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The Clinic, psiquiatras y Cuba

Fuentes: Rebelión

Compré The Clinic por nostalgia la semana antepasada, por recordar esos buenos tiempos, cuando entre octubre del 98 y marzo del 2000 Pinochet estuvo preso en Londres y yo, estudiante de enseñanza media, vivía una efervescencia social subterránea y silenciada por los grandes grupos de prensa del país. Todo era siutiquería y frases clisé en […]

Compré The Clinic por nostalgia la semana antepasada, por recordar esos buenos tiempos, cuando entre octubre del 98 y marzo del 2000 Pinochet estuvo preso en Londres y yo, estudiante de enseñanza media, vivía una efervescencia social subterránea y silenciada por los grandes grupos de prensa del país. Todo era siutiquería y frases clisé en este país y obviamente un casi nulo cuestionamiento sobre el sistema económico, o al menos así lo sentía en ese momento, hasta que apareció este pasquín de 4 o 6 páginas irreverente hasta la médula y evidentemente de izquierda, una izquierda progresista como le gusta llamarse a tanta gente hoy en día.

Al paso del tiempo el Clinic cambió y yo también. Terminé mi carrera llevando conmigo el objetivo de someterme al sistema, hasta conseguir un trabajo que me permitiera la subsistencia material, y desde ahí poder construir activismo contra la desigualdad económica de este país. Pero siempre teniendo presente que los errores que percibía en mi juventud del sistema económico, y el adoctrinamiento en el libre mercado, por mucho que yo había cambiado no habían cambiado nada. The Clinic cambió, en el sentido de que «el techo de su rebeldía es el negocio de la compañía» como dice una canción de «Las Manos de Filippi». El techo de su rebeldía era luchar contra la derecha deseando a la Concertación en el poder.

The Clinic cambió porque al principio ninguna cara bonita de la televisión se jugaba por ese pasquín ordinario, sino que era la gente común y sencilla con dos dedos de frente de este país que sí lo compraba, y lo anunciaba y publicitaba casi con algo de orgullo en sus inicios. Pero luego, tras la conversión -legítima por cierto- del periódico a través de buscar avisajes publicitarios que entregaran mayor solvencia, y por lo tanto derivando sus publicaciones hacia públicos de mayor solvencia y anda a saber cuántas razones más, el Clinic pasó a ser otro medio más. Un medio un poco irónico, eso sí, con algunos artículos sumamente interesantes, pero uno más que no toca el modelo económico ni su violencia simbólica ni las consecuencias brutales sobre las condiciones de vida de millones de chilenos, porque vive de él o son amigos de quienes los administran (basta ver la inauguración de su bar y la gente del PPD apareciendo como progres). En el fondo, se codea con los que con su poder político han mantenido e incrementado la desigualdad económica exponencialmente estos últimos 20 años (1).

Compré The Clinic por nostalgia esta semana y al cabo de ojear y reír un poco con alguno de los titulares de las primeras páginas, me encuentro con una columna sobre Cuba, interesado siempre en que me demuestren con hechos que esa isla es lo peor que puede existir, busqué en ella alguna evidencia, alguna referencia, alguna cita que pudiese otorgar el Médico Psiquiatra Octavio Rojas G. («radicado en Chile desde 1995») (2) dentro de su propaganda anticubana, pero nada. Para variar, como cuando se critica a esa isla, más que un reportaje serio, era una opinión, a toda página, sobre lo terrible y dramático que es vivir en esa isla, la brutalidad del régimen, etc., etc.

Lo mismo un editorial anterior de Patricio Fernández (3), donde pretende convencer de que hasta Silvio Rodríguez está en la oposición cubana, para esto basta leer la carta que Silvio Rodríguez envió al medio de comunicación El País de España y que no fue publicada por ese medio (4), porque publican lo que conviene, para observar tan simple y llanamente la manipulación e ignorancia de Patricio Fernández sobre Cuba y su situación, incluso intenta hacer creer que fue Fidel el que buscó la muerte del Che Guevara o de Camilo Cienfuegos no mostrando más fuente que su conocimiento de un tipo como Max Marambio. Ejemplificando con esta actitud esa arrogancia de quien escribe pensando que todo lo que dice está bien, porque en algún momento acertó, un error común y que opaca el conocimiento y la información seria.

Y sobre el médico psiquiatra cubano, que puede ser que trabaje en «Clínica Las Condes» según la coincidencia de nombre, apellido y sigla de segundo apellido, si le hubiese tocado nacer en cualquier barrio marginal de un país latinoamericano, en una casa construida de fonolita, cartón y latas como en Chile, en una toma de terreno, donde con suerte si se comporta sumisamente hubiese alcanzado una vacante en un liceo técnico de la millonaria gente del Opus Dei que entrena su servidumbre y los adoctrina en la obediencia, el respeto a la autoridad y el amor a la desigualdad de clases, hubiese rogado volver a su país natal. Habla de sindicalismo mostrando a Cuba como el peor país en esta área… Y no entiende por qué la gente para el 1 de mayo saca banderas cubanas… Pues aunque yo no agitaría más bandera que la del equipo de mi barrio, entiendo que la gente ve en Cuba un sistema que garantiza derechos básicos para la supervivencia humana, como la vivienda, la educación (que seguramente por la formación que tiene de médico psiquiatra podrá dar fe) y sobre todo la salud, supongo que Don Octavio Rojas G. encontrará mejor el plan Auge que la salud universal cubana?… Todos derechos por los cuales lucha y ha luchado el sindicalismo internacional desde el inicio de los tiempos.

Además sacan banderas cubanas por ser el único país latinoamericano que gracias a que por la vía revolucionaria (no militar como él dice, porque los militares eran la dictadura de Batista) en 50 años y según las horribles estadísticas latinoamericanas en desaparecidos y torturados, se evitó gracias al triunfo de esa revolución el camino de masacre que vivieron posteriormente casi la totalidad de países suramericanos para abrir sus economías al libre mercado bajo las dictaduras capitalistas de los ´60,´70,´80, financiadas por ese país que apenas Don Octavio Rojas G. nombra, como es EEUU, el principal país terrorista del planeta, no lo digo yo, lo dicen las Madres de la Plaza de Mayo cuando son comparadas con las Damas de Blanco de Cuba:

«Primero, déjeme decirle que la Plaza de Mayo está en Argentina y en ninguna otra parte. Nuestro pañuelo blanco simboliza la vida mientras que estas mujeres de las que usted me habla representan la muerte. Ésta es la diferencia más importante y más sustancial que hay que señalar a estos periodistas. No vamos a aceptar que nos comparen o que utilicen nuestros símbolos para pisotearnos. Estamos en total desacuerdo con ellas.

Estas mujeres defienden el terrorismo de Estados Unidos. Ellas defienden el primer país terrorista del mundo, el que más sangre tiene en las manos, el que más bombas lanza, el que invade más países, el que impone las sanciones económicas más fuertes contra los demás. Estamos hablando de la nación que es responsable de los crímenes de Hiroshima y Nagasaki.

Estas mujeres no se dan cuenta de que la lucha de las Madres de la Plaza de Mayo simboliza el amor por nuestros hijos desaparecidos, asesinados por los tiranos impuestos por Estados Unidos. Nuestro combate representa la Revolución, la que nuestros hijos y nuestras hijas quisieron hacer. Su lucha es diferente, pues defienden la política subversiva de Estados Unidos que sólo contiene opresión, represión y muerte…» (5).

Por todos lados, todos los medios de comunicación insisten en que el pueblo cubano vive una barbarie, recientemente se reveló cómo la Usaid destina cerca de 2,3 millones de dólares en propaganda anticubana solo por internet (6), según los documentos desclasificados del senado norteamericano, y ni qué hablar de la prensa común como lo puede graficar un reciente hecho que llega a ser delictual del periódico El País a una periodista cubana de visita en Madrid (7). Una mentira repetida infinitamente decía un precursor de los mass media se convierte en verdad, Hitler también lo tenía claro. Si los mass media hablaran de la misma manera sobre los EEUU… si hablaran día tras día sobre el millón de muertos en Irak, sobre la masacre en Afganistán, sobre su responsabilidad en las muertes de tantos latinoamericanos en el siglo recién pasado desde Nicaragua, Panama, Chile, Argentina, Bolivia, Uruguay, Brasil hasta llegar a Honduras y Colombia.

Si hablaran día tras día sobre Honduras, sobre Colombia… donde hace unos días atrás se ha descubierto la mayor fosa común de la historia latinoamericana con más de 2.000 seres humanos muertos por el ejército desde el 2005 hasta ahora con órdenes de que fueran incinerados sin identificar (8), país que acaba de superar a Irak y el Congo en el numero de seres humanos desplazados, cifra que alcanza los 3.200.000 personas (9). Noticia que por ser de una «Democracia Amiga» como le gusta decir a George W. Bush o a Lagos, Bachelet y Piñera tuvo nula repercusión mediática, nadie de los progres de la concertación corrió a denunciar al gobierno colombiano en la comisión de DDHH del Parlamento, noticia sin parangón con los minutos y horas dedicados a un preso común cubano en huelga de hambre, transformado por los ultraconservadores de Miami en un disidente político, donde ahora sí todos se apresuraron a levantar la voz, The Clinic también, de alguna manera. Y los minutos de prensa y medios de comunicación cubriendo esta noticia ha sido pura y dura manipulación de los mass media.

Mientras tanto sobre la intervención y la reconstrucción de la infraestructura de salud pública en Haití por médicos cubanos ha sido borrada de la agenda mundial, médicos que estaban trabajando en la isla desde hace 9 años, además de formar a cientos de médicos haitianos con el solo prerrequisito de volver a su país a cumplir con la misión de cualquier médico, que es trabajar para sanar. Cuba ha seguido asistiendo a Haití antes y después de la catástrofe con más médicos que USA y Canadá, en realidad que cualquier país que envió ayuda a ese país, y que por supuesto ya se la llevó, y volvieron a quedar esos perversos médicos cubanos otra vez solos asistiendo a su vecino. Cuba no ha enviado ni a un solo soldado a Haiti. ¿Qué se tendría que inventar de este gesto? ¿Qué «Los Castro», como titula The Clinic en su editorial ya citada, desean anexar a Haití para «reinar» como señala Fernández?…

En el fondo, lo que no se le perdona a Cuba es no ser Haití o Jamaica, no se le perdona el no ser una isla pobre del Caribe donde su población se alimente en vertederos o viva con casi nula situación de salubridad, no se le perdona que no existan bandas de pobres armados hasta los dientes sin conciencia política, no se le perdona el no ser una isla del Caribe con los Índices de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas por los suelos, no se le perdona el no ser otro simple país pobre de América, no se le perdona el no estar llena de casinos donde lleguen los norteamericanos a pasar sus lunas de miel, o el editor de un medio de masa, no se le perdona que ninguno de los 20 millones de niños que mueren al año por razones de salubridad (10), ni los 1.000 millones de seres humanos que sufren malnutrición crónica, ni los 200 millones de niños que duermen en la calle, ni por supuesto ninguno de los 35.000 niños muertos diariamente a nivel global por razones evitables en cuanto a alimentación y salud, sea cubano. No se le perdona tanta dignidad y resistencia de 50 años de bloqueo económico sin parangón en la historia de un país latinoamericano, y por sobre todas las cosas, lo que la sociedad de consumo global no puede, ni quiere perdonar y debe combatir con todas sus fuerzas, es la locura de priorizar desde las necesidades básicas humanas, es la locura de que sin bloqueo el socialismo funcionara, y luego de eso incluso como la oposición de izquierdas en la isla persigue, se despidiera al Estado (11). A Cuba, como a Chile en algún momento no se le perdona ser el mal ejemplo del barrio.

NOTAS

(1) «El Retorno de Fausto: a propósito del gobierno de Lagos», Marcel Claude.
http://www.elciudadano.cl/2008/08/04/el-retorno-de-fausto-a-proposito-del-gobierno-de-lagos/

(2) «Banderas Cubanas», Dr. Octavio Rojas G.
http://www.theclinic.cl/ediciones-anteriores/?album=1&gallery=135&pid=4384

(3) «Cuba Hoy. La Isla Siniestra», Patricio Fernández.
http://www.theclinic.cl/ediciones-anteriores/?album=1&gallery=133&pid=4316

(4) «Cortina de Albahaca», Silvio Rodríguez.
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=106036&titular=cortina-de-albahaca

(5) «Las ‘Damas de Blanco’ de Cuba», Salim Lamrani.
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=68292

(6) «USAID Invierte Más de U$ 2,3 Millones en Propaganda Contra Cuba por internet», Eva Golinger.
http://centrodealerta.org/noticias/usaid_invierte_mas_de_23_mi.html

(7) «El Portal Cubadebate Sufre un Atentado Terrorista Mediático», Pascual Serrano.
http://rebelion.org/noticia.php?id=106339

(8) «Aparece en Colombia una Fosa Común con 2000 Cadáveres», Público.
http://www.publico.es/internacional/288773/aparece/colombia/fosa/comun/cadaveres

(9) «Colombia es el País con Más Desplazados del Mundo», CODHES.
http://www.codhes.org/index.php?option=com_content&task=view&id=187

(10) Informe Anual 2009. PNUD.
http://www.undp.org/spanish/publicaciones/annualreport2009/pdf/SP_FINAL.pdf

(11) «Socialistas Libertarios Cubanos Marcharon este 1º de Mayo por la Habana», El Ciudadano.
http://www.elciudadano.cl/2010/05/04/socialistas-libertarios-cubanos-marcharon-este-1%C2%B0-de-mayo-por-la-habana/

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