En la contienda electoral se navega a ratos en aguas turbias. La oscuridad pasajera puede confundir a más de alguien y empaña la claridad de la salida que permite retomar el rumbo correcto, que no es otro que el de poner en el centro los intereses de los trabajadores, de los más desvalidos, de las […]
En la contienda electoral se navega a ratos en aguas turbias. La oscuridad pasajera puede confundir a más de alguien y empaña la claridad de la salida que permite retomar el rumbo correcto, que no es otro que el de poner en el centro los intereses de los trabajadores, de los más desvalidos, de las mayoritarias víctimas del sistema impuesto por la dictadura y sostenido, cuando no profundizado, por los gobiernos de la Concertación.
Una política desde las alturas, lejos del pueblo, hecha sólo a base de encuestas, de efectos especiales, de costosa tecnología mediática, de chanchullos, reuniones a espaldas de los electores, de entrecruzamientos partidarios y de abuso del poder y del dinero, no es precisamente contributiva del desarrollo democrático. El nerviosismo de la candidatura de gobierno es evidente. El presidente de un partido de la Concertación considera incluso la posibilidad de no apoyar a Frei en segunda vuelta. En tanto, el otro candidato del sistema habla de «una nueva derecha» que , según él, » vale oro», mientras hace campaña junto a un prócer de la UDI. No en vano una encuesta reciente afirma que un porcentaje no despreciable de votos UDI optaría en segunda vuelta por MEO. El Mercurio y La Tercera compiten en desacreditar el pacto instrumental orientado a romper la exclusión política y agotan sus esfuerzos a favor de las alternativas conservadoras.
Salvo nuestro candidato presidencial Jorge Arrate, los otros presidenciables no parecen interesados en los problemas reales que viven millones de compatriotas. Los profesores de Chile inician este viernes un paro nacional indefinido para exigir que el Estado les devuelva el dinero que les robó la dictadura. La señora que oficia de Ministro de Educación ha dado muestras estos años de no entender absolutamente nada de política y de ser una de las peores secretarios de Estado de todos los gobiernos concertacionistas. Y miren que ha habido pésimos ministros. Su última astracanada fue decirles a los maestros que se olviden de la deuda histórica. Una provocación que costará muy caro.
La huelga de los maestros tiene el apoyo de Arrate y de la Izquierda. Como lo tienen los trabajadores del Cobre con cuyos dirigentes se han reunido. Otra excepción notable : salvo Arrate y la Izquierda nadie defiende la renacionalización del metal rojo. Piñera y MEO optan por la privatización. Y viene la ofensiva de los trabajadores fiscales por el reajuste de sus remuneraciones. Y sigue la lucha de los mapuches por sus tierras y contra la aplicación de la ley antiterrorista y de la justicia militar, las que se les había prometido no emplear jamás y que sigue cobrando víctimas fatales.
Luchando por los derechos del pueblo, combatiendo al sistema, así es como se sale de la oscuridad, así se vence la tormenta, así se encuentra la salida justa. Junto a las masas, con los trabajadores, en medio de la movilización social, ligando las demandas sectoriales a las demandas de cambios políticos profundos.
Habrá tiempo y espacio para comentar otros temas de estos días, como el exitoso encuentro de los líderes políticos de 14 países reunidos en Cochabamba, Bolivia, en la recién concluída cumbre del ALBA que logró acuerdos para fortalecer sus vínculos y la integración, aislar a la dictadura hondureña impuesta y defendida por los EEUU, avanzar en el establecimiento de una moneda única y un sistema de defensa común. O saludar la sentencia de la Corte Suprema del Uruguay que ha declarado inconstitucional la Ley de Caducidad de 1986 que permitió la impunidad de los asesinos de la dictadura militar. O celebrar el exitoso XVII Encuentro Nacional de Solidaridad con Cuba , efectuado el fin de semana en Valparaíso que concluyó con iniciativas de acciones para exigir el fin del bloqueo y la libertad de los 5 patriotas encarcelados por el imperio.
Pero lo de hoy es salir peleando de todos lo atolladeros en los que los poderes fácticos quieren meter a la Izquierda. Superar las debilidades y vacilaciones de los dirigentes de medias aguas. La vida demuestra que el camino para romper y avanzar no es otro que la lucha más decidida contra el poder de la burguesía y a favor del pueblo trabajador.