La realidad que vive hoy la sociedad española es de extrema gravedad, pobreza, desempleo, precariedad laboral y social, desahucios, desatención de los/as más desfavorecidos/as, represión, desigualdad, etc, esta situación nos llama a la construcción de la mayoría social y política necesaria para que se legisle a favor esa mayoría social, pero ello no es posible […]
La realidad que vive hoy la sociedad española es de extrema gravedad, pobreza, desempleo, precariedad laboral y social, desahucios, desatención de los/as más desfavorecidos/as, represión, desigualdad, etc, esta situación nos llama a la construcción de la mayoría social y política necesaria para que se legisle a favor esa mayoría social, pero ello no es posible sólo desde el ámbito electoral; es necesaria la construcción del tejido social que, de forma permanente y organizada, confronte con el poder establecido para poner en pie una nueva realidad social en nuestro país.
Somos conscientes que hoy no hay fuerza política, sindical o social que por sí sola pueda generar las condiciones para ese cambio, para establecer una nueva realidad es necesaria la unión de las fuerzas sociales y políticas que se reclaman del cambio. En este sentido desde el Frente Cívico consideramos que la convergencia en el programa es el frontispicio del éxito de los procesos de confluencia y por tanto la prioridad en los trabajos de construcción de los mismos. El programa une, concreta, moviliza, educa, impulsa, quita recelos apriorísticos y sitúa las diferencias en unos terrenos menos proclives a posiciones declamatorias. Un programa que, basado en unos puntos básicos, concrete la base del proceso de la construcción de una nueva realidad social.
En el Frente Cívico «Somos Mayoría», por definición y práctica consecuente, no tenemos otra línea de acción que luchar incesantemente por la unidad en el programa, en el discurso y en los valores inherentes a ello. El Frente Cívico, no es ni pretende ser o convertirse en un partido político, y reiteramos que seguimos optando por una organización totalmente desvinculada, como tal, de opciones electorales y de sus mecanismos de desarrollo y despliegue. Es por ello que cualquier iniciativa electoralista, cualquier intento de configurar una plataforma con aspiraciones electorales, no es nuestro objetivo puesto que queda en la superficie del problema y se muestra insuficiente como estrategia de cambio.
El trabajo del FCSM en los procesos de confluencia más inmediatos, locales y autonómicos es la búsqueda de la máxima unidad de las fuerzas sociales y políticas mediante métodos participativos en la confluencia en un programa, en un discurso y en unos valores que hagan posible que la ciudadanía se sienta representada en la alternativa a los gobiernos del bipartidismo.
Por convicción de la necesidad de esa unidad nos comprometemos en la búsqueda de propuestas, métodos e iniciativas que superen las diferencias, tensiones e incluso rupturas que se produzcan en los procesos de confluencia. Buscando estadios para que superando estos, puedan darse espacios de unión previa a la confrontación electoral o posterior a ella, en su caso, que haga posible el cumplimiento y desarrollo del programa. Siempre con el compromiso de la importancia de la participación social en el seguimiento y ejecución del mismo por las formaciones o plataformas políticas.
Nos comprometemos a ser elemento de unión y diferenciar nuestra actuación de las estrategias de las formaciones políticas, en su protagonismo en los procesos de confluencia, acción propia de nuestra pluralidad interna. En este sentido entendemos que, en referencia a nuestros propios textos, como Frente Cívico no participaremos en la fase electoralista de los procesos de confluencia (formando parte de la plataforma, pertenencia a las listas), en todo caso la participación, en esta fase, de los/as miembros lo será a título personal sin arrogarse pertenencia al Frente Cívico.
Entendemos que los distintos procesos abiertos en estos momentos afectan de forma exclusiva al ámbito local, y en algunos casos al autonómico, que en cada uno de esos ámbitos los procesos tienen sus propias características, con sus propias políticas de alianzas y de funcionamiento que hay que respetar. La voluntad del Frente Cívico es impulsar los procesos de confluencia sobre la base del programa común, la coherencia en su defensa, la participación más amplia y el mayor consenso posible.
Somos conscientes de la complejidad y de las dificultades que conlleva nuestra apuesta por los procesos de confluencia, pero a pesar de ello y, tal vez por ello, seguiremos trabajando por la unidad con nuestro esfuerzo y ejemplo en los ámbitos donde desarrollemos nuestro trabajo.