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Diego Cubillos, de la Federación de Estudiantes de la Universidad Alberto Hurtado

«Ya no es Bachelet; otros son los que gobiernan»

Fuentes: Punto Final

Postula la democracia directa y participativa. Afirma que la presidenta Michelle Bachelet no gobierna, que el poder lo ejercen realmente algunos dirigentes de la vieja Concertación de Partidos por la Democracia y que las grandes decisiones políticas se toman en Casa Piedra y no en La Moneda. Piensa además que figuras emergentes, como Giorgio Jackson, […]

Postula la democracia directa y participativa. Afirma que la presidenta Michelle Bachelet no gobierna, que el poder lo ejercen realmente algunos dirigentes de la vieja Concertación de Partidos por la Democracia y que las grandes decisiones políticas se toman en Casa Piedra y no en La Moneda. Piensa además que figuras emergentes, como Giorgio Jackson, solo vienen a dar una apariencia de cambio para que todo siga igual. Critica también el oportunismo de la derecha, que luego de oponerse tenazmente pretende erigirse en la defensora de la gratuidad de la educación.

Diego Bautista Cubillos Polo (20), vicepresidente y vocero de la Federación de Estudiantes de la Universidad Alberto Hurtado, cursa segundo año de administración pública. Es hijo de profesores, vive en la comuna de Pudahuel y estudió educación media en el Internado Nacional Diego Barros Arana. En ese liceo fue presidente del Centro de Alumnos, vocero y cabeza del colectivo Renato Sepúlveda, de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES). Antes fue militante de las JJ.CC., organización que dejó por discrepancias políticas.

Es uno de los fundadores de la organización política estudiantil Juventud Rebelde (JR). Tres de sus militantes dirigen las federaciones de estudiantes de las universidades Central, UTEM, Alberto Hurtado. Cubillos dice que Juventud Rebelde «con cambios discursivos y de estilo político, recoge el legado de la Izquierda revolucionaria. Por ese camino reivindicamos luchas sociales y políticas que siguen vigentes».

¿En qué difiere la JR de las JJ.CC.?

«La principal diferencia es que no somos una juventud de gobierno. Además creemos que toda la educación en Chile debe ser pública y bajo control comunitario. También somos enfáticos al decir que en este momento no seguiremos el camino de las elecciones para lograr los cambios que la sociedad está exigiendo. No buscamos ocupar cargos de concejales, alcaldes, diputados o senadores, porque no sirven para obtener avances en favor del pueblo. Un claro ejemplo de esta situación es que la bancada estudiantil, expresada en Gabriel Boric o Giorgio Jackson, ha sido incapaz de ofrecer una salida a un tema fundamental para nosotros como es la gratuidad en la educación».

 

CLAVES DE LA CRISIS

Consumismo, endeudamiento, trabajo precario y gente cuidando sus trabajos cuando los tienen. El camino parece cuesta arriba para la revolución.

«Hoy existe más que nunca la necesidad de construir comunidad y establecer relaciones humanas cercanas. Es una tarea compleja cuando tenemos un bajo nivel de organización social y cuando existe escasa participación.

Nuestra lectura es que la gente no está buscando hoy una democracia representativa, sino que quiere hacerse parte directa del quehacer y las decisiones. Un claro ejemplo es que a las personas les da lo mismo quién resulta electo, porque ya saben que los cambios deben hacerlos ellos, directamente. Cuando vemos altos niveles de consumo o de precariedad laboral, tiene más sentido nuestro discurso; que habla del trabajo en comunidad de la gente pobre, del obrero precarizado o del estudiante que no tiene acceso a una buena educación».

Hay desconfianza generalizada y eso dificulta que las personas actúen colectivamente.

«El primer objetivo que tenemos como Federación de Estudiantes es recomponer lazos de comunidad para trabajar juntos más allá de pequeños bandos. Porque solo unidos podremos realizar cambios dentro y fuera de la universidad. Vengo de un barrio en que el pasaje de mi cuadra se cerraba para las Fiestas Patrias o Navidad para compartir. La gente mantenía lazos, pero hoy eso ya no pasa. Ni se ven niños jugando a la pelota en la calle. Cuando una persona postula a un subsidio, está obligado a salir de su barrio y generar también nuevos lazos de afecto y confianza con las personas.

Cuando venía a esta entrevista vi a personas revisando su celular o escuchando música, sin comunicación ni diálogo con los otros pasajeros. Si hubiera preguntado a alguna de esas personas como se llama, probablemente no me respondería. Este individualismo se ve reforzado por los medios de comunicación, cuyas noticias tratan habitualmente de casos de corrupción o delincuencia; pero no tocan los problemas sociales que hoy afectan a la población, como la falta de trabajo, la mala educación, las falencias en salud o vivienda.

Cambiar conductas ensimismadas e individualistas es una tarea compleja, porque la desconfianza política es reforzada a diario por múltiples situaciones que la estimulan, por ejemplo, los casos de corrupción. Vemos que los hijos de alcaldes, diputados, senadores o presidentes se van al extranjero con becas del Estado, y observamos también que los mismos empresarios que financian a la extrema derecha financian también a la Nueva Mayoría. Los escándalos de SQM y Penta, la colusión del papel higiénico o la ley Longueira, vienen a ratificar que los que nos gobiernan están al servicio de unos pocos y dejan de lado a las mayorías».

En reciente encuesta Marco Enríquez-Ominami bajó en más de 10% su popularidad y como posibles postulantes a La Moneda se consolidan figuras tradicionales, como los ex presidentes Lagos y Piñera…

«La extrema derecha tiene 10% de aprobación y la NM 15%. Chile está viviendo un reacomodo de los partidos y las instituciones políticas, producto de un desencanto generalizado, algo que revela la abstención electoral. Que Lagos o Piñera tengan tanta aprobación, es parte de esa crisis; porque los conglomerados tienen que reflotar a estos personajes para seguir vivos. A mi parecer estos son pataleos de ahogado; porque ellos no son capaces de generar una renovación de la política. Cuando se intentó generar un recambio, la vieja guardia de la Concertación salió a recuperar poder. El gobierno y el Congreso Nacional no son capaces de elaborar políticas públicas para los chilenos y chilenas y en conjunto representan el fracaso. Está muy claro que lo único que les interesa es engordar sus bolsillos».

 

JACKSON Y SU IMAGEN

Giorgio Jackson es la figura con más futuro en esa encuesta, y Camila Vallejo pierde popularidad.

«Jackson vende la imagen de una figura joven, crítica e independiente, mientras Camila Vallejo como disciplinada militante comunista, sale a defender las políticas del gobierno. Pero Miguel Crispi, que igual que Jackson es dirigente de Revolución Democrática, oficia como asesor del Ministerio de Educación. El propio Giorgio fue electo diputado luego que la Concertación se omitiera en Santiago, para regalarle el cargo de diputado. Figuras emergentes como Giorgio Jackson no son más que personajes que vienen a dar la apariencia de cambio, para mantener todo igual».

¿Cómo se explica la creciente politización de las universidades privadas?

«La generación que dirigió el movimiento de 2011 fueron los ‘pingüinos’ de 2006, ahora somos los secundarios de 2011 que estamos ingresando a las universidades. El alza de las movilizaciones en las universidades privadas se debe a que muchos secundarios que marchamos entonces, ahora ingresamos a la universidad y quedamos en las privadas.

Para muchos de nosotros la universidad privada fue nuestra segunda opción, e ingresamos a ella porque nuestros resultados en la PSU fueron menguados, producto de la educación de menor calidad que tuvimos en la media. Pero los aranceles de las universidades privadas son más altos, y lo que uno gasta en aranceles no se ve reflejado en una mejor enseñanza.

Todas estas situaciones van generando entre los estudiantes un cambio de mentalidad; producto de una acumulación de descontento ante esta realidad adversa, que se acentúa por las dificultades que uno tiene para insertarse laboralmente. Hay un cambio de chip al interior del movimiento estudiantil y esa realidad produce también un cambio en la conciencia de nuestras familias.

El despertar del movimiento estudiantil en las universidades privadas ha producido en las autoridades de algunos planteles una reacción represiva, como en la Universidad Alberto Hurtado. Tenemos un compañero, Felipe Sánchez, sancionado por pintar un mural. Se le sumarió y su permanencia en la universidad está en peligro.

Las autoridades de los planteles están en tensión, porque todas las universidades -privadas o públicas-, tienen alguna clase de lucro. Al interior de nuestra universidad están presentes accionistas de Cencosud o personalidades ligadas a empresas privadas, como la ex ministra de la Concertación, Mónica Jiménez (DC)».

¿Qué le parece el fallo del Tribunal Constitucional sobre gratuidad?

«Es tragicómico ver cómo diputados de la derecha salen a defender la gratuidad en la educación, hablan de discriminación y tienen la osadía de presentar un requerimiento ante el Tribunal Constitucional para defender la gratuidad universal. Esos parlamentarios son los mismos que hace pocos meses consideraban que esa gratuidad era lo peor para la educación.

El fallo demuestra que el gobierno carece de manejo político, que actúa sobre la base de la improvisación y que quien gobierna en realidad no es Bachelet sino fuerzas que están tras sus espaldas.

La sentencia dice que la manera como se asumió la gratuidad es discriminatoria, pero no se pronuncia respecto al lucro que existe en las universidades ni habla sobre la democratización de los planteles de educación superior. Además mantiene sin cambios la brecha que separa a los estudiantes pobres de los más ricos; hecho que está en la base de la desigualdad en la educación chilena. Sería absurdo que las universidades públicas o privadas que acogen en sus planteles a los estudiantes más pobres del país, como la UTEM, la Central, la Academia de Humanismo Cristiano, las universidades de Los Lagos o Arturo Prat, queden fuera de la gratuidad, en circunstancias que en ellas se educan los estudiantes más pobres.

Lo positivo del fallo es que reconoce el derecho a la educación superior gratuita y que mantiene abierta la posibilidad de seguir discutiendo el tema; aunque la situación es poco clara para miles de estudiantes que tienen que matricularse en distintas carreras, sin saber cuál es la situación en la que se encuentran esas instituciones en relación con el financiamiento a sus estudiantes».

 

LOS QUE GOBIERNAN CHILE

¿Quién gobierna Chile?

«Hoy gobiernan los empresarios y la elite política que está a su servicio. Las grandes decisiones se toman en Casa Piedra, no en La Moneda. El gobierno lo lleva el ministro del Interior, Jorge Burgos, y la presidenta Bachelet está de adorno. Cuando comenzó, el actual gobierno se planteaba como ‘ciudadano’, con nuevas caras; pero ahora mandan figuras tradicionales como Burgos, Eyzaguirre, Adriana Delpiano o Sergio Bitar, que responden a la vieja Concertación».

¿Existe en Chile subordinación de las policías y las FF.AA. al poder civil?

«Si bien hay mayor preocupación por los derechos humanos, es necesaria una política de Estado para frenar los abusos contra los derechos humanos y regular los procedimientos de las instituciones armadas. En las marchas o concentraciones, ciertos funcionarios de Carabineros golpean, secuestran a nuestros compañeros o manosean a nuestras compañeras. Ya sabemos también lo que sucede con las comunidades mapuches, que son maltratadas por la policía.

Las recientes denuncias de corrupción al interior del ejército evidencian también la falta de control de las autoridades civiles sobre los uniformados. Luego de 25 años del término de la dictadura, sigue existiendo impunidad. Los uniformados tienen plena libertad para administrar recursos que son de todos los chilenos, como los que provienen del 10% de las ventas del cobre que produce Codelco.

El gobierno, el Congreso y los Tribunales están en deuda con la sociedad chilena respecto a sus responsabilidades en el control de las FF.AA. y las policías. Las distintas autoridades sienten temor ante los que manejan las armas y todavía les pesa el 11 de septiembre de 1973″.

¿Cuán real y profunda es la democracia en Chile?

«En Chile no hay real democracia; porque tenemos una presidenta que fue elegida con los votos de apenas el 26% de los chilenos y chilenas; porque hay jóvenes excluidos de una educación que no pueden pagar, porque hay inmensas listas de espera en los consultorios y hospitales; porque los pueblos indígenas son privados de sus derechos básicos; porque tenemos militares que hacen lo que quieren, empresarios que ganan lo que quieren y pobres que siguen empobreciéndose día a día. En una democracia las decisiones se deben adoptar en beneficio de las mayorías y no de una minoría privilegiada».

 

 

 

Publicado en «Punto Final», edición Nº 844, 8 de enero 2016.

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