El diputado y secretario general del Partido Comunista deja abierta la opción de apoyar a la ex Presidenta si ella respalda una amplia alianza opositora con un programa que plantee «democratización constitucional, económica y social». De paso, defiende las declaraciones de Camila Vallejo en Cuba. ¿Es el pacto municipal Concertación-PC un anticipo de la alianza […]
El diputado y secretario general del Partido Comunista deja abierta la opción de apoyar a la ex Presidenta si ella respalda una amplia alianza opositora con un programa que plantee «democratización constitucional, económica y social». De paso, defiende las declaraciones de Camila Vallejo en Cuba.
¿Es el pacto municipal Concertación-PC un anticipo de la alianza que el PC quiere?
-Creo que a partir de la experiencia de este Gobierno de derecha y de los Gobiernos de la Concertación, pero sobre todo de la crítica de la ciudadanía que impidió la elección del último candidato de la Concertación, debiera haber conclusiones profundas.
«Hay muchas condiciones objetivas para plantearse una actualización programática que permita la democratización. Ese debate va a cruzar las elecciones municipales y debiera ser la esencia de un próximo debate presidencial y programa presidencial y parlamentario. Lo que se ve en el acuerdo municipal es la potencialidad de ir construyendo una nueva mayoría que permita, en base a ideas, conquistar un Gobierno mucho más avanzado».
-¿Una unión de la Concertación con los partidos que hoy están afuera?
-Para mí no.
–¿Cómo se expresa entonces? Uno piensa de inmediato en un candidato presidencial único.
-Con la Concertación vamos a tener coincidencias y en lo que les hemos cuestionado no vamos a coincidir. Creo que la realidad de Chile no es la que había el año ’89. Lo que aconsejó esa alianza política ha cambiado. Hay que proponerse una alianza mayor, pero no es que el Partido Comunista ingrese a la Concertación o que lo haga otro partido. La idea es que todos busquemos otra articulación, que lo hagamos autoconvocados. No estamos haciendo fila para entrar a la Concertación, tenemos todas las observaciones que tenemos. No es una formalidad autoconvocarse de motu proprio, en igualdad de condiciones, con la voluntad de establecer una cultura programática mínima.
-¿No es el momento de levantar una alternativa de izquierda cuando la Alianza y la Concertación tienen tan bajo respaldo? El PC hoy día no aparece creciendo en las encuestas.
-Eso dice la razón: para constituir una nueva mayoría que conquiste un Gobierno se necesita de todos. Se trata de una convocatoria a todos quienes se articulen en un eje de la democratización plena, en el ámbito constitucional, económico, político y social.
–Pero han pasado 2 años desde la última presidencial y no hay alianzas nuevas.
-A veces en la vida, en un mes se avanza lo que no se ha avanzado en un año. Tengo optimismo en la experiencia unitaria en la batalla municipal. Si no hay maduración en todos nosotros, va a opinar la ciudadanía. Pero nosotros no vamos a distorsionar nuestra esencia. Lo que está cuestionado es el modelo neoliberal. Eso es lo que la gente no valora.
PRIMERO EL PROGRAMA
-¿La alternativa es ese frente amplio o el camino propio?
-Para nosotros es complementario, no es excluyente. No hablamos sólo con los partidos de la Concertación, también con el MAIZ, el MAS, los humanistas. No tenemos una raya que excluya, sino que incluya. Si otras fuerzas no tienen voluntad de hacerlo, no será nuestra responsabilidad.
–¿Es posible que esa gran alianza con el ala conservadora de la Concertación en lo cultural y los neoliberales de la Concertación en lo económico?
-Nosotros hablamos en positivo. No voy a hacer proyección. Sería cada uno el que elija su lugar.
-Pero ustedes dicen ser un partido que está contra el neoliberalismo, y en la Concertación hay neoliberales.
-Hay una plataforma programática mínima, cada uno verá si tiene cabida o no. No me adelantaría ahora.
–¿Es posible que Michelle Bachelet encabece el programa que ustedes quieren considerando su Gobierno anterior?
-Visualizo como posible un programa mínimo común que convoque a este arco amplio. Le pongo dos bases para que no sea voluntarioso: el programa original de la Concertación con que ganó Patricio Aylwin y que luego transformó su compromiso «en la medida de lo posible», es decir, en la medida que la derecha quería; y los 12 puntos de acuerdo que tuvimos con Eduardo Frei para apoyarlo en segunda vuelta. Hablamos de soberanía económica, democracia representativa y participativa. Creo que la disposición que tenga cada liderazgo a tomar eso va a hacer que el Partido Comunista adhiera.
«Tengo la mejor opinión de Michelle Bachelet no sólo en lo personal, sino en la forma de relación que ella tuvo con el Partido Comunista. Además, somos contemporáneos desde el tiempo de las juventudes, pero esas valoraciones en lo personal, no están sobre el programa».
LOS DICHOS DE CAMILA VALLEJO
Hace un tiempo que el PC no tenía una figura como Camila Vallejo. ¿No daña su imagen que viaje a Cuba y alabe a Fidel Castro?
-Esa es la diferencia entre un liderazgo que se construye en estudios de imagen y marketing con la autenticidad de un liderazgo de izquierda y popular. Ella es un liderazgo real y no va a contravenir su idea política porque sería una estafa, que es lo que hace mucha gente. Nosotros somos consecuencia.