El argentino Ernesto Lejderman, quien en 1973 fue entregado al entonces teniente Juan Emilio Cheyre tras el asesinato de sus padres cuando huían de la represión, saludó también el arresto del exjefe del ejército chileno. «Saludo y felicito a la justicia de Chile que se animó a procesar y detener a una persona que estuvo […]
El argentino Ernesto Lejderman, quien en 1973 fue entregado al entonces teniente Juan Emilio Cheyre tras el asesinato de sus padres cuando huían de la represión, saludó también el arresto del exjefe del ejército chileno. «Saludo y felicito a la justicia de Chile que se animó a procesar y detener a una persona que estuvo implicada en muchos casos del regimiento de Arica (de La Serena) en donde se cometieron muchos crímenes», señaló en declaraciones a CNN. Agregó que el hecho marca un precedente que muestra que en Chile la separación de poderes existe.
«Yo cuando estuve cara a cara con Cheyre tuve mucho miedo a que me pasara algo, porque sé el poder que tiene. Tuve mucho miedo a que me pasara un accidente. Espero que la justicia de Chile pueda avanzar», añadió al recordar el impactante encuentro público en el set de Televisión Nacional, con motivo de los 40 años del golpe militar. Enfatizó que no busca la venganza: «Yo quiero que la justicia avance y esclarezca los hechos. No me interesa la venganza, no es lo que busco. Yo solo espero que la justicia sea para todos por igual». Ernesto Ledejman, con dos años y medio fue entregado a Cheyre quien lo llevó a un convento de monjas, desde donde lo rescataron sus familiares y se lo llevaron a Argentina.
El caso reflotó con fuerza en 2002 a raíz de la designación de Cheyre cono jefe del ejército confirmado por el entonces presidente socialista Ricardo Lagos. Pero las denuncias fueron desechadas por la clase política y el poder judicial. En ese momento, las miradas se centraban en el general retirado Augusto Pinochet quien por primera vez enfrentaba los tribunales chilenos, precisamente por la causa de la Caravana de la Muerte, la misión militar que en un helicóptero Puma recorrió el país tras el golpe militar de 1973 dejando una estela de 75 muertos ejecutados sin previo juicio y sus cuerpos hechos desaparecer.