El Ejecutivo concedió permisos por valor de 3.433 millones de euros frente a los 1.409 millones del primer semestre de 2015. Las ventas de material de defensa que se realizaron en ese periodo ascendieron a 1.837 millones de euros, un 6,4% más que hace un año. El Gobierno autorizó en los seis primeros meses de […]
El Ejecutivo concedió permisos por valor de 3.433 millones de euros frente a los 1.409 millones del primer semestre de 2015. Las ventas de material de defensa que se realizaron en ese periodo ascendieron a 1.837 millones de euros, un 6,4% más que hace un año.
El Gobierno autorizó en los seis primeros meses de 2016 exportaciones de armas españolas por valor de 3.433 millones de euros, según el informe de exportaciones de material de defensa, de otro material y de productos y tecnologías de doble uso remitido el viernes por la Secretaría de Estado de Comercio al Congreso de los Diputados y al que ha tenido acceso info Libre . La cifra supone multiplicar prácticamente por 2,5 la autorizada en el mismo periodo del año anterior, cuando se dio luz verde a ventas por importe de 1.409 millones de euros.
Esta tendencia no es nueva: en 2015, el Ejecutivo de Rajoy triplicó los permisos a la industria armamentística española para vender material de defensa a terceros países. El volumen total de las exportaciones autorizadas alcanzó el año pasado los 10.676 millones de euros frente a los 3.666 millones de euros autorizados en 2014. A modo de referencia, cabe señalar que entre 2005 -cuando se empezaron a publicar estadísticas- y 2011 nunca se superaron los 3.200 millones en autorizaciones en todo un año, cifra que ahora se ha rebasado en sólo seis meses.
En cuanto a las exportaciones de material antidisturbios y las tecnologías de doble uso civil y militar, cuyas estadísticas también se incluyen en este informe, los aumentos también fueron muy destacados, aunque los volúmenes son inferiores. Las autorizaciones para vender a otros países material antidisturbios pasaron de 274.575 euros entre enero y junio de 2015 a 5,9 millones en los seis primeros meses de 2016, 21,5 veces más. En cuanto a las tecnologías de doble uso, se autorizaron 621 millones frente a los 181 millones de 2015, 3,4 veces más.
Las exportaciones de armas a otros países están sujetas a una autorización previa por parte de la JIMDDU, una junta interministerial adscrita al Ministerio de Economía y en la que también están representados Exteriores, Defensa, Hacienda, Interior, Industria y Presidencia. Esta junta se encarga de analizar las solicitudes y dar el visto bueno a las licencias. Desde que las operaciones se autorizan hasta que la venta se hace efectiva pueden transcurrir varios años, de modo que la cifra de operaciones autorizadas es un indicador que permite anticipar la marcha del sector en los próximos años.
Subida de las exportaciones
En el capítulo de las operaciones de venta que ya habían sido autorizadas en años anteriores y que se efectuaron finalmente entre enero y junio de este año, la cifra también es superior a la del primer semestre de 2015. En concreto, las empresas españolas exportaron 1.837 millones de euros en material de defensa frente a los 1.727 millones de un año atrás, lo que supone un incremento del 6,4%. También hubo subidas en las exportaciones de material antidisturbios -2,9 millones frente a 1,1 millones, 2,5 veces más- y de tecnologías de doble uso -154 millones frente a 81, 1,9 veces más-.
Entre los principales compradores de material de defensa español en los seis primeros meses del año figuran Reino Unidos (517 millones de euros, el 28% del total), Omán (196 millones), Alemania (195 millones), Egipto (138 millones) y Malasia (135 millones). Egipto es uno de los países sobre el que las ONG han advertido reiteradamente por el riesgo de que las armas españolas acaben empleándose para vulnerar derechos humanos. Otros destinos potencialmente conflictos a los que España volvió a vender material bélico son Arabia Saudí, Bangladesh, Colombia, Irak, Israel, Paraguay y Ucrania.
De enero a junio hubo 18 operaciones que superaron la barrera de los 10 millones de euros, y cinco que rebasaron los 100 millones: un avión de reabastecimiento en vuelo y componentes para aviones y misiles exportado a Reino Unido (431 millones), un paquete de dos aviones y piezas para reparaciones vendido a Omán (195 millones), un envío de piezas para aviones a Alemania (149 millones), una operación de exportación de cinco aviones a Egipto (136 millones) y la venta de un avión de transporte y sus repuestos a Malasia (135 millones).
Del total de operaciones efectuadas, el 45,8% de las ventas de material de defensa recalaron en países que pertenecen a la OTAN y también a la UE, como Reino Unido, Alemania, Italia, Francia o República Checa. Además, un 5,5% adicional se exportó a estados que pertenecen a la OTAN pero no a la UE (Turquía o Estados Unidos, entre otros), o que forman parte de la UE pero no de la OTAN (como Suecia). El restante 48,7% acabó en otros países.
Operaciones denegadas
En los seis primeros meses del año, la JIMDDU apenas denegó autorizaciones. Es decir: casi todas las peticiones para exportar armas recibieron luz verde del Gobierno. En el capítulo de material de defensa, la junta autorizó 818 peticiones y denegó una, consistente en exportar chalecos de protección a Libia. En cuanto al material antidisturbios y las armas de caza, se autorizaron 216 ventas y se rechazaron dos de gas lacrimógeno a Egipto y tres de cartuchos de caza a Guinea Bissau. Finalmente, la junta permitió 280 ventas de material de doble uso y se opuso a cinco: una máquina fresadora a India, un sistema de medición de coordenadas a Pakistán y tres ventas a Rusia.