José Sánchez, Secretario General de CNT de Badalona, habla acerca de la convocatoria lanzada por este sindicato para realizar una manifestación obrera el 11 de septiembre, invitando a participar a «todos los sectores laborales y sociales que hoy mantienen conflictos activos en Catalunya». ¿Qué análisis de la realidad catalana hacéis para concluir que es necesario […]
José Sánchez, Secretario General de CNT de Badalona, habla acerca de la convocatoria lanzada por este sindicato para realizar una manifestación obrera el 11 de septiembre, invitando a participar a «todos los sectores laborales y sociales que hoy mantienen conflictos activos en Catalunya».
¿Qué análisis de la realidad catalana hacéis para concluir que es necesario lanzar esta convocatoria?
No hay que remontarse muy atrás para comprender lo que se ha desatado en Catalunya, sólo desde navidades cuando se despidieron a los 660 de Seat hasta ahora, aunque podríamos remontarnos a más atrás (sólo en el grupo Seat hubieron 240 despidos, más 46 despidos disciplinarios en Martorell; en otras empresas ya habían habido despidos masivos con anterioridad que se silenciaron).
Hasta estos momentos podemos contar suficientes conflictos sindicales para concluir que hay un ataque directo del empresariado para rentabilizarse, si cabe más, a costa de poner trabajadorxs en la calle. El fenómeno deslocalizador es evidente y viene de más atrás, cuando no éramos un mercado saturado se asentaron en nuestras ciudades, con subvenciones y prebendas; ahora buscan otros mercados más rentables y lugares donde la mano de obra es más barata y no hay derechos laborales. Es el afán capitalista de no tener límites en los beneficios, porque estas empresas no tienen crisis, sólo ansias de ganar más. En otros casos es simplemente una excusa por parte de la empresa para difundir el miedo entre los trabajadores y negociar convenios a la baja que las grandes gestoras sindicales están dispuestos a firmar, y de paso acabar con la conflictividad en las empresas.
Nos encontramos y no es tampoco un caso aislado, en un ciclo de pérdida de los derechos laborales díficil de parar, porque los organismos que tenían que defender a los trabajadorxs, es decir los sindicatos, en referencia directa a UGT y CCOO, se encuentran más cerca de los empresarios que de los trabajadores. Estas gestoras sindicales ya no gestionan las luchas, si no que hacen negocio de ellas. Muchos trabajadorxs que no están muy enterados todavía confían en ellos, pero existe también un buen número de trabajadorxs que están actuando al margen de ellos, y están llevando muchas luchas de forma autónoma, como colectivos o redes, caso de la Xarxa contra el tancament (red contra los cierres). Estxs trabajadorxs son el tipo de Seat, Ibéria, y de otras empresas en las cuales ha habido problemas. El caso de Ibéria, polémicas aparte, tiene un fondo así, trabajadorxs que ya no obedecen a sus sindicatos y toman iniciativas propias, acertadas o no, pero es así.
Este es el contexto más cercano para la CNT, nosotros llevamos desde los famosos Pactos de la Moncloa anunciando que esto iba a pasar, y por fin muchos trabajadores se están dando cuenta, aunque hay mucho todavía que hacer porque para nosotros lo que falla es el modelo sindical que heredamos del franquismo, los trabajadores no podemos continuar confiando en que los comités de empresa deben gestionar nuestras luchas eso es nefasto y nos divide como trabajadores.
Desde CNT convocáis «sin ánimo de protagonismo y con mentalidad solidaria» a esta movilización, cuya preparación se discutirá el día 2 de septiembre en una asamblea. Invitáis a participar a trabajadores de Braun, Seat, Iberia, de la Xarxa contra els Tancaments i la Precarietat… ¿os han confirmado participación? ¿Prevéis que el objetivo básico de la manifestación, que es aglutinar a los sectores en lucha de Catalunya, se va a conseguir?
Estábamos en pleno mes de agosto cuando lanzamos públicamente la convocatoria, mucha gente estaba de vacaciones y ya se sabe que toda la actividad baja. Se ha contactado con personas que están en estos colectivos, se les ha hecho llegar cartas con la convocatoria firmadas y selladas por CNT, y me imagino que muchos también son asamblearios y deberán discutirlo porque es lo lógico. De todas maneras en estos más de cinco meses de huelga en Mercadona, nos hemos ido viendo y muchos han asistido a las convocatorias; gentes de la Xarxa, de la CGT, de Seat y de otros colectivos a los cuales aprovecho para agradecerles su solidaridad. En la ayuda económica también hay mucho apoyo y estos colectivos también han estado ahí, en ocasiones de forma simbólica pero que nos da mucha moral. Por tanto, si en la asamblea del día 2 se acepta nuestra propuesta y nos ponemos a organizar la jornada de lucha esto se conseguirá.
Nuestra propuesta es muy clara, no tiene intereses ocultos, no pretendemos nada más que juntarnos los que tenemos conflictos en un día clave para hacer oir nuestra voz, no pretendemos ser protagonistas de nada, no queremos que se especule en los análisis; ni queremos abanderar nada, ni queremos dar guiños a la izquierda independentista, con la cual no compartimos nada por nuestro apoliticismo. Decimos esto porque el 11 de septiembre es la diada nacional de Catalunya, día en que salen los nacionalistas, pero eso no va con nosotros y, les guste o no, es así, en la CNT pensamos de otra manera, tampoco pretendemos «chafar» la convocatoria de nadie, no creo que sea el caso. Para la CNT es un día más en estos más de 5 meses, una manifestación más en las más de 40 que llevamos, pero con más compañerxs y compartiendo los problemas laborales entre todxs.
Profundizando sobre el tema de los contactos, ¿qué otros ejemplos de apoyo mutuo han existido en los últimos meses entre esos sectores en conflicto, de manera que ahora veáis viable hacer una manifestación conjunta? En definitiva, ¿se puede decir que se está forjando una embrionaria unidad -desde la autonomía- de los sectores obreros en lucha?
Durante los últimos meses, nos hemos ido encontrando en la calle, en ocasiones hasta con otros sectores sociales, que no están en la órbita laboral como en caso de los inmigrantes o los padres que reclaman la paternidad compartida, pero muchos sábados en Barcelona hemos coincidido diferentes manifestaciones en el mismo momento. Con los sectores laborales en lucha ha pasado también, y cuando han convocado gente nuestra han acudido, y al revés. A las convocatorias de la Xarxa en Sants o de Braun en Sant Cugat, estuvieron compañeros nuestros y cuando en el 15 de Julio convocamos la manifestación a nivel nacional, pudimos verlos allí.
Sobre la autonomía de los colectivos u organizaciones, pensamos que irremediablemente debe ser así, cada organización hay que respetarla y debe respetar a la vez en sus decisiones y su conflicto, siempre y cuando no traicione a sus trabajadores, si ocurre eso todxs hemos de ser implacables con los traidores y solidarios con los afectados. Y para que eso no pase, no se debe dejar desarrollar cúpulas ni nada por el estilo. En la CNT y sirva de ejemplo nada más, todos somos la base, los comités gestionan las decisiones que les toca de la asamblea, y esa es la naturaleza del sindicalismo o del anarcosindicalismo.
Esto que hoy es una novedad, debería de ser el pan nuestro de cada día, en la historia del sindicalismo español, y sobre todo en las misma empresas, organizaciones históricas han ido de la mano, es el caso de la antigua UGT y CNT, llegando incluso a compartir la revolución de Asturias del año 1934.
Por otro lado, yo no diría que se está forjando nada, sería un poco pretencioso decirlo, pero no debe de sorprender que de aquí en adelante mucha gente se encuentre en el camino, cada cual por su verea, porque la ofensiva del empresariado neoliberal ya hace tiempo que ha empezado y los problemas se multiplican. Hoy sólo reclamar sindicación en una empresa equivale a despido; es el caso Mercadona, donde es imposible constituir un sindicato que no sea UGT.
¿Qué continuidad se le pretende dar a esta campaña? ¿Creéis que puede servir de ejemplo de trabajo conjunto, de cara a romper la dispersión de la clase obrera?
Eso no es sólo cosa nuestra, de momento la CNT en Catalunya y en todo el Estado, tiene un conflicto abierto con Mercadona de Juan Roig, y con vistas a que será mucho más largo de lo que ha sido hasta ahora. Pero te voy a reponder tan claramente como solemos hacerlo, para la CNT la solidaridad es muy importante, no queremos dejar de lado a nadie que esté en lucha, porque sabemos lo solos que se van a ver muchos trabajadores en este desierto sindical. Pero la CNT no va a dejar de ver que existe un problema estructural, que es el marco de relaciones laboral que nos han impuesto y la gente sensible debe de romper con ello, dejar a UGT y CCOO cada vez más aislados en sus comités de empresa y sus elecciones sindicales, es lo mejor que puede pasar. Porque estamos seguros que la otra opción es el modelo de lucha en la calle y através de las secciones sindicales aunque más duro, es también más ficaz para resolver los problemas y relanzar este movimiento obrero hoy en letargo. La continuidad de todo esto está por construir si es que es el momento. Aunque suene a maximalismo, nosotros siempre decimos que: «la emancipación de los trabajadores será obra de ellos mismos, o no será», si es que es, la CNT estará allí, que nadie lo dude.
En países como Argentina o Venezuela, entre otros, el cierre de fábricas ha sido enfrentado por numerosos grupos de trabajadores con la okupación de estos centros y su puesta en funcionamiento nuevamente bajo control obrero. Teniendo en cuenta el galopante problema de la deslocalización en el estado español y los ejemplos de Catalunya, ¿qué opinión os merece este tipo de acción obrera?
La colectivización de empresas ha sido históricamente unas de las prácticas del anarcosindicalismo, si alguien en la historia ha socializado empresas han sido los anarquistas, porque no sólo es la solución ha problemas concretos, sino un paso más a la libertad. Racionalizar el trabajo, puesto que es imposible acabar con él, es la manera de garantizar una vida en Paz, en tranquilidad y un mundo mejor donde a la vez respetemos el medio. Un buen número de compañeros nuestros hace tiempo que montaron sus cooperativas, normalmente del campo y no trabajan para el capitalismo, por lo menos no directamente.
Lo de las empresas son otros cantares, aquí podría ser una solución, aunque creo que lo tenemos más díficil que en esos países, sobre todo en las zonas más industrializadas donde el capitalismo y la administración es muy fuerte, y se han de dar muchas condiciones. También falta convencimiento y que alguien empiece, pero seguro que si alguien da el ejemplo se puede producir un efecto dominó, aunque es bastante difícil en el contexto donde nos movemos.