el voto de las ciudades más pequeñas y las comarcas rurales.
La CUP cambió su posición inicial de no respaldar la declaración unilateral de independencia al no disponer mayoría absoluta de votos, cediendo en la lucha clasista contra los recortes por el procés poniéndose al servicio de Junts Pel Sí, aceptando recortes presupuestarios e ignorando la corrupción de CDC blanqueada en PDCAT, un partido catalán con afinidad con el PP en política económica, un partido que con Jordi Pujol a la cabeza fue el bastón de apoyo de Felipe González para apoyar Maastrich y pegarle la patada a IU, un partido de apoyo al gobierno del Aznar de las Azores, un partido neoliberal y demócrata cristiano responsable por sus políticas del subdesarrollo social de Catalunya, un partido que abraza la independencia para impedir una mayoría de izquierdas que les eche por la gestión de la crisis y los recortes. ¿Nos acordamos que el «no nos representan» del 15M contra las políticas de austeridad se aplicaba tanto al govern de la Generalitat de CiU como al gobierno de España del PP? ¿Nos acordamos de la huída de Mas en helicóptero y de las cargas policiales de los mossos contra los manifestantes en las protestas de Aturem el Parlament y sus agentes infiltrados de paisano?
La lucha de clases no ha desaparecido en Catalunya con el movimiento independentista. Los recortes, privatizaciones y reformas laborales, aprobadas todas por CDC en alianza con el PP, son los responsables de la sobreexplotación de la clase obrera catalana, y del déficit del estado de bienestar con respecto a la UE. El reparto de la riqueza en Catalunya durante la gestión de la crisis ha posibilitado que en los últimos 8 años (2008-16) las rentas salariales hayan caído 4 puntos al 46%, mientras que las rentas del capital han aumentado 3 puntos al 45%. En los últimos Presupuestos de la Generalitat del 2017 el gasto social se ha recortado un 11,1% con respecto al 2010 (32), ¿Nos acordamos de la eliminación de las pagas extras de los empleados públicos, la subida del agua, el copago a los enfermos de larga duración, el tijeretazo a las universidades y la dependencia y las dobles listas de espera en la sanidad pública para promocionar la sanidad privada? En Catalunya, como dice Warren Buffet, la lucha de clases la ganan los ricos, las grandes empresas y la banca ya han salido de la crisis que han generado.
En la CUP «anticapitalista» la política de clase queda relegada por la política nacionalista al sumarse al procés que lidera CDC. Dicen como acto de fe que «con la independencia se solucionará todo», que el problema social catalán está causado por España, ignorando la explotación capitalista en Catalunya, y así justifican junto a ERC su alianza con la derecha catalana.
¿Nos imaginamos a nivel estatal a IU o UP apoyando los recortes del PP o del PSOE y mirando de lado a la corrupción con el pretexto de la defensa de la unidad de España y que eso lo «solucionará todo»? Ridículo ¿verdad? Pues aquí en Catalunya no hay reparos con el PDCAT una fuerza política radicalmente proimperialista, prosionista y neoliberal, promotora de privatizaciones, reformas laborales y de apoyo a guerras imperialistas (Yugoslavia, Libia, Palestina…), aquí tenemos un govern de unitat nacional con ERC socialdemócrata y el PDCAT conservador (Junqueras-Mas/Puigdemont), tipo SPD-CDU alemán (Schroder-Merkel).
En definitiva, el nacionalismo independentista implica no enfrentar los problemas de clase y los problemas de la crisis, los desplaza para más adelante, cuando seamos independientes. Pero ¿alguien cree que la independencia de Catalunya es una ganga de ocasión para conseguir la ruptura democrática, romper con Bruselas, Frankfurt y Washington, evitar los «rescates» financieros y salir de la crisis?
El motivo principal del porqué todavía existe una mayoría de la clase obrera catalana no apoya la independencia es porque el procés está dirigido por la misma derecha responsable del retraso social en Catalunya. Elegir entre Rajoy y Puigdemont no es la alternativa, son más de lo mismo. Y en este campo no se puede seguir pervirtiendo a Lenin quien fue claro: «el proletariado sólo puede conservar su independencia subordinando su lucha por todas las reivindicaciones democráticas, sin excluir la república, a su lucha revolucionaria por el derrocamiento de la burguesía» (33). Aplicándolo a nuestra época ¿alguién del movimiento independentista ha mencionado siquiera la independencia política y económica de Bruselas, Berlin, la OTAN y la Troika? Mas bien no. Procés i res més que procés.
Aplausos y vítores a los cuerpos policiales que reprimen las legítimas movilizaciones
Hemos visto estos días cómo ciudadanos independentistas aplaudían a la policía autonómica, también hemos visto los apretones de manos, vítores y besos a la policía nacional y la Guardia Civil por ciudadanos unionistas. Ninguno de los que hemos participado en huelgas, movilizaciones y protestas, que hemos corrido delante de cargas policiales, de los disparos con pelotas de goma, se nos ocurrió aplaudir, ni besar, ni vitorear a quienes reprimían. Tampoco los compañeros/as de la PAH que han protestado se les ocurrió aplaudir a los mossos o a la policía nacional cuando echaban a la calle a nuestros vecinos y sus familias. En Murcia tampoco hemos visto a los vecinos que se manifestaban contra el muro del AVE aplaudir a los cuerpos policiales que les han reprimido con una brutalidad similar a la del 1-O.
España, Catalunya incluida, es el segundo país que tiene mayor número de policías por habitante por detrás de Chipre, y el mismo número de policías que Alemania, país que nos supera en 35 millones de habitantes (34). En cuanto al gasto que supone, es el quinto país de la UE28 que más gasta en orden público (2% del PIB) por encima de la media de la UE (1,8%) (35). Una desproporción si tenemos en cuenta que España tiene una de las tasas de delitos más bajas de la UE.
Pues bien, a pesar de tanto policía para tan pocos delitos, ahora con la crisis política del Estado, se está promoviendo desde la fiscalía que las manifestaciones contra la actuación de los cuerpos policiales tenga el tratamiento de delito de odio en aplicación de la ley mordaza, con penas que van de 1 a 4 años. Expertos del código penal manifiestan que este delito de odio sólo está tipificado para los motivos de racismo, antisemitismo, ideología, religión, creencias, etnia, raza, nación, origen nacional, sexo, orientación o identidad sexual, género, enfermedad o discapacidad, y que en ninguno de estos motivos se puede contemplar como delito de odio, ya que los cuerpos policiales ni disponen de una ideología, u orientación sexual, creencia, religión, etc., propias (36). Lo que sí puede ser delito de odio es ver a Guardias Civiles de paisano, fuera de servicio, cargando contra ciudadanos o los grupos ultras que intervienen con consignas y agresiones contra ideas, origen nacional, etc., los pasados 😯 y 12-O en Barcelona y el 9-O en Valencia. ¿Seguimos aplaudiendo?
Ni hispanofobia, ni catalanofobia. Unidad de las clases populares
Es falso que el nacionalismo franquista haya salido de la caverna al calor del independentismo, sino más bien al calor de la impunidad del franquismo y el PP. Ello no quiere decir que tengamos que avalar cualquier sectarismo y prejuicio hacia todo lo español que también se manifiesta en sectores minoritarios del independentismo. Hay una España y una Catalunya socialmente mayoritaria de izquierdas, y no nos podemos dejar embaucar por una minoría de catalanófobos e hispanófobos que se retroalimentan en el nacionalismo identitario para enfrentar a los trabajadores de las diversas naciones del Estado. Las palabras de Forcadell del «no són catalans» (37) cuando era presidenta de la ANC no distan mucho de las recientes palabras de Albiol cuando habla de los «buenos catalanes» (38), no hablan de clases sociales, hablan desde la exclusión. Inadmisible desde una posición democrática y pluralista.
Ese sectarismo de sectores independentistas hacia quienes estando de acuerdo en realizar un referéndum pactado de autodeterminación no comparten la agenda del 1-O (39), ni la declaración unilateral de independencia, como es el caso de alcaldes y alcaldesas como Colau, Marín, etc., como Unidos Podemos, artistas e intelectuales, etc., colocándose por oposición a todo lo español, llevando a las clases populares a este enfrentamiento identitario e historicista, cae, en el olvido de la memoria histórica.
España no es toda la España del PP, ni la de los «a por ellos». Fueron los españoles republicanos de La Nueve los primeros en entrar en París el día de su liberación en 1944, fueron españoles republicanos los que murieron en Mauthausen y los que están reposando en las cunetas, fueron españoles de izquierdas y republicanos los que se han concentrado en la puerta del Sol masivamente estos días, fueron españoles de izquierdas los que se reunieron en Zaragoza en la Asamblea de cargos públicos de Unidos Podemos increpados por 500 ultras organizados por el PP.
En nuestra historia no sólo existe la «España negra» de señoritos, caciques, monarcas absolutos, patíbulos, fachas, corruptos, vividores y dictadores fascistas, también existe la España democrática, trabajadora, antifascista y republicana. La España de la república de trabajadores de todas las clases populares que nos robaron en Figueras y Sanlúcar de Barrameda. ¿Acaso Lenin no hablaba del orgullo ruso por crear una clase revolucionaria y dar ejemplos de lucha por la libertad, la democracia, la república y el socialismo? (40).
Lenin advertía que dejarse llevar por el odio, legítimo y natural con los opresores hasta el extremo de hacer extensivo ese odio a la causa de los obreros de la nación opresora, es caer en la charca del nacionalismo burgués, de la misma forma que si se olvida la reivindicación de la igualdad de las naciones y el derecho de autodeterminación de la nación oprimida se cae en un nacionalismo burgués reaccionario, en los peores prejuicios nacionalistas de la nación dominante, siendo éste el mayor freno para la democracia y la lucha obrera (41).
Catalunya tampoco ha sido ni es siempre la Catalunya que queremos, también tiene sus puntos negros como la historia de España con una burguesía que se benefició del imperio colonial y la esclavitud, que clamó al gobierno de España para reprimir al movimiento obrero naciente en el siglo XIX y principios del XX, que financió mercenarios que luchaban contra los independentistas cubanos, que creó los cuerpos parapoliciales del somatén disueltos por la IIª República y rescatados y extendidos por el franquismo en toda España hasta 1978, que ordenó el asesinato de sindicalistas en los años 20, que apoyó la dictadura de Primo de Rivera, que desertó a Burgos cuando fracasó el golpe de estado del 18 de julio de 1936, que volvió en 1939 con la falange, que apoyó al franquismo y dio sus intelectuales al régimen (42), y que tiene hoy en el PDCAT al partido tan neoliberal, antiobrero y corrupto para Catalunya como lo es el PP para España. No es casual que este partido no votara la moción de censura de UP al gobierno del PP.
¿Identidad nacional o lucha de clases?
Se está utilizando un término que no corresponde a la crisis política que se está viviendo. Se habla de «fractura social». Utilizando términos marxistas la fractura social se da únicamente entre las clases sociales, por la explotación y las desigualdades que el capitalismo crea. Estamos ante una fractura identitaria que oculta la lucha de clases. Los dos nacionalismos en pugna atraviesan y dividen políticamente a todas las clases sociales, y afecta incluso a organizaciones sociales y sindicales representativas. Y ello es debido porque la política identitaria ha ganado el pulso del debate en la lucha de clases, porque el movimiento obrero no tiene una posición independiente de clase y republicana que haga frente a los dos nacionalismos.
La clase obrera catalana y española debe acrecentar su unidad y antagonismo contra las burguesías, por la república federal y el socialismo, no hay otra alternativa. Tenemos más en común los obreros y clases populares de Catalunya, Asturias, Andalucía, Madrid y Valencia, que las oligarquías y patronales de Catalunya, Asturias, Andalucía, Madrid y Valencia.
Los conflictos identitarios pueden ocultar pero no eludir que la lucha de clases es el motor de la formación socioeconómica nacional catalana, que no existe una identidad pura nacional ni catalana ni española, que la historia nos enseña que no puede haber una unidad nacional entre clases antagónicas de la misma manera que tampoco existe un Estado neutro en la lucha de clases. Nuestra historia se cristaliza en nación consagrando actualmente la dominación de la burguesía sobre la clase obrera, donde la nación y las formas de sus instituciones son resultado de la lucha de clases en dos sentidos, de la burguesía contra la clase obrera y de las luchas de la clase obrera contra la burguesía.
Marx y Engels nos decían en el Manifiesto que «los obreros se constituyen nacionalmente como clase, pero no en el mismo sentido que la burguesía». Al constituirse el proletariado en fuerza nacional, comienza su lucha por apartar a la burguesía de la dirección de la nación y por organizar la verdadera unidad de las naciones. La clase obrera no puede permanecer indiferente ante las condiciones políticas, sociales y culturales de su lucha, ni los destinos de su país, los cuales le interesan en lo que atañen en su lucha de clase pero no en virtud de un patriotismo burgués. Hay que recuperar la cultura del PSUC: catalán es el que vive y trabaja en Catalunya, consigna que refleja el sentimiento de clase, nacional y solidario de la mayoría social, la clase obrera y las clases populares. El PDCAT con su gestión neoliberal de la crisis y su nacionalismo excluyente, ni quiere ni puede representar esa cultura, para ellos los más catalanes siempre han sido los que se enriquecen con la explotación y la corrupción. La izquierda no puede caer en aquel falso patriotismo de CiU o PDCAT o del PP-Cs-PSOE que identifica los intereses de la clase obrera con los de los banqueros y grandes empresarios (incluso con los cuerpos represivos), sean catalanes, españoles o europeos, frente a los intereses de la clase obrera, sea andaluza, madrileña o asturiana. Quienes hoy dirigen el debate en las instituciones sobre la cuestión nacional son los catalanistas y españolistas de derechas. La izquierda debe cuestionar ese patriotismo nacionalista, catalán, español, o europeísta, neoliberal, responsable de las políticas que están dañando a la población.
¿Quiénes roban a Catalunya, España o Pedralbes? La izquierda independentista se equivoca al considerar el expolio como una cuestión territorial y no de clases. El Ibex35 dispone de 467 filiales en paraísos fiscales de las cuales casi la mitad, 222, son de Catalunya (43). Según GESTHA el fraude fiscal de Catalunya se eleva cada año a 16.000 millones de euros, fraude que se produce en grandes empresas y fortunas, más que la transferencia fiscal que se reclama a Madrid. Catalunya es una de las regiones más ricas de Europa, mientras que el salario mínimo es uno de los más bajos de la UE15, gasta un 12% menos de su PIB que la media europea al gasto público social, equivalente ya a más de 20.000 mill. €. El verdadero expolio fiscal es el de clases, el que se produce tanto en Barcelona como en Madrid, ambas capitales expolian a la clase obrera y al estado de bienestar. Somos los 23 millones de trabajadores en activo en España, de los que 3,8 millones somos catalanes, los expoliados por el capital, porque somos los que lo estamos pagando todo para mantener el Estado y las administraciones autonómicas y locales, mientras el resto gozan del fraude y la evasión fiscal. Una Catalunya independiente o con un concierto fiscal diferenciado no es garantía para cambiar la política económica y superar el diferencial negativo de gasto público social.
La izquierda independentista ha cometido el error de no establecer una alianza con la izquierda no independentista. Han sido las izquierdas las que posibilitaron el Estatut del 2006 con referéndum (ERC, PSC, ICV, EUiA). Se equivocan también cuando ignoran que una parte de la nación catalana que apuesta por el dret a decidir quiere permanecer dentro de una España plurinacional y multilingüe. Son las izquierdas las que en España piden el referéndum (Podemos, IU, Compromís, En Marea, En Comú). La izquierda junto a PDCAT ha excluido a partidos, sindicatos, AA.VV., organizaciones sociales y ayuntamientos no independentistas firmantes del Pacte pel dret a decidir de la campaña del referéndum. Desde el Govern con su mensaje independentista ha instrumentalizado este movimiento democrático. No tienes que ser independentista para apoyar el derecho democrático a decidir, el derecho democrático a la autodeterminación, la mayoría de la población catalana está por un referéndum pactado, sin que eso suponga que sea independentista.
La izquierda independentista ha cometido el error de no establecer una alianza con los pueblos de España con las izquierdas, ha ninguneado la posición favorable de Unidos Podemos y En Comú a un referéndum de autodeterminación pactado en el que se exprese todo el pueblo de Catalunya sin exclusiones. Precisamente en un momento en el que se está reformulando la opción republicana y federal, con las plataformas por la IIIª República, el cambio de las posiciones del PCE e IU desde hace 8 años, antes de la anulación del Estatut, las nuevas izquierdas parlamentarias que quieren cambiar España, la posibilidad de avanzar hacia una ruptura democrática con el régimen impuesto durante la transición. Precisamente en el 2014 las manifestaciones por la República en España fueron multitudinarias tanto en Madrid como en Barcelona, más masivas que el acto de la coronación de Felipe VIº.
Fue Comorera quién planteaba que una monarquía restaurada o una Europa imperialista no garantizaría a Catalunya el derecho a la autodeterminación, que Catalunya no puede aislarse, que no puede resolver su problema nacional desentendiéndose del problema del imperialismo y la lucha de la clase obrera, que esa posición es reaccionaria, que la pervivencia del imperialismo comporta la opresión nacional, que sólo la república popular española dirigida por la clase obrera puede hacerlo posible, y que la república popular sólo se puede conseguir luchando en fraternal unión con el resto de España, que mientras la clase obrera catalana es la columna vertebral de Catalunya la clase obrera española es la máxima garantía para la realización de las aspiraciones nacionales (44).
Aplicándolo a nuestra época ¿nos podemos plantear que una constitución monárquica reformada garantizaría a Catalunya el derecho de autodeterminación? No. ¿Nos podemos plantear que aislados en una Europa dominada por el imperialismo, Catalunya recobraría su soberanía? No. ¿Nos podemos plantear el derecho de autodeterminación sin luchar fraternalmente por la República federal española? No. ¿Nos podemos plantear el derecho de autodeterminación sin el apoyo de la clase obrera española? No.
La resolución del conflicto político y social, pasa por colocar en primer plano la lucha de la clase obrera y sectores populares de toda España contra las oligarquías financieras, entender el derecho de autodeterminación junto a la lucha de clases, contra el imperialismo y por la defensa de la república federal como alternativa a los dos nacionalismos, una república que represente lo mejor de la España antifranquista y heredera de los españoles que lucharon contra la barbarie fascista en Europa. No es un conflicto entre Catalunya y España, sino entre la clase obrera y todas las burguesías. Las burguesías catalana y española ocultan esta realidad para arrastrar a los obreros a su política de unidad nacional, y enfrentarlos territorialmente. Debe ponerse en marcha toda España, incluida Catalunya, un proyecto de frente de izquierdas, que coloque la lucha contra los recortes y la abolición de las leyes austericidas y el proceso constituyente por la república como objetivos principales de la lucha social y política. La unidad popular debe pasar por ahí, lo contrario significará ir a remolque de las burguesías catalana, hispanas y europeas: ¡No al expolio fiscal causado por la burguesía con el fraude, evasión, privilegios y paraísos fiscales! ¡No al expolio fiscal causado por la burguesía con el rescate a la banca y los objetivos de déficit y deuda a cargo de nuestros salarios y el recorte de nuestros servicios y prestaciones sociales públicas! ¡No al expolio fiscal causado por la burguesía con las reformas laborales que abaratan y facilitan el despido y reducen las cotizaciones sociales de los empresarios! ¡Por una República democrática y federal que reconozca el carácter plurinacional de España!. Ese es el camino, lo demás son ganas de rendir tributo a nuestros explotadores y opresores.
La participación del 1-O tiene mucho que ver con el auge del independentismo en la cuestión nacional, pero también por la solidaridad contra la represión impulsada por el PP. No obstante, a diferencia del 9N es una movilización que el Govern de la Generalitat va a reivindicar no por el derecho a decidir, sino para la DUI. 2 millones de votos a favor de la independencia en un marco de represión policial, sin dejar de tener importancia, no es una clara mayoría ya que se está lejos del 50% del censo no oficial con el que se hizo la consulta. En los referéndums de Escocia o Quebec la participación alcanzó el 84,6% y el 93,5% respectivamente, en contraste el 1-O sólo alcanzó el 43% del censo no oficial, según los convocantes, con un 38,5% de a favor de la independencia, inaceptable desde una exigencia mínimamente democrática.
El referéndum para tener legitimidad democrática, debe tener un mínimo de participación, debe contemplar toda la pluralidad del pueblo catalán, debe ser imparcial y transparente, con una campaña electoral que exprese todas las opciones, con un censo oficial, con todas las posiciones representadas en el proceso de votación y recuento de votos, debe contemplar en la consulta las diferentes opciones tanto para el Sí (independencia) como para él No (reforma monarquía parlamentaria o República Federal). Lenin decía que el reconocimiento del derecho de autodeterminación de las naciones hay un máximo de democracia y un mínimo de nacionalismo (45). También carece de legitimidad democrática la aprobación en el parlament de la ley de transitoriedad para la DIU sin disponer tan siquiera de 3/5 partes del parlament y con menos votos que los partidos no independentistas.
En consecuencia las condiciones para reconocer la jornada del 1 de Octubre como referéndum de autodeterminación real no se dan por la exclusión de la otra parte de la sociedad catalana plural contraria a la independencia. El conflicto con el Estado sólo se puede resolver democráticamente con un referéndum con garantías, vinculante y acordado. No se puede ignorar a ambos lados del Ebro que el 82% de los catalanes estamos a favor de un referéndum acordado sobre la pertenencia o no de Catalunya a España y sus modalidades, como la república federal.
Resulta hipócrita escuchar críticas contra el 1-O por parte del PP y Cs sobre la participación y las garantías precisamente cuando niegan cualquier referéndum en Catalunya, como negaron el del Estatut en el 2006 y como niegan ahora la posibilidad de uno pactado.
¿Es Catalunya una nación oprimida?
Lenin que como veremos más abajo tenía una posición de clase sin condiciones a uno u otro nacionalismo, colocaba la lucha de la clase obrera contra los privilegios y violencias de la nación opresora y tampoco permitía tolerancia alguna respecto a la tendencia de la nación oprimida hacia los privilegios (46).
En este momento se están conculcando derechos políticos y de pensamiento sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación en España. Catalunya está sufriendo una situación de maltrato político por plantear ese derecho. Esta situación puede ser sobrepasada por los acontecimientos con la suspensión/usurpación de la autonomía derivando hacia una opresión política con tintes represivos, que ya se ha saldado con carcel sin fianza,c on los dos portavoces de la ANC y el Omnium, presos políticos por la manifestación del 21S. Pero la inmediatez de los acontecimientos no debe desviarnos para analizar la realidad catalana en el período histórico anterior que abarca las últimas décadas de nuestra historia.
El derecho de autodeterminación siguiendo el hilo del derecho internacional está reservado a naciones sometidas a la dominación colonial u ocupación militar que impiden su propio desarrollo económico y cultural, recogida en el pacto internacional de derechos civiles y políticos de 1966. Siguiendo este derecho vemos que Catalunya no es una colonia, ni ha sido invadida por un ejército de ocupación, y en las últimas décadas no se le ha excluido sus derechos de idioma, cultura o autonomía de gobierno. El catalán está protegido y promovido en Cataluña, siendo el idioma principal en las administraciones y enseñanza públicas, siendo exclusivo en la enseñanza superior. La situación de opresión por parte del Estado tiene que ver más con las relaciones de clase, que con la opresión de las naciones, como el aumento de la explotación de la clase obrera y el aplastamiento de sus derechos sociales y de movilización (recortes, mordaza) el cual ocurre no sólo en Catalunya sino en todas las CC.AA. sin exclusión.
Es innegable que las cosas ya no son iguales que bajo el franquismo, no existe una opresión nacional completa sobre el idioma catalán. Es cierto que no dispone el mismo rango oficial a nivel del Estado, pero hoy no existe un ataque serio a la realidad cultural del pueblo de Catalunya. Más del 80% de los catalanes hablamos catalán y más del 94% lo entendemos. Ni el franquismo, ni las políticas educativas del PP han hecho mella en esa realidad. Catalunya no es Rosellón, donde el único idioma oficial es el francés, mientras que el catalán es un idioma optativo en la enseñanza y sólo lo habla el 8,9% de la población (47). Tampoco existe una privación de derechos del castellano que sigue siendo el idioma habitual más hablado entre la población. Catalunya no tiene nada que ver con lo que sucede en los países bálticos donde prevalece la privación de derechos de las minorías nacionales. Y el adoctrinamiento ideológico de carácter antidemocrático, clasista y excluyente tiene más que ver con la enseñanza privada nacionalcatólica no sólo catalana sino española, y nada que ver con la escuela pública, a pesar de los desvarios de Albiol y Rivera.
No hay que olvidar que fueron las organizaciones obreras, de padres y alumnos, vecinales y de izquierda las que lucharon y consiguieron la extensión del catalán entre la población inmigrada en los años 80. Mientras que la política lingüística y cultural de CIU ha sido y es elitista, con fuertes inyecciones de dinero público a la enseñanza privada, con nulas facilidades para la enseñanza de adultos, etc., política que no se dirigió ni se dirige a elevar el grado de instrucción y cultura de las clases populares, ni a la extensión de la lengua y cultura catalanas en tales clases. Es decir, el nacionalismo convergente no hizo nada por extender y defender la cultura catalana, lo hizo el movimiento obrero y la izquierda.
No obstante, la persistente negación de la realidad plurinacional de España desde la transición y ahora con la impugnación del Estatut del 2006, ha causado la implosión del problema ya que no se puede luchar contra todo nacionalismo sin propugnar la igualdad de las diversas naciones y la supresión de los privilegios de unas sobre otras. Y hoy el importante apoyo social y político del independentismo catalán justifica urgentemente la convocatoria de un referéndum de autodeterminación, no como aplicación del derecho internacional, sino como una respuesta política y democrática a una exigencia de una parte creciente del pueblo catalán.
Las contradicciones de la izquierda no nacionalista en Catalunya
Tanto Lenin como Comorera planteaban, que por un lado los comunistas de la nación opresora tienen el deber internacionalista de defender el derecho de autodeterminación incluyendo la separación, y por otro, los comunistas de la nación oprimida tienen el deber internacionalista de defender con firmeza la unidad voluntaria con la antigua nación opresora, con su proyecto democrático y no junto al nacionalismo de la nación opresora (48). Y este derecho sólo se puede realizar mediante un referéndum, al cual los comunistas catalanes deben ir con una posición propia, y que en el caso de Catalunya pasa por la defensa de la unión en el marco de una República Federal. No la independencia.
¿Qué dicen los partidos comunistas en Catalunya? El PCC antes de su autodisolución que planteaba un proceso constituyente hacia una República Federal plurinacional en España de forma ambigua, ya que también planteaba otro proceso constituyente para Catalunya no subordinado al de España y comenzaba a apostar con ambigüedades por el independentismo: «el nostre es un SÍ rotund a la voluntat de Catalunya de ser un Estat» (49). Y esto se admitía a pesar de reconocer que la ANC y el Omnium van a cambiar su objetivo de trabajar por el derecho a decidir por el de la independencia, y que este estaba liderado institucionalmente por los líderes de CDC, un partido neoliberal en la gestión de la crisis y nacionalmente excluyente. Esta posición se impuso en EUiA que incluso llegó a apostar por unos EE.UU. de Europa (50), cuestionando la teoría leninista del eslabón más débil (51). Más tarde, en marzo de 2015 el coordinador de EUiA firmaría la hoja de ruta marcada por CDC, antes de que la CUP cambiara de postura, abriendo una crisis interna en EUiA. En su congreso las juventudes de C.cat han apostado por la independencia de Catalunya y ante el 1-O el ejecutivo de C.cat decide ir a votar por la independencia, participando el coordinador de EUiA en el cierre de campaña por el SÍ ante 70.000 independentistas.
Comorera nunca separó la lucha de clases en Catalunya con el resto de España, siempre planteó que la lucha contra el régimen terrorista franquista exigía la máxima unidad de Catalunya con el resto de pueblos de España, y que sólo la derrota del franquismo podía garantizar el derecho de autodeterminación de Catalunya como nación reconocida integrada en la nueva España republicana popular dirigida por la clase obrera (52).
El PSUCviu aunque en su XV Congreso va a apostar por una España republicana y federal, va a degenerar su posición, implicándose en una asociación denominada «federalistas d`esquerras» que nace en septiembre del 2012, la cual ni se plantea la república como modelo de estado, que el PSUCviu ya en su conferencia nacional de febrero de 2017 la coloca en el horizonte, o sea, a largo plazo. El desvarío es de tal envergadura que se llega a participar en un acto de «federalistas d’ esquerras» junto a Iceta (PSC) y el uninacional españolista Rivera (Cs) (marzo de 2015) (53). El último acto que se celebró en Sant Joan Despí (28 septiembre 2017) contó precisamente con quienes abandonaron la ruptura democrática durante la transición y sólo apuestan por una nueva transición, una reforma de la constitución dentro de la monarquía, los viejos eurocomunistas, Sartorius, Vintró, el PSC (Poveda), y el uninacional Villarejo entre otros. Hay quienes hablan de la manifestación del 😯 de «los abandonados», refiriéndose a los miles de obreros que fueron a una manifestación convocada por la derecha y la ultraderecha porque se sienten españoles y no encuentran expresión en otro sitio. ¿Y porqué no fueron a la manifestación del día anterior por el diálogo? O más claro. ¿Porqué los partidos que en teoría son republicanos no han convocado ya en Catalunya una manifestación junto a las plataformas por la IIIª República? Porque les falta proyecto propio.
Iniciativa-Verds fiel a la herencia eurocomunista y carrillista va a renunciar a la ruptura democrática y su federalismo no va más allá de la legalidad constitucional vigente, evidentemente reformable, faltaría más, posición similar al PSC. ¡Qué lejos se está ya de Lenin, cuando planteaba tratar cualquier reivindicación democrática de forma revolucionaria y no reformista, rompiendo el marco de la legalidad burguesa! (54).
Fue un espectáculo ver al grupo parlamentario de CSQP coalición de Podem-ICV-EUiA partido en dos partes en el pleno del parlament ante la propuesta de referéndum unilateral de los grupos independentistas para el 1-O. Unos haciendo coro con los independentistas y otros con el portavoz a la cabeza no yendo más allá de la legalidad constitucional (55) (postura avalada incomprensiblemente por el PSUCviu), sin tan siquiera denunciar que dicha legalidad fue ya rota por el PP y sus jueces del Tribunal Constitucional, no llegando ni a plantear una posición propia de referéndum de garantías, vinculante, con unos mínimos de participación y con una pregunta que contemplara en el No la opción de la República Federal, desmarcándose así de los dos bloques nacionalistas (independentistas y monarquistas).
Las diferencias internas de CSQP son clamorosas, Nuet y Albano pidiendo el Sí a favor del procés hacia la independencia, encabezado institucionalmente por PDCAT, como modelo de ruptura democrática, e ICV a favor de una segunda transición dentro de la monarquía. ¿O a caso hemos visto vez alguna al diputado Coscubiela levantar la voz para pedir la ruptura democrática y recuperar la república? ¿No hubiera estado mejor al retirar las banderas monárquicas colocar en su sitio banderas de la república? ¿Dónde están las banderas de la república? ¿Porqué los diputados/as no las tienen a mano?
Así ninguna de las posturas se acerca lo más mínimo a lo planteado por Lenin y Comorera. La cuestión nacional ha cambiado mucho en Cataluña, no nos encontramos en 1936 cuando el PSUC disputaba a la pequeña burguesía de ERC la dirección del movimiento nacional catalán desde una posición de clase. Tampoco nos encontramos en los años 70 cuando el PSUC y las CCOO hegemónicos en el movimiento obrero y antifranquista apostaban por la ruptura democrática, la república y el socialismo. Hoy el movimiento nacional catalán está dirigido y hegemonizado por la derecha, los intelectuales y la pequeña burguesía, mientras la clase obrera sin dirección política independiente, republicana e internacionalista que se exprese en la calle en movilizaciones propias, va a la zaga de los dos nacionalismos. Y aquí es donde la política independiente de la clase obrera en base a sus intereses de lucha de clase cojea.
Las contradicciones de la izquierda española no nacionalista
Lenin situaba como falsa la posición de considerar la cuestión nacional de las naciones sin Estado como de un problema que sólo afecta a la burguesía y que considera los movimientos nacionales como objetivamente enemigos de la clase obrera. Para Lenin, la clase obrera debe tener posición propia y dar alternativas a la cuestión nacional y colonial.
Dolóres Ibárruri en un extenso informe presentado al Pleno del Comité Central del PCE en septiembre de 1970 adelantaba cual debía ser la posición propia de la clase obrera española: que el reconocimiento del derecho de autodeterminación de los pueblos y naciones, es la piedra angular de la teoría marxista-leninista en la cuestión nacional, que en España la cuestión nacional va indisolublemente unida a la lucha por la democracia y el socialismo, que España no es una nación única sino un Estado multinacional, que la clase obrera en alianza con las fuerzas democráticas debe hacer suya la defensa del derecho de Catalunya, Euskadi y Galicia a la autodeterminación, que ésta variedad de naciones deben integrarse en una nueva formación estatal federal en un plano de igualdad de derechos en el idioma, cultura y desarrollo económico, que el federalismo es la forma de transición a la unidad completa de la clase obrera de las diversas naciones, y que la mejor solución transitoria es el establecimiento de una república federal en la lucha por el socialismo (56). Décadas antes en el PSUC Comorera planteaba la república federal (57).
Partiendo de esta posición, la actual constitución niega la república como forma de Estado y los actuales estatutos de autonomía niegan la identidad nacional de los pueblos catalán, vasco y gallego. Se sigue considerando España como nación única. La visión uninacional de España que en la IIª República tenía máximos valederos a las fuerzas conservadoras (CEDA, Renovación española, Comunión tradicionalista, partido republicano radical de Lerroux y la Falange), y luego el régimen franco-falangista, hoy está presente en el PP, Cs, los sectores felipistas del PSOE y el poder mediático con El País, La Razón, ABC y El Mundo a la cabeza.
La izquierda (PCE-PSOE) y el movimiento obrero afirmó el derecho de autodeterminación en la lucha contra el franquismo para luego pasar a negarlo en la transición, y renegando de la ruptura democrática con el régimen franquista. La constitución de 1978 es el resultado de esa negación.
Salvo en el Vº Congreso del PSUC, no se ha hizo hasta 3 décadas a posteriori (XVIII Congreso del PCE) una autocrítica sobre el proceso de transición donde la dirección eurocomunista asumió el proyecto político programado y permitido por el imperialismo para nuestro país, la monarquía, la impunidad del régimen y los pactos de la Moncloa como «alternativa» a la crisis dentro del capitalismo. Carrillo llegaría al extremo de confesarse monárquico (58). Renunciando a la ruptura democrática y al proyecto socialista en un momento de ascenso de la lucha de clases en España, Europa y el mundo, muy difícil para poder articular una salida reaccionaria a la crisis orgánica del régimen franquista. La «vía democrática hacia el socialismo» o «socialismo en libertad», se convirtió en la práctica en Europa occidental en aceptar las reglas del juego de la democracia burguesa, llegando al «compromiso histórico» con la clase dominante.
Rehabilitar a los represaliados por el régimen franquista y restituir el régimen republicano fueron objetivos de la ruptura democrática en los años 70 del S.XX, objetivos enterrados por el eurocomunismo y la socialdemocracia a cambio de una transición que ni fue modélica, ni pacífica, que fue regada con asesinatos de bandas paramilitares fascistas y terrorismo de Estado, que mantuvo el aparato franquista, amnistió a los asesinos y torturadores del régimen, condenó al olvido a los militares antifascistas que defendieron la república o los que lucharon contra el régimen franquista, que permitió a los franquistas seguir en política como si nada y que impuso una ley de punto final a la memoria histórica. España sigue siendo el cementerio más grande de desaparecidos de Europa con 150.000 republicanos españoles víctimas de genocidio en las cunetas y fosas comunes. Los símbolos franquistas, fascistas y nazis son tan legales aquí como en los países bálticos y Ucrania, donde el revisionismo histórico campea a sus anchas.
Es imposible avanzar en derechos democráticos y sociales sino se supera el régimen de 1978. La izquierda y el movimiento obrero deben recuperar la propuesta de ruptura democrática apostando por la república federal. Fue Lenin quien planteó la reivindicación de la república democrática de las clases populares (obreros y campesinos) como una posición revolucionaria frente a la monarquía parlamentaria de la Duma defendida por los mencheviques como una posición reformista. Unidos Podemos y el movimiento obrero español seguirán yendo a la defensiva si no clarifican la apuesta por un proyecto de ruptura democrática al dejar de lado la reivindicación republicana, por miedo a definirse, y si no reafirman la centralidad de la lucha de clases y no une a los movimientos sociales para combatir las consecuencias y causas de la crisis.
La lucha por dar solución al problema nacional va ligada a la lucha por la república federal, pero sólo se puede dar solución definitiva al problema nacional mediante la construcción de una sociedad sin explotación ni opresión, el socialismo. El capitalismo por su propia naturaleza, jamás ha sido capaz de resolver el problema nacional, de igualdad plena de derechos políticos, de cooperación, paz y desarrollo económico igual de las naciones. En su fase imperialista el capital refuerza la opresión nacional y el desarrollo desigual de las economías. Ello no quiere decir que tengamos que renunciar a la lucha inmediata por las reivindicaciones democráticas aunque no sea realizable en lo económico o aplazarla para el socialismo, ya que si la clase obrera no sostiene una lucha consecuente, revolucionaria y amplia por la democracia, nunca estará preparada para vencer a la burguesía y luchar por el socialismo.
La igualdad de las naciones y el derecho de autodeterminación en la UE
Lenin distinguía entre los países que ya habían completado su revolución democrático burguesa, en los que se encuadraba los países de capitalismo desarrollado de Europa Occidental y EEUU, y los países que todavía estaban bajo el letargo feudal o la opresión colonial en los cuales el movimiento nacional es progresivo. A Rosa Luxemburg le contestaba que la reivindicación del derecho de autodeterminación no se encontraba en la mayoría de los programas de los partidos obreros marxistas de Europa Occidental porque el problema nacional ya estaba resuelto (59).
Hoy en los países capitalistas más desarrollados el movimiento nacional ha perdido su carácter progresivo, y en el orden del día se encuentra la lucha de clase contra la burguesía y por ampliar la democracia, lucha que se inscribe en los países imperialistas y más desarrollados, en la lucha por el socialismo.
Sólo se puede hablar de autodeterminación de las naciones en estos países como liberación nacional revolucionaria o progresista, bajo condiciones de ocupación militar y opresión nacional por parte de una potencia imperialista, como fue el caso de los países ocupados por la Alemania nazi, donde la tarea de la clase obrera en los países sometidos era la lucha de liberación nacional como único camino en la lucha por el socialismo (60). La historia demostró que no sólo pequeños estados, sino grandes, como Francia, fueron anexionados u oprimidos nacionalmente en Europa Occidental por una potencia imperialista durante la IIª Guerra Mundial.
En el resto de países de Europa donde predominaron a principios del S.XX regímenes semifeudales y donde se iniciaron revoluciones democrático burguesas, como era el caso del Imperio Ruso (donde las naciones de la periferia europea disponían mayor desarrollo del capitalismo), para Lenin la clase obrera debía contemplar en su programa político el derecho de las naciones a la autodeterminación tanto para Europa como Asia (61), como reivindicación negativa sin condiciones preservando el desarrollo y fortalecimiento de la clase obrera frente a la burguesía nacional de la nación opresora u oprimida, y apuntillaba que la renuncia a defender este derecho equivalía al peor oportunismo (62).
Estamos hablando de la Europa Oriental de principios del S.XX y de algunos países de Europa Occidental, como la España del primer tercio del S.XX. Sin embargo, los movimientos nacionales que en los países de capitalismo avanzado levantan hoy la bandera de la independencia, no tiene nada que ver con el movimiento nacional progresivo, responde claramente a los intereses de las burguesías que buscan un nuevo trato fiscal dentro de los Estados de los cuales forman parte o un nuevo estatus dentro de la UE que pase directamente por Bruselas, sueñan con la Europa de las naciones en la UE de las euroregiones, el cual se caracteriza por la dictadura de los elementos más reaccionarios e imperialistas del capital financiero, y por afianzar el desarrollo desigual al servicio de las transnacionales, en contra de la clase obrera y de las naciones y Estados dependientes de la periferia y el sur.
Esto quiere decir que los movimientos nacionales de Escocia, Baviera, Flandes, Valonia, Padania, Quebec, el sur de EE.UU. que se encuadran en Estados capitalistas e imperialistas desarrollados han perdido su carácter progresivo, y que su planteamiento va claramente en contra de los intereses de lucha de clase del proletariado. En general a la clase obrera no le conviene la separación de estas naciones.
Sobre Escocia, sería inexacto otorgarle en la actualidad el título de nación oprimida dentro del Reino Unido, ya que no ha habido ningún intento por parte de la clase dominante británica de negar a los escoceses sus derechos democráticos, incluyendo el derecho a la separación. Las clases dominantes de Escocia e Inglaterra (aristócrata y capitalista) se coaligaron durante un largo período histórico. Adam Smith, que escribió la biblia del capitalismo (La riqueza de las naciones) fue un economista escocés. Los bancos de Inglaterra (1694) y de Escocia (1695) fueron creados por el escocés William Patterson. Fueron estos bancos los que organizaron el saqueo colonial mediante el crédito para la que fue la primera economía capitalista de la historia. Escocia no fue un socio menor, jugó un papel en pie de igualdad y dirigente en la economía del Reino Unido, en la formación del imperio británico y la opresión de Irlanda. Los argumentos empleados por los independentistas hoy son el petróleo, el gas del Mar del Norte y el potencial económico que representa, y el desequilibrio fiscal territorial.
Aquí la cuestión nacional se desvanece todo es una pugna de regiones ricas que reclaman un mejor porcentaje de los ingresos que generan. La independencia no persigue combatir el imperialismo, sino someterse a la UE como un estado nuevo. Precisamente el Partido Nacional Escocés, líder del movimiento nacional es un partido neoliberal y proimperialista alineado con la OTAN, que tras el Brexit anhela la independencia para no dejar la UE. El resultado es la división de la clase obrera británica y el debilitamiento de su lucha.
Es el europeísmo neoliberal de las euroregiones, desprenderse del sur pobre, para acercarse a la Europa del norte y afianzar el intercambio desigual centro-periferia en la UE y hacia las excolonias. ¿Nos hemos olvidado de la Liga del Norte, ultraderechista, plantea librarse de la presión fiscal, y de los derechos laborales y sindicales que el Estado italiano le impone? La Liga del Norte reivindica la constitución de un nuevo estado independiente postfordista que aumente la explotación de la clase obrera y que se aproveche de la fuerza de trabajo inmigrante, y el intercambio desigual con el sur. ¿Nos hemos olvidado que Artur Mas también se inscribe en ese nacionalismo reaccionario que apoya el desarrollo desigual dividiendo a Europa? (63). Esta es la base ideológica sobre la que se desarrollan los movimientos nacionalistas neoliberales (NVA en Bélgica, Liga del Norte en Italia, CDC en Catalunya) con la apología del desarrollo desigual del capitalismo europeo (Madrid nos roba, Roma nos roba, etc.).
En este campo, a Francia y Alemania, cuanto más pequeños, dependientes e indefensos sean los Estados europeos mejor. Así una oligarquía financiera fuertemente centralizada en Bruselas y Frankfort podrá explotar con mayor facilidad a unos pueblos divididos que competirán entre sí para atraer inversiones o disputar mercados a otras euroregiones. La fragmentación de los Estados y la división del movimiento obrero facilita la aplicación de las políticas neoliberales en beneficio de la gran patronal y los bancos mediante el saqueo de los trabajadores y pueblos a través de la deuda externa y la austeridad. Precisamente las leyes impuestas por la Troika en la UE han rebajado todos los derechos amparados en las constituciones nacionales, arrasando las conquistas democráticas del movimiento obrero y el estado de bienestar (salario indirecto y diferido), tanto en los estados del norte como en los estados del sur y la periferia. En este contexto los nuevos Estados que se formaran, como Catalunya, serían estados vasallos sometidos a la división internacional del trabajo dictada por la Troika.
De todas formas, hay excepciones. Esta política de desmembración no se aplica a aquellos Estados que juegan un papel político y militar estratégico para el imperialismo y sus instituciones, como es el caso de España e Italia. La política de disgregación nacional para recolonizar las economías, recursos energéticos y rutas, se ha apoyado desde EE.UU. y la UE más bien hacia la Europa del Este, con la desmembración de la exURSS, Yugoslavia, Checoslovaquia, etc., así como también hacia otros países del mundo por los mismos intereses geoestratégicos del imperialismo, donde los EE.UU. y sus aliados promocionan el fraccionamiento de estados independientes y laicos como el caso de Siria y Libia para la creación de estados pequeños puramente étnico-religiosos.
Un ejemplo reciente de nuestra historia europea lo tenemos en la balcanización de Yugoslavia, la cual fué promovida por intereses imperialistas. La independencia de las repúblicas más ricas, Eslovenia y Croacia, lo fue por intereses de los monopolios capitalistas alemanes, y el resto por intereses geoestratégicos de EE.UU. y la OTAN. Lo que conllevó una guerra interna y los bombardeos de la OTAN sobre la población. Algunos independentistas cuando hablan de la «vía eslovena» ignoran que son el peor ejemplo para el derecho de las naciones a la autodeterminación, ya que el desmembramiento de Yugoslavia (que ha vuelto a las fronteras de la ocupación nazi) y también el de Checoslovaquia no fueron procesos de autodeterminación nacional anti-imperialista, ni progresivos, sino un retroceso social con la recuperación total del poder de las clases explotadoras y el sometimiento de los nuevos estados a los intereses del imperialismo alemán y yanqui.
Lenin planteaba que los EE.UU. de Europa y la alianza pacífica de las naciones iguales en derechos bajo el imperialismo era una utopía y un engaño al pueblo, oponiendo como esencial bajo el imperialismo la división de las naciones en opresoras y oprimidas (64). La consigna de la «Europa de los pueblos», lo mismo que la vieja consigna de los EE.UU. de Europa, sigue siendo una consigna falsa y reaccionaria. La UE es una máquina de guerra económica contra la clase obrera, los países de la periferia, las excolonias y las potencias rivales. En la Europa dominada por los Estados imperialistas, el capital financiero y las transnacionales, nunca actúa en interés de las pequeñas naciones. En este sentido y desde una posición antiimperialista, bajo la UE y la OTAN la igualdad y el derecho democrático a la autodeterminación de las naciones no tiene solución, y sino que se lo pregunten a los griegos que hoy están intervenidos por la Troika.
En consecuencia, las fuerzas políticas de la burguesía que persiguen la formación de nuevos estados en el marco de la UE, bajo el dominio imperialista, sin cuestionar no ya el capitalismo, sino tan siquiera las políticas neoliberales que empobrecen a las poblaciones, y aumentan las desigualdades territoriales, en realidad no buscan la soberanía nacional sino acomodarse dentro del imperialismo europeo, buscan una participación en el reparto de los beneficios de la explotación de la clase obrera autóctona y los países o regiones dependientes o excolonias que el imperialismo les garantiza. Precisamente una de las razones de la existencia de la UE es el propósito de seguir explotando las excolonias europeas, como fuente de materias primas, recursos energéticos y mano de obra barata. De ahí el apoyo a las guerras de recolonización del imperialismo sobre tales excolonias.
Por eso nos encontramos que los movimientos nacionales de tendencia progresista hoy son los que ponen en cuestión al imperialismo, y éstos no son los países europeos de capitalismo desarrollado que ya culminaron su revolución burguesa, sino son los de los países dependientes, semicoloniales, oprimidos y saqueados. La independencia política real primero y la independencia económica, sólo es posible mediante una encarnizada lucha contra el imperialismo y la reacción local. La cuestión nacional no puede centrarse únicamente en las naciones oprimidas europeas sin considerar a los cientos de millones de personas de las excolonias, poniendo por delante el antineocolonialismo igual que durante el pasado siglo XX se puso por delante el anticolonialismo, siendo Lenin y los comunistas los primeros en abordar la cuestión nacional de las colonias y los principales apoyos que tuvo la lucha por la independencia y descolonización de los imperios coloniales durante el siglo XX.
Hoy la socialdemocracia dirigente lo mismo que los nacionalismos existentes en los Estados europeos plurinacionales caen en idénticas posiciones eurocéntricas ignorando esa lucha anti-imperialista de las naciones políticamente independientes contra la opresión colonial y neocolonial desde Palestina hasta Haití y Siria. No se puede caer en tal monstruosidad olvidando de que la tarea revolucionaria de la clase obrera es la de luchar no sólo contra la opresión sobre las naciones dentro del mismo Estado, sino también contra la opresión neocolonial del imperialismo y los regímenes reaccionarios aliados, que tienen esclavizado a centenares de millones de seres humanos sometidos a las guerras imperialistas, al expolio y saqueo de sus riquezas.
La solución definitiva del problema nacional va ligada a la lucha de clases, la lucha contra la dominación imperialista y el derrocamiento del capitalismo. Así lo entendía Comorera, decía que la soberanía nacional y el capitalismo monopolista son incompatibles y que el pueblo está interesado en sacudirse la dominación antinacional de los monopolios y el imperialismo, que la nación bajo el capitalismo monopolista ha perdido la soberanía, que el imperialismo no puede existir sin la esclavización de las naciones no soberanas y neocoloniales, que éstas no pueden ser libres sin el derrocamiento del dominio capitalista, que la victoria de la clase obrera no puede ser completa si las naciones no soberanas y las neocolonias no se libran del dominio capitalista, que los problemas nacionales y neocoloniales de hoy son inseparables del problema de la emancipación del dominio del capital (65).
La posición de Lenin sobre la reivindicación del derecho de las naciones a la autodeterminación
Lenin nunca fue nacionalista, tampoco fue antinacional. Nunca hizo una interpretación nacional o jurídica del derecho de autodeterminación, sino una interpretación política y de clase, siempre hizo valer su posición en función del análisis concreto de la situación concreta en base a colocar por delante los intereses de la lucha de clases del proletariado y su unidad.
Para Lenin el primer punto del programa político de los marxistas en un Estado plurinacional, siendo enemigos de todo nacionalismo, es la igualdad de las naciones poniendo fin a toda opresión de las naciones, ningún privilegio para ninguna nación o para uno de los idiomas, agitación contra toda clase de privilegios nacionales de tipo estatal. Haciendo valer la conclusión de Marx y Engels de que «el pueblo que oprime a otros pueblos no puede ser libre». El segundo punto el derecho de autodeterminación de las naciones (nada que ver con la «autonomía nacional cultural» de Rosa Luxemburg y el austromarxismo) que incluye la separación, lo que no significa que se esté incondicionalmente por la separación. Esta reivindicación es obligatoria, ya que si no se propugnara por miedo o embellecimiento del nacionalismo de la nación opresora, se convertiría en una mentira el grito de ¡Proletarios de todos los países, uníos!. Precisamente el interés de la unión de la clase obrera y su solidaridad, exige que se reconozca este derecho (66).
Para Lenin es erróneo plantear que por autodeterminación se entienda únicamente la independencia, ni que la formación de Estados-nación sea una tendencia de todas las revoluciones democrático-burguesas (67). No descarta que se pueda estar contra la creación de un estado independiente e incluso hacer agitación en contra (68). La posición de la clase obrera aún cuando reconoce la igualdad nacional y el derecho a la independencia, debe evaluarse en las condiciones histórico-concretas, si eso favorece a la unidad y la lucha de la clase obrera en su conjunto a nivel estatal e internacional, condicionada a la lucha por la democracia y el socialismo (69).
Para Lenin a los obreros con conciencia de sus intereses de clase le son indiferentes tanto los privilegios estatales de la nación opresora, como las promesas de los capitalistas de las naciones oprimidas de instaurar el paraíso cuando ellos gocen de privilegios estatales. La clase obrera seguirá siendo explotada y para luchar con éxito debe ser independiente del nacionalismo. Sería apartarse de las tareas de la política de clase y someter a los obreros a la política de la burguesía, tanto si se negara el derecho a la autodeterminación, el derecho de las naciones oprimidas a separarse, como si se apoyara a todas las reivindicaciones nacionales de la burguesía de las naciones oprimidas (70).
Por tanto, la tarea de la clase obrera en Estados plurinacionales es doble: luchar contra todo nacionalismo, en primer término contra el nacionalismo de la nación opresora despreciando en las clases populares las posiciones reaccionarias que la justifican y embellecen (71), reconociendo la igualdad de las naciones sin privilegios para nación alguna en la edificación estatal, reconociendo el derecho de autodeterminación de todas las naciones, y establecer la unión total y absoluta de la lucha de la clase obrera y de los partidos y sindicatos de todas las naciones del Estado, incluyendo la unidad orgánica (72), y a nivel internacional, librando una lucha conjunta en completa solidaridad por el derrocamiento y la expropiación del capital en la perspectiva de todo el Estado y no de cualquier nación (73), rechazando la política nacionalista de la burguesía de cualquier nacionalidad.
Unidad de la clase obrera de todas las naciones del Estado, igualdad de derechos de las naciones y derecho de autodeterminación, son los tres ejes de la política marxista y leninista (74).
Fue Lenin quien advertía que en el problema de autodeterminación de las naciones, lo mismo que en cualquier otro problema político, lo que interesa sobre todas las cosas es la autodeterminación de la clase obrera, su independencia política respecto a las burguesías. Tras la revolución de octubre y con la constitución de la URSS Lenin defendió la unión de las naciones bajo el principio federal, oponiéndose a la independencia de Finlandia dando apoyo al proletariado soviético finlandés, mientras que la socialdemocracia se alió con la burguesía y el imperialismo alemán para aplastar la revolución soviética en Finlandia. La misma posición adoptó en Polonia donde la clase obrera polaca fue ganada por el nacionalismo polaco gracias a la posición antisoviética del socialdemócrata Pilsudsky. La misma posición adoptó durante la guerra de intervención extranjera en Ucrania y Georgia, donde los mencheviques se aliaron con los imperialistas y los blancos contra la revolución soviética fracasando en su intento contrarrevolucionario. Tras la guerra estas naciones serían reconocidas como repúblicas de la URSS en igualdad de derechos, integrándose no en la república socialista rusa, sino en una nueva formación estatal, la URSS, de la que pasaría a formar parte la República socialista soviética rusa en plano de igualdad de derechos con las demás repúblicas. Como vemos para Lenin el derecho de autodeterminación no era un problema jurídico, sino político supeditado a los intereses de la lucha de clase del proletariado.
En su controversia con Rosa Luxemburgo que negaba a Polonia el derecho de autodeterminación, Lenin planteaba que Polonia era una nación más desarrollada que la Rusia zarista semifeudal, siendo éste un obstáculo para el enfrentamiento entre la clase obrera y la burguesía polaca. Por su condición de nación oprimida y su nivel de desarrollo capitalista, Polonia tenía el derecho a independizarse de Rusia (75).
Lenin plantea que bajo el imperialismo todas las reivindicaciones básicas de la democracia política, incluyendo la autodeterminación de las naciones, son realizables de forma incompleta. Ello no quiere decir que se deba renunciar a la lucha inmediata por todas las reivindicaciones democráticas o de que esta lucha pueda apartar a la clase obrera del socialismo, ya que no puede estar preparada la clase obrera para vencer a la burguesía sino sostiene una lucha consecuente y revolucionaria por la democracia. Es cierto que la oligarquía financiera coopta y soborna a gobiernos y sus funcionarios de cualquier país aunque sea independiente, republicano y democrático, pero ese dominio no anula la importancia de la democracia política como la forma más amplia y clara para la lucha de la clase obrera y que esta aunque sea irrealizable en el aspecto económico no se debe abandonar ni aplazar su reclamación hasta el socialismo (76).
La alternativa. Ruptura Democrática. IIIª República Federal y Referéndum de autodeterminación pactado.
Un 65% de la ciudadanía no votó la constitución, y nadie votó la monarquía ya que esta fue impuesta por una ley preconstitucional. Fue Adolfo Suarez quien en 1977 evitó que se celebrase un referéndum de la monarquía o la república porque las encuestas no eran favorables para el rey Juan Carlos, «hacíamos encuestas y perdíamos», dijo en 1995 (77). La clase obrera de España seguimos teniendo una asignatura pendiente, asignatura abandonada durante la transición al aceptar un régimen de democracia limitada por el imperialismo, la impunidad del régimen franco-falangista y sus crímenes y la negativa a aceptar el carácter plurinacional de España.
No hubo ruptura democrática, hubo pacto con la monarquía, una transición sujeta a la política de guerra fría del imperialismo yanqui, que supuso la desmovilización de la creciente lucha de la clase obrera, que impidió la creación de una central sindical de clase unitaria e independiente, que supuso la renuncia a seguir reivindicando la república, que nos introdujo en las instituciones del imperialismo (UE y OTAN), que nos dotó de una constitución que impide el principio democrático de la igualdad de voto, que impide el derecho de autodeterminación y la cooficialidad de todos los idiomas, que mantiene los privilegios de la Iglesia, que impide la democratización del ejército y todos los cuerpos policiales, que impide la aplicación de una fiscalidad progresiva para aumentar los ingresos públicos, que impide llevar adelante una política de expropiaciones y socialización que pretenda cambiar las relaciones de producción y de cambio, que promovió el libremercado para entregar el patrimonio público industrial y la fragmentación de la clase obrera al implantar en Europa la precariedad laboral.
Fue Lenin quien planteó también que la clase obrera no puede estar preparada para derrocar a la burguesía si antes no lucha de forma consecuente y revolucionaria por la democracia. Sin proceso constituyente hacia la IIIª República no va a haber cambio, sino recambio, otra transición amparada en una reforma de la actual constitución. Por ese camino no va haber referéndum de autodeterminación pactado. Se debe de pasar a la ofensiva en la lucha por ampliar la democracia política y social y contra las políticas de austeridad, construir un frente de izquierdas con un programa de lucha que refleje las reformas sociales y democráticas que necesitamos, que luche contra los recortes y derogue sus leyes, que garantice el derecho al trabajo, que defienda el sector público y amplie las prestaciones sociales, que garantice el derecho a la vivienda, que penalice la corrupción, que garantice una fiscalidad justa y progresiva, y que se posicione a favor de la paz y el antifascismo:
1. Por un régimen republicano, democrático, federal, que reconozca el derecho de autodeterminación mediante referéndum, que democratice la justicia, el sufragio universal del poder judicial y ejecutivo, la democratización del ejército y cuerpos policiales, que defienda un sistema electoral proporcional que garantice la igualdad del voto, la penalización de la corrupción de los cargos públicos, referéndums vinculantes, revocabilidad de los cargos electos, que rehabilite la memoria republicana y las víctimas del franquismo, que declare nulas las sentencias de los tribunales franquistas por ley, que juzgue los crímenes del franquismo, a sus responsables, e ilegalice los símbolos nazis, fascistas y franquistas. Que defienda el laicismo con la supresión de las subvenciones a la iglesia (que suponen miles de mill. de € anuales), la laicidad del Estado y la enseñanza, derogando el concordato con El Vaticano excluyendo la religión del sistema educativo y de los actos del estado e instituciones públicas.
2. España debe reconocerse como una realidad plurinacional y multilingüe, tanto a nivel estatal, como a nivel de las diferentes naciones que lo conforman, sin que ninguno de los idiomas aparezca como titular del Estado. La igualdad de las diferentes naciones y regiones que la conforman debe concretarse en un marco federal y republicano. Ningún privilegio, oficialidad de todos los idiomas existentes. Uso del euskera, catalán y gallego junto al castellano en el parlamento federal y viceversa uso del castellano en los parlamentos de las naciones sin Estado, haciendo extensible esta realidad multilingüe a todas las administraciones, centros de enseñanza e instituciones públicas.
3. Dar prioridad a los gastos para derechos sociales, el salario indirecto (sanidad, educación…) y diferido (prestaciones desempleo, pensiones) de los trabajadores, aboliendo el artículo 135 de la Constitución. Derogar el pago de la deuda externa ilegítima, provocada por la oligarquía con sus privilegios fiscales, y fraude fiscal, el rescate a la banca y todos los gastos militares y despilfarros faraónicos. La crisis debe pagarla quien la crea, sus responsables, la burguesía financiera e inmobiliaria, gran patronal, y las rentas millonarias prófugas en paraísos fiscales, responsables del déficit fiscal y la deuda. Oponerse a la Agenda de Lisboa y al Pacto del Euro, derogando todas las leyes impuestas por el BCE destinadas a pagar la deuda privada, empezando por la Ley de Estabilidad Presupuestaria (LOEPSF) versión española empeorada del Tratado de Estabilidad de la UE (TSCG) y la Ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local la cual exige cumplir con los objetivos de déficit y deuda pública de la LOEPSF.
4. Derogar las dos últimas reformas laborales. Suprimir la precariedad laboral (reducción del empleo temporal y la supresión de las ETTs ) y potenciar el pleno empleo (causalidad en la contratación). Reducir la jornada laboral (35 horas) correspondiendo al desarrollo de las fuerzas productivas y reducir la edad de jubilación para repartir el empleo. Recuperar el poder adquisitivo de los salarios. Mejorar la protección frente al despido improcedente dando la facultad a los trabajadores para elegir su reincorporación. Equiparar las prestaciones sociales y cotizaciones de la seguridad social del trabajo autónomo al asalariado. Penalizar a los empresarios y mafias que se lucran con la inmigración ilegal. Hacer cumplir los convenios y normas laborales. Derogar la actual Ley de Extranjería que es una herramienta que sólo sirve para asegurar fuerza de trabajo dócil y de precariedad extrema, y facilitar el acceso a la nacionalidad española. Derogar las tasas judiciales. Reforma agraria integral que acabe con el latifundio y la renta privada del suelo.
5. Apostar por el crecimiento del sector público de enseñanza y salud, aumentar el empleo a nivel de la UE15 y revertir privatizaciones. Mejorar la protección social por desempleo -ningún parado sin prestación- y las pensiones. Implantar la incompatibilidad profesional en Sanidad. Doblar el gasto social por habitante para eliminar el déficit con la UE15. Apostar por la nacionalización de los sectores estratégicos (banca, bolsa, cajas de ahorro, energía, transportes, telecomunicaciones -fija, móvil, internet-, agua e industrias básicas), para la creación de una industria pública. Apostar por que los resultados de la investigación científica financiada con dinero público sean de libre utilización y difusión. Supresión de la propiedad intelectual, el canon digital y retirada de la ley Sinde.
6. Abolición de toda la legislación del suelo y ordenación urbana promulgada desde la ley franquista de 1956. Supresión de la actual ley de arrendamientos urbanos. Municipalización del suelo para acabar con la especulación urbanística. Extender la vivienda social y los alquileres a precios asequibles no superior al 15% de la renta familiar. Revalorizar el precio de la vivienda sin superar el IPC. Expropiación de las viviendas vacías. Derogar la legislación hipotecaria, las hipotecas deben ser bienes sujetos a la protección del que se declara en bancarrota. Dación de las hipotecas. Creación de una empresa pública gestora de la edificación de vivienda y su alquiler.
7. Incorporar en ley la prohibición de las puertas giratorias. Retribución máxima de los cargos públicos que gire en torno al salario medio de un obrero cualificado, limitar las dietas y complementos, reducir el nº de coches oficiales, eliminar la pensión vitalicia e integrar los cargos públicos en el régimen general de la seguridad social.
8. Perseguir el fraude fiscal y la economía sumergida que supone casi el 25% del PIB, lo que permitirían un ingreso adicional de decenas de miles de millones de € al Tesoro Público. Combatir la fuga de capitales a paraísos fiscales y considerar como delito con penas de expropiación cualquier movimiento de capital destinado a eludir la imposición fiscal. Introducir una reforma fiscal progresiva en la que pague el que más tiene tanto en los impuestos directos como indirectos, reduciendo los impuestos a las rentas más bajas (el IVA a los productos básicos), aumentando el impuesto de Sociedades de Capital Variable, el IVA a los bienes de lujo, la fiscalidad de intereses, dividendos y plusvalías, fijar tasas al sector financiero y las transacciones financieras internacionales, y recuperar el impuesto de patrimonio y el de sucesiones. La financiación del déficit debe hacerse a costa de los ricos y los beneficios que el capital defrauda y evade.
9. Neutralidad activa. Reducción drástica de los gastos militares. Salida de la OTAN. Desmantelación de las bases militares yanquis y retirada de las tropas españolas de Afganistán. Oponerse a las actuales guerras imperialistas en Europa, Oriente Medio y África y a la financiación del fascismo europeo y yihadista. Condena de los regímenes fascistas, antidemocráticos y apartheid en Ucrania, las monarquías de Oriente Medio e Israel. Oponerse a la criminalización del comunismo y el antifascismo. Solidaridad internacionalista con los países amenazados por el imperialismo.
RUPTURA DEMOCRÁTICA Y REPÚBLICA FEDERAL Reflexiones sobre Catalunya
1) Rajoy rompe España. https://www.elespanol.com/
2) La factura del 1-O: interior gasta 31,7 millones en su despliegue en Catalunya.
3) Murcia arde a la sombra de Catalunya: «El AVE por abajo, nosotros por arriba». https://www.elconfidencial.
4) https://www.elindependiente.
5) El juez de Barcelona que ha abierto una investigación por las cargas policiales no avala la versión de la fiscalía y admite que se afectó a la convivencia y que no es ilegal ni ilícito que los ciudadanos depositasen un papel sin valor legal en una urna. http://www.publico.es/
6) Anticorrupción pide condenar al PP por lucrarse con la Gurtel. http://cadenaser.com/ser/2017/
7) 1.861.753 votos por la independencia el 9N, 2.044.038 el 1-O.
8) El día nacional de España no es el día de la proclamación de la Constitución, 6 de diciembre, sino el 12 de Octubre, fecha en la que Colón arribó a las costas americanas, que fue implantado como día de la raza y que luego fue cambiado por hispanidad en añoranza del pasado imperial y colonial.
9) https://www.cuartopoder.es/
10) Falange, Vox, Denaes, España 2000, Hazte Oir, Cristo Rey, Fundación Francisco Franco, Fundación Primo de Rivera.
11) http://www.eldiario.es/cv/
12) http://www.europapress.es/ Albiol ha ido más lejos, pidiendo ilegalizar los programas electorales independentistas http://www.elperiodico.com/es/. Lo dicho, van a ir contra todo lo que no se mueva en su frente «constitucionalista».
13) El president de la Generalitat Companys de ERC no pedía la separación, apostaba por una nueva España republicana, federal y antifascista: el 6 de octubre de 1934 Companys proclamó el Estat catalá dentro de la República Federal Española.
14) El coronel Diego Perez de los Cobos el 23F se presentó voluntario en el cuartel de la Guardia Civil de Yecla con indumentaria de la falange para apoyar a Tejero -Desvelan el pasado golpista y de apoyo a Tejero de Pérez de los Cobos…http://kaosenlared.net/
15) Compuesta por más de 60 organizaciones, ANC, Omniun Cultural, Confav, Fede, UGT, CCOO, Unió de Pagesos, autónomos y la pequeña y mediana empresa. La huelga en producción de 24 horas fue convocada por los sindicatos minoritarios CGT, IAC/USTEC, CSC y la COS.
16) La presencia de las empresas del IBEX35 en paraísos fiscales se ha incrementado un 60% en los últimos 4 años.
17) Jean Claude Juncker. Presidente de la Comisión Europea. http://www.elperiodico.com/es/.
18) El efecto económico del traslado de sedes de empresas de Catalunya es ridículo, se trata de una cuestión de imagenhttp://www.publico.es/. Las compañías que dejan Catalunya suman 2.100 millones. https://www.elconfidencial..
19) «…el derecho a la separación supone que el problema se resuelve precisamente, no por el parlamento central, sino sólo por el parlamento (Dieta, Referéndum, etc.) de la región que se separa» (Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914) «El derecho de autodeterminación de las naciones significa exclusivamente el derecho a la independencia…y de que ésta sea decidida por medio de un referéndum de la nación que desea separarse» (La revolución socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1916).
20) «Cuanto más se acerque el régimen democrático del Estado a la plena libertad de separación, más débiles y raras serán en la práctica las aspiraciones de separación, pues son indudables las ventajas de los Estados grandes, tanto desde el punto de vista del progreso económico como desde el punto de vista de los intereses de las masas…preferir la federación a la desigualdad nacional, viendo en aquella el único camino capaz de conducir al pleno centralismo democrático» (La revolución socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1916).
21) Pedro Sanchez anuncia un acuerdo con Rajoy para iniciar la reforma de la Constitución en el Congreso http://www.eldiario.es/.
22) CCOO y UGT se suman a la mesa de partidos por el dialogo con Catalunya que promueve Unidos Podemos. http://www.eldiario.es/
23) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. 1914. Lenin.
24) http://www.abc.es/economia/
25) Recordemos. Pedro Sanchez dijo en mayo de 2017: «Rajoy es una manzana podrida en el cesto de la democracia. La primera medida será exigir su dimisión.
28) La participación de las comarcas industriales de Barcelona -Barcelonés, Maresme, Vallés Occidental y Oriental Baix Llobregat- fue del 39%, y la de Tarragona -Tarragonés y Baix Camp- del 33%. Comarcas donde el Sí alcanzó aproximadamente el 90% de los votos, superior a la del 9N.
29) El presidente de los empresarios catalanes: «No somos cobardes, pero vivimos aquí. Es muy fácil desde fuera» http://www.elmundo.es/
30) La deuda pública se incrementa en Cataluña en el segundo trimestre. https://www.datosmacro.com/
31) https://marxismoleninismo.
33) Balance de la discusión sobre la autodeterminación. Lenin. Ed. Akal 74. Madrid, 1975.
34) https://www.diagonalperiodico.. Por cada 100.000 habitantes: Chipre 611 policías, España 534 policias. En España hay 250.000 policías de todos los cuerpos estatal, autonómico y local.
35) Los países de la UE gastaron 258.000 millones en seguridad y orden público, el 1,8% de su PIB.
36) ¿Pueden ser los cuerpos policiales víctimas de delitos de odio? https://www.elsaltodiario.com/
37) En un acto del 26 de mayo de 2012 Forcadell va a afirmar que el PP y Cs no eran partidos catalanes y que el resto somos el pueblo catalán y los que conseguiríamos la independencia, metiendo en el mismo saco a los partidos que apoyan un referéndum pactado pero no la independencia.
38) Albiol ante la convocatoria de la manifestación del 8 de Octubre arengó a que se manifestaran todos los «buenos catalanes».
39) Mireia Boya de la CUP en el acto cierre campaña del SI dijo «Roma no paga traidores» atacando la posición de En Comú, Rufián de ERC criticó a Iglesias por decir que el 1-O no era un referéndum sino una movilización, mientras que C.Riera de la CUP, más sensato, en la sexta reconocía que el 1-O era una movilización.
40) «Nos invade el sentimiento de orgullo nacional, porque la nación rusa ha creado también una clase revolucionaria, ha demostrado también que es capaz de dar a la humanidad ejemplos formidables de lucha por la libertad y el socialismo, y no sólo formidables pogromos, hileras de patíbulos, mazmorras, hambres formidables y un formidable servilismo ante los popes, los zares, los terratenientes y los capitalistas… Y nosotros, obreros rusos, impregnados del sentimiento de orgullo nacional, queremos a toda costa una Rusia libre e independiente, autónoma, democrática, republicana, orgullosa, que base sus relaciones con los vecinos en el principio humano de la igualdad y no en el principio feudal de los privilegios que rebaja a una gran nación». (Notas críticas sobre la cuestión nacional. Lenin 1914).
41) «…si el marxista ucraniano se deja llevar por su odio, muy legítimo y natural a los opresores rusos, hasta el extremo de hacer extensivo ese odio, aunque solo sea n cierto distanciamiento, a la cultura proletaria y a la causa proletaria de los obreros rusos, ese marxista irá a parar a la charca del nacionalismo burgués. Del mismo modo se deslizará el marxista ruso a la charca del nacionalismo no sólo burgués, sino también utrareaccionario, si olvida aunque sea por un instante, la reivindicación de la plena igualdad de derechos para los ucranianos o el derecho de éstos a constituirse en Estado independiente» (Lenin. Notas críticas sobre el problema nacional. 1914). Y en la misma controversia con Rosa Luxemburg sobre Polonia: «Si no propugnamos ni llevamos a la práctica en la agitación la consigna del derecho a la separación, favorecemos no sólo a la burguesía, sino a los feudales y al absolutismo de la nación opresora…En su temor de ayudar a la burguesía nacionalista de Polonia, Rosa Luxemburg, al negar el derecho a la separación en el programa de los marxistas de Rusia, ayuda en realidad, a los gran-rusos centurionegristas… este nacionalismo es ahora el más temible, el menos burgués, pero el más feudal; el mayor freno para democracia y la lucha proletaria». (Lenin. Notas críticas sobre el problema nacional.1914).
42) Fontana Tarrats, Xavier de Salas, Samaranch, Porcioles, Pla, Dalí, Lopez Rodó, Fabia Estape, Narcis de Carreras, Josep Gomis…
43) https://marxismoleninismo.
44) «Catalunya es una nación. Pero Catalunya no puede aislarse. La tesis de que Cataluña puede resolver su problema nacional como un caso particular, desentendiéndose y hasta en oposición al problema general del imperialismo y de la lucha del proletariado, es reaccionaria… Y ésta República Popular dirigida por la clase obrera, sólo la podrá conseguir Cataluña luchando en fraternal unión con los otros pueblos hispánicos…Únicamente la República Popular de España dirigida por la clase obrera permitirá a Catalunya el pleno y libre ejercicio de su derecho de autodeterminación (Joan Comorera. Contra la guerra imperialista i per l’alliberació social i nacional de Catalunya. México 8 septiembre 1940). La separación por la separación es una idea reaccionaria, ya que en nuestro caso concreto, Catalunya, constituyéndose en un Estado independiente, saldría de una órbita de explotación nacional para caer dentro de otra igual o peor … La separación por la separación no resuelve el problema nacional, porque la pervivencia del imperialismo comporta la opresión nacional, progresiva, incluso de aquellas naciones que un día fueron independientes y soberanas (Joan Comorera. Lletra oberta a Reis Bertal. 1948). «La máxima garantía nacional de Catalunya es la clase obrera catalana, es la columna vertebral de la nación. La máxima garantía de Catalunya el día de mañana…para la realización de las aspiraciones nacionales es…la clase obrera española, sólo ella sabe y comprende que no puede ser libre en un pueblo que oprime a otros pueblos» (Joan Comorera. Franco i Falange són la guerra!. 3 diciembre 1942. México). Afirmación de Marx dirigida a la clase obrera inglesa de que la liberación nacional de Irlanda iba en beneficio de su propia liberación social como clase explotada.
45) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
46) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
47) https://marxismoleninismo.
48) «Es justo que el PCE defienda de manera resuelta y pública el derecho de Catalunya a separarse totalmente de España. Es justo que el PSUC diga que en la reivindicación y ejecución de sus derechos nacionales, Catalunya ha de reafirmar su unió con los otros pueblos de España» (Joan Comorera. La línea nacional del PSUC. Abril 1939).
49) Avant 995, 18 diciembre 2013.
50) Conferencia Política EUiA 27/10/2013, pág.9.
51) Reivindicación que Lenin la consideró una utopía reaccionaria porque niega la posibilidad de los procesos revolucionarios de la clase obrera en uno o varios países que el desarrollo desigual del capitalismo bajo su fase imperialista impulsa.
52) Joan Comorera: Contra la guerra imperialista i per l’alliberació social i nacional de Catalunya, Carta Oberta a un separatista. 3 julio 1942. México).
53) https://marxismoleninismo.
54) La revolución socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1916.
55) Según Coscubiela el PP tuvo la bandera de la democracia en el debate del parlament (sic).
56) España, Estado Multinacional. Informe presentado por Dolores Ibárruri ante el Pleno ampliado del Comité Central del PCE. Septiembre de 1970.
57) «Debemos reestructurar el estado español para que en la línea federativa, obtengan realización plena los derechos nacionales de Catalunya, Euskadi y Galicia. Para consolidar la revolución democrática y marchar hacia el socialismo, debemos querer que el nuevo estado español… sea dirigido por la clase obrera y las masas populares» Joan Comorera. Carta a Navarro Costabella. Dues cartas i una política. Publicacions Catalunya. Mexic 1949).
58) https://marxismoleninismo.
59) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
60) Lenin lo contemplaba: «…ni siquiera en Europa se puede considerar imposibles las guerras de liberación nacional en la época del imperialismo…esta «época» no excluye en lo más mínimo las guerras nacionales, por ejemplo, por parte de los pequeños Estados (supongamos que anexionados u oprimidos nacionalmente contra las potencias imperialistas…». (Lenin. Sobre el folleto de junius. 1916).
61) «…precisamente en el extremo este de Europa y en Asia, el capitalismo está despertando a la vida y a la conciencia a toda una serie de naciones nuevas, grandes y pequeñas». (Notas críticas sobre la cuestión nacional, Lenin. 1914).
62) «La tarea pues era doble: reconocer el derecho de todas las naciones a la autodeterminación, porque aún no está terminada la transformación democrático-burguesa y la alianza más estrecha, indisoluble, de la lucha de clase de los proletarios de todas las naciones de un Estado». (Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914).
63) ) «…la España del norte se ha cansado de la España del sur y la Europa del norte se ha cansado de la Europa del sur» http://www.eroj.org/comun/
64) La revolución socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1916.
65) La nació en la nova etapa histórica. Joan Comorera. 1944.
66) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
67) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
68) «…el hecho de que los marxistas de toda Rusia y, en primer término, los gran-rusos, reconozcan el derecho de las naciones a la separación, no descarta en lo más mínimo la agitación contra la separación por parte de los marxistas de esta o la otra nación oprimida». (Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914).
69) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
70) Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914.
71) «…el esclavo que rehúye aspirar a su propia libertad y, encima justifica y embellece su esclavitud (llamando, por ejemplo, a la estrangulación de Polonia, de Ucrania, etc., en defensa de la patria de los rusos), semejante esclavo es un miserable lacayo que provoca un sentimiento legítimo de indignación, de desprecio y repugnancia…El pueblo que oprime a otros pueblos no puede ser libre, decían los más grandes representantes de la democracia consecuente del siglo XIX, Marx y Engels. (Notas críticas sobre la cuestión nacional. Lenin 1914).
72) «…los socialistas de las naciones oprimidas deben defender y aplicar especialmente la unidad orgánica, entre los obreros de la nación oprimida y los de la nación opresora. De otro modo, con todas las…trampas de la burguesía, resultaría imposible defender la política independiente del proletariado y su solidaridad de clase con el proletariado de otros países, ya que la burguesía de las naciones oprimidas convierte constantemente las consignas de liberación nacional en un engaño para los obreros: en la política interior, utiliza estas consignas para concluir acuerdos reaccionarios con la burguesía de las naciones dominantes…en la política exterior trata de lograr componendas con una de las potencias imperialistas competidoras a fin de realizar sus objetivos de rapiña… (La revolución socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1916).
73) «La experiencia de la lucha conjunta de los proletarios de naciones diferentes prueba con demasiada claridad que nosotros debemos plantear los problemas políticos desde el punto de vista de toda Rusia y no desde el de Cracovia. (Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914).
74) «Completa igualdad de derechos de las naciones; derecho de autodeterminación de las naciones; fusión de los obreros de todas las naciones; tal es el programa nacional que enseña a los obreros el marxismo» (Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914).
75) «…si en un país, cuyo régimen estatal se distingue por presentar un carácter acusadamente precapitalista, existe una región nacional delimitada que lleva un rápido desarrollo del capitalismo, resulta que cuanto más rápido sea ese desarrollo capitalista tanto más fuerte será la contradicción entre este desarrollo y el régimen estatal precapitalista, tanto más probable será que la región avanzada se separe del resto del país, al que no la ligan los lazos del capitalismo moderno sino los de un despotismo asiático». (Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1914).
76) La revolución socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación. Lenin 1916.
77) Adolfo Suárez evitó someter a un referéndum la monarquía porque habría perdido. http://www.lavanguardia.com/
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.