El 25 de noviembre de 1960, las hermanas Minerva, Patria y María Teresa Mirabal fueron brutalmente asesinadas en República Dominicana, por ser mujeres y por atreverse a enfrentar a la dictadura de Trujillo. En esta fecha las mujeres del mundo conmemoramos su lucha y salimos a pelear contra la violencia patriarcal y capitalista que nos asedia y nos mata en todo el mundo.
Desde Irán se escucha un potente grito: “mujer, vida y libertad” contra el régimen dictatorial e islamista que desde hace 40 años oprime a la clase trabajadora y a los pueblos de Irán, con especial saña en las mujeres y disidencias. La muerte de la joven Amini fue un punto de inflexión que puso en evidencia hasta dónde el gobierno pretende llegar con su violencia patriarcal. En respuesta, las mujeres salieron a las calles por justicia y por el fin de la Policía de la moralidad que impone sus reglas de conducta y vestimenta obligatorias en el espacio público, logrando con la fuerza de la movilización, optar por circular en la vía pública sin hiyab y dar inicio a una revuelta popular contra el régimen de Ali Khamenei que se extiende por varias semanas en todo el país. Se trata de mujeres a la vanguardia de la lucha contra una dictadura, al igual que hace 62 años lo estuvieron las hermanas Mirabal: Patria, Minerva y María Teresa, asesinadas un día como hoy brutalmente por una dictadura.
También hemos estado a la vanguardia de la lucha las mujeres brasileñas, votando masivamente contra el neofacista Bolsonaro, quien impulsó desde su gobierno todo tipo de ataques contra las mujeres y disidencias, difundiendo discursos de odio racistas, homófobos y misóginos. Las feministas estuvimos en las calles al grito de #ElleNao y #ForaBolsonaro y seguiremos también en las calles levantando nuestras demandas ante el nuevo gobierno.
Este 25N fortalecemos la lucha en todo el mundo por nuestros derechos: por aquellos que nos falta conquistar, pero también contra la agresión de los gobiernos y los sectores conservadores que buscan arrebatarnos los derechos adquiridos desde hace décadas como el caso de Estados Unidos y su ataque al derecho al aborto o la retirada del gobierno de Turquía del Convenio de Estambul.
Nos declaramos en estado de alerta también contra la creciente criminalización de las dirigentes sindicales a la vanguardia de las luchas contra la explotación capitalista y la opresión patriarcal, como el caso de la persecución sufrida por las trabajadoras en huelga del Sindicato Único de Trabajadores de Notimex en México o la persecución y retaliación a integrantes -mayoría mujeres- de la Asociación de Empleados de la Caja de Seguro Social (AECSS) de Panamá, sufriendo despidos por estar en huelga en defensa de sus derechos laborales o con causas penales arbitrarias, como nuestra compañera, Priscilla Vásquez, presidenta de la asociación .
Hoy 25N también nos movilizamos contra la impunidad y encubrimiento de los gobiernos que han provocado el recrudecimiento de la violencia feminicida. Denunciamos que han preferido destinar mayores presupuestos a las fuerzas armadas y al pago de las deudas externas, en vez de a la salud, educación y a programas públicos que atiendan a víctimas de la violencia.
Denunciamos la violencia patriarcal, racista y xenófoba del gobierno de Luis Abinader en República Dominicana, que, recordando las acciones nefastas de la dictadura trujillista contra quienes lucharon las Hermanas Mirabal, tiene una cacería violenta contra la comunidad inmigrante haitiana, llegando al extremo de deportar mujeres embarazadas, negarles atención médica y a ordenar el desalojo y deportación masiva de comunidades enteras.
Las mujeres somos las más precarizadas, las primeras despedidas en contextos de crisis y sobre nosotras recae mayormente el ajuste que todos los gobiernos aplican contra la clase trabajadora. Somos las jefas de los hogares más humildes y quienes nos vemos obligadas a migrar de nuestros territorios con nuestras hijas e hijos, y a veces teniendo que alejarnos de nuestras familias. Estamos a la vanguardia de las luchas contra los despidos, el ajuste, el saqueo de los recursos naturales y la contaminación ambiental.
Por todo ello, este 25N, día mundial de lucha contra la violencia de género, desde la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional (UIT-CI) llamamos a organizar acciones contra todos los gobiernos que legitiman la violencia patriarcal del sistema capitalista-imperialista que nos golpea mayormente a las mujeres y disidencias. Salgamos a conquistar cada uno de nuestros derechos mientras seguimos peleando por una sociedad socialista, sin opresión y sin explotación.
¡Ni una desaparecida, ni una asesinada más!
¡Alto a la impunidad de los gobiernos!
¡No más criminalización de las luchadoras!
¡No al pago de las deudas externas! ¡La deuda es con nosotras, no con el FMI! ¡Por mayor presupuesto para educación, salud y para atender la violencia!
¡Movilizadas y organizadas contra la violencia capitalista, racista y patriarcal!
Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional (UIT-CI)