Algo debe tener el cielo, para ser de preferencia la carretera del poder. Todo sea para ahorrar tiempo, mirar desde arriba o simplemente no poner los pies en la tierra, donde los otros, los de a pie, ven a veces muy estrechos horizontes. Lo cierto, es que el tener aviones privados, helicópteros y artefactos por […]
Algo debe tener el cielo, para ser de preferencia la carretera del poder. Todo sea para ahorrar tiempo, mirar desde arriba o simplemente no poner los pies en la tierra, donde los otros, los de a pie, ven a veces muy estrechos horizontes. Lo cierto, es que el tener aviones privados, helicópteros y artefactos por el estilo, parece ser propio de quienes deben rentabilizar al máximo su tiempo, además que en sus casos efectivamente vale oro.
En Chile, los señores Cardoen, Matte, Carey, Luksic, Marambio, entre otros, se movilizan en ocasiones por los aires y como buen selecto club también se prestan «sus juguetes». Pero, sin lugar a duda es Sebastián Piñera Echeñique, el aviador por excelencia de este grupo.
Este inversionista de Chilevisión y Colo Colo entre otras «carteras», alguna vez afirmo «lo necesitábamos para el trabajo» refiriéndose a su helicóptero en sociedad con un otro señor. Piñera no es ningún acomplejado con lo que tiene, al contrario lo exhibe y pavonea en el espacio publico, por eso podemos conocer que en su aparato realiza paseos familiares por el Cajón del Maipo hasta la frontera con Argentina, el Lago Caburga y orilla también el litoral central desde Santo Domingo a Papudo. Por supuesto este empresario, también ha sobrevolado muchas veces sobre el vasto territorio de su parque frente al Pacifico, porque 120.000 hectáreas, un 13% del total del hermoso archipiélago de Chiloé, no son precisamente para recorrerlos de a pié. Además, dicen que quien conoce se apropia y por supuesto ese es también el propósito.
Pero, en esta oportunidad todo se conjuró para que no fuera ni su semana, ni su día.
La semana pasada, mientras sus invitados, unas 40 personas entre políticos, periodistas y amigos viajaban en un bus de turismo entre Puerto Montt y Quellón, entretenidos por sabrosas historias sobre Chiloé, él lo hacia en su helicóptero junto al general Izurieta quien reconocía a la prensa que no podía desoír tamaña invitación. Además, recordemos que no se habían encontrado en el funeral aquel, porque en eso Piñera no se equivoca ni anda con sensiblerías de aprendices. Como en los negocios, puede ser frío como un pescado frente al resto de la fronda.
Piñera, inmerso en los resultados de las últimas encuestas CEP y CERC que lo sitúan como el político de la derecha con más futuro, pero a la vez golpeado por el informe de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) que le avisó que lo investigará por ganar dinero a partir del uso de información privilegiada proveniente de Lan Chile, andaba un poco confundido en Chiloé. No era trivial que las promisorias encuestas, fueran ensuciadas desde el propio cuerpo económico de El Mercurio.
Pero la vida dicen que es un cóctel, y eso corre también para los ricos, por eso además andaba ansioso por «el juguetito» que inauguraba en Chiloé, todo ello acentuado al saborear la perspectiva de conseguir lo más significativo de su existencia: La Moneda, luego de lograr casi todo lo deseado. Pero de nuevo, había quienes querían aguar su cumpleaños. ¿Que es esa ordinariez de andar investigando los métodos para multiplicar sus millones? ¿»Porque no se preocupan mejor de Chiledeportes o las consecuencias de la posta de declaraciones de Shaulsohn ante distintos jueces»? pensaría ese jueves fatal el político-millonario.
La derecha concentrada en denunciar corrupciones, uso de gastos reservados y letras chicas de los últimos 16 años, sabe que debe dar examen de rectitud y transparencia o al menos hacer como que lo da. Por cierto, eso no es fácil, porque con demasiada transparencia cualquier negocio se dificulta. Por todo lo anterior, los larraines no pueden ver con buenos ojos que su tótem sea tan caradura en esto de mezclar las cosas y hacerse el perseguido por no tener las manos sueltas para hacer de las suyas en el maridaje entre política y negocios tan de estos tiempos. ¿Alguien podría imaginar que pasaría en Chile si se investigara a fondo, como posibilito la dictadura la «acumulación originaria» de muchos de los más conspicuos empresarios de nuestra actual escena?
Como para que algunos mal pensados sospechen que los paseitos al Parque Tantauco sirven al propósito de constituir o reforzar «nuevas trenzas» que utilizando el escenario de una honorable causa como es la sustentabilidad y la ecología, son el sustento de futuras movidas o más inocente aún , son la filantropía y relaciones publicas que todo negocio en grande requiere. ¿Qué escucharan los monitos de monte chilotes y los gigantescos helechos de tanto conspicuo visitante?
Al círculo de Piñera puede resultarle verosímil afirmar que hay «conspiración» en los cargos que le hizo la SVS, pero difícilmente podrán argumentar que hay «conspiración» en todo cuanto revela del candidato de RN, el estacionamiento de su nave en una cancha de fútbol, retrasando el entrenamiento de la Sub 13 quellonina.
Porque el paso de Piñera por la 5 sur entre Chacao y Quellón es rápido y seguramente atractivos como el monumento al kilómetro cero de Quellón no le importen mucho. Menos, enterarse de los abusos de la industria del salmón hacia miles de chilotas y chilotes, ni los índices de felicidad humana de esta comuna-puerto que es la puerta de circulación hacia Chaiten.
Quellón tiene los índices más preocupantes del archipiélago en varios aspectos que hablan de pobreza y abandono. Por eso, no da lo mismo como las inversiones de este empresario se relacionen con la comunidad y el municipio donde se realizan. Porque el norteamericano Anderson sólo vendió a Piñera extensiones de tierras, no estando incluidas ni personas, ni menos disposiciones de estas.
Demasiados elementos distraían el jueves 11 de enero al postulante presidencial Piñera. En ese contexto el, su piloto o el mismísimo Izurieta- que según La Estrella de Chiloé lo acompañaba- cometerían un error gravísimo en todo este cuidado lanzamiento: llamar la atención por lo que no deseaban.
Ese mismo día, los niños quelloninos al igual que miles en Chile se levantaron soñando ser el «Mati» Fernández, el joven futbolista que salto del Colo Colo al Villarreal del fútbol europeo. Esa tarde de jueves en el Estadio Municipal de Quellón había diversas actividades recreativas y una de ellas era la práctica de la Sub 13 en preparación para viajar a un campeonato en Santiago. Los niños estaban vestidos para su entrenamiento, cuando como imagen surrealista encontraron en su cancha un helicóptero estacionado.
A partir de allí comenzaron a desencadenarse los desgraciados hechos. Se enteraron los periodistas invitados y nunca tan amigos como para no registrar los acontecimientos que dificultaban al mecenas de tan encantador viaje. Fue alertado el alcalde Claudio Velásquez por el encargado del Estadio Municipal Rubén Soto quien le informó que un helicóptero se encontraba estacionado a un costado de la cancha de fútbol. El alcalde concurrió a las 14:00, acompañado del Inspector Municipal Arnoldo Ruiz y el Encargado de la oficina de Deportes Francisco Bernier para proceder a cursar la infracción a Piñera, motivo: «estacionarse en un espacio público, sin autorización, produciendo trastornos en el desarrollo de actividades previamente planificadas». Luego de esperar dos horas llegaría el mismísimo Sebastián Piñera al aeródromo… perdón a la cancha de fútbol. Dicen que al ser notificado manifestó: «actué de buena fe», mientras el inspector municipal le replico: «de buena fe también se cometen errores…»
El alcalde (s) Claudio Velásquez luego expresaría a los periodistas presentes que era una falta de respeto lo ocurrido, que el Consejo Municipal se había sentido ajeno al parque, aunque les gustaría que fortaleciera el turismo en la zona. Porque de verdad, parece que hay sentimientos encontrados en este extremo de Chiloé. El Consejo de Caciques Huilliches ve con preocupación este nuevo y poderoso vecino que de sus miles de hectáreas dono tan sólo 600 metros para una sede comunitaria en la localidad de Inio y que todavía no cumple la promesa de entregar títulos de dominio a los campesinos asentados en dicho lugar. La ecología es muy loable, pero cuando se vive de la explotación de la leña, parece que resulta más difícil entenderla.
Lo que viene.- El jueves 18 de enero a las 11:00 el empresario-aviador tendrá que presentarse ante la Jueza de Policía Local María Teresa Sánchez. La multa definitiva dependerá del criterio de la magistrado. Solo como referencia, en ciudad un estacionamiento en lugar prohibido cuesta algo así como $33.000. Aunque helicópteros en canchas de fútbol, seguramente no están estipulados en ningún reglamento del transito previamente escrito.
Desde el cielo, la cancha municipal era solo un trozo de pasto verde más parejita que otros aledaños. Desde el cielo nada impedía aparcar en el lugar como si fuera el Aeródromo de Tobalaba.
Error de cálculo otra vez. Error de no suponer que también en Quellón tratan de regirse por ciertas reglas y que la autoridad edilicia no se amilanaría ante tanta gente importante, incluso aunque las encuestas le otorguen probabilidades de ser uno de los posibles presidenciables nuevamente.
Pero Piñera es audaz. Los cielos son un dominio conocido y rentable para él, que junto a sus equipos no se detiene en el chismorreo y las apariencias. Por ejemplo, han reducido la atención a bordo de Lan Chile al mínimo. Que no hay leche, que te tiran unas meriendas extrañas denominadas en ingles, que se devuelven aviones que despegaron con menos pasajeros por repentinas mantenciones, que los atrasos y los empalmes, etc. O sea, la rentabilidad a como de lugar.
Pero si el objetivo es La Moneda, parece que los asesores no logran formatear ese ADN del dinero y el poder que hay en lo medular del candidato-aviador. Cuando se es señor del dinero, a veces pareciera que todo se vende y compra, pero interferir el entrenamiento de la Sub 13 en Quellon puede ser muy grave, incluso si se esta acompañado de un general y mucha gente importante, incluso si el motivo es la inauguración de un parque proteccionista. Porque los niños son el futuro y ellos no estaban confundiendo que estaban en su cancha.
El señor de los cielos, nuevamente aprendía otra lección: todavía le falta para ser el dueño de Chile.