Organizaciones sociales y de derechos humanos de Suecia se encuentran preocupadas por el anuncio oficial de una eventual venta de armas a Colombia. Se ha iniciado en el país nórdico una campaña para informar a la opinión pública sobre la inconveniencia de realizar un negocio de armas con un estado que encabeza en diferentes modalidades […]
Organizaciones sociales y de derechos humanos de Suecia se encuentran preocupadas por el anuncio oficial de una eventual venta de armas a Colombia. Se ha iniciado en el país nórdico una campaña para informar a la opinión pública sobre la inconveniencia de realizar un negocio de armas con un estado que encabeza en diferentes modalidades las estadísticas mundiales por violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario. Durante el presente año han sido asesinados 23 sindicalistas en el país. En el valle del río Cimitarra han sido asesinados durante los dos últimos años 15 campesinos por el ejército y presentados como guerrilleros dados de baja en combate, ejecuciones extrajudiciales conocidas en el país como «falsos positivos».
Pese a que la ley sueca impide la venta de armas a países en conflictos armados, que violen los derechos humanos, o que se encuentren en guerra con otras naciones, una comisión especial llamada Inspección para Productos Estratégicos (IPS), que regula el cumplimiento de esa norma, autorizó Aa la empresa multinacional Saab para vender equipos bélicos a Colombia. La decisión fue anunciada coincidiendo con la visita del vicepresidente colombiano, Francisco Santos Calderón, quien al preguntársele sobre el asunto manifestó no estar al tanto. Previamente había visitado Suecia su primo hermano y actual ministro de defensa Juan Manuel Santos. Ambos funcionarios han sido mencionados por el jefe mafioso y paramilitar Salvatore Mancuso por haber tenido vínculos con el paramilitarismo.
En Suecia funciona un grupo parlamentario que se reúne periódicamente con los responsables de conceder los permisos de exportación de armas. Los parlamentarios deben velar para que se respeten los lineamientos de control en la materia. Por ejemplo, no se debe autorizar la venta a países en guerra o si se considera que existen graves violaciones a los derechos humanos. Además, según los lineamientos de la política exterior, también se debe tener en cuanta la vigencia y promoción de la democracia en los países receptores del armamento sueco.
Sin embargo, esta semana, la comisión especial de control resolvió otorgar una autorización para que la empresa Saab pueda iniciar las negociaciones tendientes a vender a Colombia el radar de aviación militar Erieye y eventualmente también aviones.
El sistema Erieye ya fue vendido a México y Pakistán, y se comenzó a negociar su venta a Arabia Saudita el pasado año. Curiosamente, en 2006, el entonces gobierno socialdemócrata de Göran Persson, desautorizó a la empresa Bofors, del grupo Saab, a vender repuestos de cañones antiaéreos a Venezuela, tras aceptar el reclamo norteamericano de considerar a ese país como un «gobierno peligroso». Bofors había vendido y abastecido a Venezuela por casi 20 años sin ningún cuestionamiento.
En la página del Ministerio de Relaciones Exteriores de Suecia que publica apreciaciones sobre Colombia se afirma que «en el país existe un conflicto armado desde hace casi medio siglo que ha provocado un desastre humanitario, con el desplazamiento forzoso de tres millones de habitantes». La Cancillería también ha recibido informes que señalan que en Colombia, «el ejército ha cometido graves crímenes contra la población civil en ataques efectuados supuestamente contra la guerrilla».
El diario Dagens Nyheter divulgó las notas de protesta de las organizaciones Paz Sueca y Amnistía Internacional. Anna Ek, presidenta de la organización Paz Sueca (Svenska Fred) destaca que «teniendo en cuenta la actual situación en Colombia tendría que estar totalmente descartado que Suecia exporte material militar a ese país». Por su parte, Maja Åberg de Amnistía Internacional sostiene que esta decisión del gobierno viola claramente las existentes disposiciones legales en relación a las exportaciones de armas: «No podemos vender a países donde existe un conflicto o donde los derechos humanos son violados».
El vocero del ministro de Relaciones Exteriores evitó comentar la situación ante los requerimientos de la prensa. Según un reporte del Ministerio de Relaciones Exteriores sueco, la violencia ha tenido efectos desoladores y devastadores para los derechos humanos en Colombia. En el 2007 aumentaron el número de ejecuciones extrajudiciales de las cuales son culpables policías y militares. A los militares igualmente se les acusa de atropellos y desmanes relacionados con operaciones contra la guerrilla en zonas donde habita la población civil.
Esta no es la primera vez que la comisión parlamentaria ignora la ley. Cada vez hay más voces en el gobierno para cambiar la legislación y vender armas a quien desee comprarlas. Thomas Tjäder, consejero de la política de seguridad en la Inspección para Productos Estratégicos (IPS), manifiesta que existen diversos aspectos a sopesar o valorar: «Un sistema de radar puede ayudar a que el partido gobernante controle sus fronteras y ello es útil para la estabilidad». En 2005, un informe preparado a pedido del gobierno socialdemócrata al ex parlamentario del Partido del Centro, Anders Svärd, concluía que «las normas legales que regulan la exportación de materiales bélicos instituidas en Suecia y actualizadas por última vez en 1993 deben ser actualizadas».
La líder del Partido del Centro y ministra de Comercio, Maud Olofsson, ha sostenido anteriormente que hay que adecuar la ley y acompañar las propuestas de Svärd. Rechaza que Suecia mantenga una política hipócrita al legislar contra la venta de armas a países en guerra o violadores de los derechos humanos. Lo que pasa, explica la ministra de Comercio, es que hay que actualizar la ley. En la misma posición está el ministro de Defensa, Sten Tolgfors: «En términos generales, cada país tiene derecho a defenderse, después la ley sueca indica cómo puede usarse el material bélico vendido en cada país. No hacemos negocios con todos los países, pero no tenemos una lista negra sino que evaluamos cada caso en particular», sostuvo el ministro cuando se lo consultó por otros negocios de armas a gobiernos dictatoriales.
La multinacional sueca SAAB
Saab es líder en comandos, controles avanzados y sistemas de comunicación para aplicación tanto civil como militar. Por consiguiente, los negocios con Saab incluyen una enorme extensión de servicios integrados, apoyo integrado, soluciones logísticas y servicios sofisticados de consulta.
Saab ofrece sistemas mundiales importantes, productos y componentes en defensa, aeroespaciales y de seguridad civil. Los negocios con Saab por consiguiente incluyen mantenimiento a largo plazo y servicios operacionales para el sistema suministrado por Saab.
Las operaciones militares de Saab y de aeronáutica civil están dominadas por el programa Gripen (es un avión de combate de guerra equivalente al F16, con componentes norteamericanos), sin embargo incluye al futuro aviones no tripulados (UAVs: Unmaned Aerial Vehicles). En sus operaciones civiles Saab funciona en sociedad con Airbus y Boeing en subsistemas y componentes estructurales.
Igualmente, la multinacional es líder en sistemas de multi-radares, sistemas de entrenamiento a fuerzas militares en simulación de combates, requerimiento en inspección y seguridad física de estaciones de poder nuclear, sistemas de control de vigilancia en prisiones y en servicios para instituciones de control (chips en los tobillos, etc.), en trabajos de instalación, soporte y mantenimiento.
Los accionistas más grandes de Saab, al 31 de diciembre del 2007, son BAESystems UK (del Reino Unido, una compañía global comprometida en el desarrollo, suministro y apoyo de sistemas avanzados de defensa y sistemas aeroespaciales, en aire, tierra y mar, cuenta con el 20% de participación), Investor (consorcio financiero sueco QUE incluye al grupo Wallenberg con el 38.3%), la Fundación Wallenberg con el 6.1% (grupo económico sueco), Fondos de pensiones AMF (suecos) con el 3.4 %, compañía sueca de explotación petrolera Odin y mercado de valores Odin con el 3.0% y el banco sueco de mercado valores Robur con el 2.7%.
En 2007, Saab suscribió un contrato enorme con el ejército real sueco, para el entrenamiento del centro de batallones móviles. Saab fue fundada en 1937, en el 2007 cumplió 70 años de labores en el mercado sueco y a nivel mundial.
Recientemente la compañía multinacional sueca ha sido acusada de soborno y cohecho agravado por el director General de la fiscalía sueca en su división de anticorrupción, por contratos celebrados dolosamente con la República Checa y Hungría, para el suministro de material de guerra (aviones de combate Gripen). En estos delitos están involucrados empresarios suecos y funcionarios de estos países.