El candidato presidencial del pacto «Juntos Podemos Más», Tomas Hirsch, afirmó que «la Concertación está comprometida con intereses transnacionales», al acusar que el abogado Jorge Schaulsohn (PPD) está actuando como representante de la empresa AES Gener, que realizará el proyecto de construcción de la planta termoeléctrica en Monte Lorenzo, en la Sexta Región. Durante la […]
El candidato presidencial del pacto «Juntos Podemos Más», Tomas Hirsch, afirmó que «la Concertación está comprometida con intereses transnacionales», al acusar que el abogado Jorge Schaulsohn (PPD) está actuando como representante de la empresa AES Gener, que realizará el proyecto de construcción de la planta termoeléctrica en Monte Lorenzo, en la Sexta Región. Durante la firma de un protocolo de compromiso para detener la instalación de la mencionada central, Hirsch indicó que «el proyecto está -lamentablemente- muy avanzado, en la fase final de evaluación». «Pero -afirmó- , aún se puede detener y eso depende de la voluntad política y de la decisión del Gobierno de priorizar la salud y el derecho al trabajo de la población por sobre los intereses de algunos grupos económicos».
Cabe destacar además, que durante 15 años de gobiernos post dictadura ha sido habitual que altos personeros de gobiernos y un número importante de los parlamentarios, al margen de desarrollar sus actividades propias de la acción legislativa y de gobierno, muchos de ellos forma parte de los directorios de empresas, son accionistas importantes o asesores del gran empresariado nacional y trasnacional o tienen sus propias empresas. Uno de los casos más emblemáticos en este sentido, es la corrupción de los hermanos Zaldivar, que son accionistas de las empresas pesqueras y que han tenido innumerables conflictos con los trabajadores que muchas veces dicen representar. Adolfo Zaldivar es actualmente presidente del Partido Democráta Cristiano,y su hermano Andrés Zaldivar fue uno de lo connotados golpistas del ala derecha de la DC.
Por ello no es raro, que el ex presidente del PPD, Jorge Schaulsonh se encuentre al servicio de una trasnacional, puesto que estos personajes tienen un olfato muy fino, cuando se trata de sus negocios particulares y las pertinentes ganancias que puedan obtener con ello. Esta nueva casta política empresarial, más les importa su propia corrupción, que los altos intereses de todo el país.
El actual presidente Ricardo Lagos, que es uno de los expertos en el tráfico de influencias, en la medida que fue saboreando las exquisiteces del poder, se ha transformado en un enconado defensor de los intereses de sus nuevas amistades, que no son otros, que los que controlan el poder económico en Chile. Ahora, al calor de los beneficios que han obtenido del sistema capitalista neoliberal, que tan bien han administrados los gobiernos de la Concertación, ha dado como resultado la aparición de los nuevos ricos del sistema, los políticos empresarios, que se ubican por debajo de la oligarquía financiera nacional.
De allí que no cabe ninguna duda acerca de las denuncias realizadas por el candidato presidencial del Pacto Junto Podemos Más, ante la gran corrupción en que se encuentra involucrada la élite política en el poder y en el parlamento, que en todas las encuestas realizadas han sido ampliamente cuestionados y repudiados. Ello además, puesto que en Chile de hoy, al amparo del modelo económico heredado de la dictadura, el tráfico de influencias y la corrupción de la clase política y altos funcionarios de gobiernos, no es tan sólo una excepción, sin que ya es una norma.
Las denuncias vertidas por Hirsch, sin duda que no son del agrado del gobierno neoliberal de Ricardo Lagos, pues los grupos económicos y las trasnacionales, no están dispuestas a invertir en la mantención y cuidado del medio ambiente, pues a ellos sólo les interesa obtener la máxima rentabilidad posible, y lo problemas ecológicos derivados de sus propio accionar productivo y comercial, tienen que resolverlo los otros, o sea el Estado, con el dinero de todos los chilenos.
En este plano del cuidado del medio ambiente y otros, el presunto gobierno de la candidata presidencial del neoliberalismo, Michelle Bachelet, tendrá un «hueso duro de roer», puesto que la jauría que la rodea, tampoco tiene conciencia de la necesidad de preservar la naturaleza del país, pues están más preocupados de sus propios negocios, acciones e intereses, y de las asesorías que le prestan al empresariado nacional y las trasnacionales, que resolver los problemas del medio ambiente y las consecuencias ecológicas que produce la instalación de una empresa termoeléctrica, como la que ha denunciado el candidato presidencial del Pacto Juntos Podemos Más, Tomás Hirsch.