Recomiendo:
0

478 euros en 8 minutos

Fuentes: Rebelión

Tenemos 500 desahucios diarios. Un desempleo juvenil que asciende en España al 52,1%. En Andalucía ese dato se eleva al 55%. Más de 11,5 millones de ciudadanos/as en riesgo de exclusión social, es decir, 1 de cada 5 hogares españoles. Según Unicef en su informe «La Infancia en España 2012-2013», el nivel de pobreza infantil […]

Tenemos 500 desahucios diarios. Un desempleo juvenil que asciende en España al 52,1%. En Andalucía ese dato se eleva al 55%. Más de 11,5 millones de ciudadanos/as en riesgo de exclusión social, es decir, 1 de cada 5 hogares españoles.

Según Unicef en su informe «La Infancia en España 2012-2013», el nivel de pobreza infantil en nuestro país ha superado por primera vez el 26%, dato inédito desde que existe la «Encuesta de Condiciones de Vida (2004).

El riesgo de pobreza infantil en Andalucía (dato también de Unicef) es del 36,3%. Más de un tercio de la población infantil andaluza.

Según Informe Económico de Esade, desde los inicios de la crisis española en 2008, han cerrado en nuestro país 177.336 empresas.

Frente a esto, en nuestro país, y más concretamente en la diputación provincial de Vigo, los diputados provinciales se han embolsado 478 euros por asistir a un pleno que ha durado 8 minutos. Lean las declaraciones que allí tuvieron lugar.

Diputados provinciales que pertenecen a partidos políticos que se presentan ante los ciudadanos/as como garantes para salir de la crisis y como fieles servidores y representantes públicos, tanto a nivel municipal, como autonómico y nacional.

La mayoría de jóvenes (y no tan jóvenes) de nuestro país, trabajando en una tienda, en un polígono, en la hostelería, en una guardería o en tantos y tantos lugares en los que les están consumiendo la ilusión y la vida, necesitaría en torno a 15 días (en algunos casos más) para ganar ese dinero.

Muchísimos de estos «políticos» me acusarían rápidamente de demagogo. El término al uso que utilizan para acusar y desprestigiar a todo aquel que no dice lo que a ellos les viene bien para mantener sus repugnantes privilegios.

Pero es al revés.

Demagogos son ellos, que dicen representar el bien público con estos privilegios y rapiñerías que nos hacen a todos/as más pobres cada día.

Demagogos son ellos y los partidos a los que pertenecen, los cuales blindan y justifican estos desmanes vergonzosos.

Demagogos son ellos que protagonizan estas injusticias e inmoralidades sociales y sin embargo dicen a boca llena representar el progreso y el bienestar social.

Todos callados, todos silenciados, nadie sale al paso ante semejantes golferías (ya no se pueden utilizar otros términos).

Ni un político decente diciendo con toda contundencia; «esto no puede ser», «hay que terminar rápidamente con toda esta apropiación injustificada de dinero público que no revierte en ningún bien para la ciudadanía en proporción al coste que le supone.

¿En cuántas y cuántas diputaciones, ayuntamientos e instituciones ocurren inmoralidades como esta? Ni siquiera existe la transparencia suficiente como para que lo sepamos.

¿Qué es esto? ¿En qué estamos permitiendo que se convierta todo esto? ¿Qué es esto que está pudriendo nuestra democracia hasta darnos asco?

¿¡Qué es esto!?

Son solo desalmados. Una persona con vergüenza, decoro y respeto por sus conciudadanos/as no es capaz de llenar su nevera con el dinero procedente de semejante acto.

No son Representantes Públicos, son lacras privadas.

Juan Luís Rodríguez, [email protected] Licenciado en Psicología. Especialista en Psicología Clínica y de la Salud. Técnico Superior en Navegación, Pesca y Transporte Marítimo. Ex-asesor en los Gabinetes de las Consejerías de Asuntos Sociales y Consejería para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía. Colaborador de Attac Sevilla.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.