El barrio de La Parada en Manresa (Barcelona) tiene un nuevo edificio recuperado para los hogares ahogadas por las hipotecas. Desde ayer, 27 de agosto, dos familias ocupan un inmueble recuperado por la Plataforma de Afectadas por la Hipoteca y el Capitalismo (PAHC) del Bages, a la espera de sus nuevos vecinos, que irán entrando […]
El barrio de La Parada en Manresa (Barcelona) tiene un nuevo edificio recuperado para los hogares ahogadas por las hipotecas. Desde ayer, 27 de agosto, dos familias ocupan un inmueble recuperado por la Plataforma de Afectadas por la Hipoteca y el Capitalismo (PAHC) del Bages, a la espera de sus nuevos vecinos, que irán entrando en la casa a lo largo del mes de septiembre. Se trata de personas con fechas de desahucios pendientes, en proceso de dación en pago o que provienen de ocupaciones previas, como indica a Diagonal un miembro de la asamblea de la PAHC. El edificio, situado en este barrio que tradicionalmente ha estado poblado de migración andaluza y extremeña, tiene 18 pisos y pertenece a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).
El «banco malo» es un hueso duro de roer a la hora de permitir un uso social de la vivienda que acumula en sus balances. Como señalan desde la PAHC, la Sareb «no coge el teléfono» para negociar soluciones a las familias en situación de emergencia habitacional. Tienen experiencia, ya que otro de los edificios recuperados en Manresa también pertenece a la Sareb. Se trata de un bloque de 14 pisos ocupado en la calle Girona en abril de 2014, en el que actualmente viven 39 personas, más de la mitad menores de edad. El 19 de septiembre de este año, la PAHC está citada a declarar en los juzgados por la ocupación de este inmueble. A pesar del cierre en banda de Sareb, la asamblea tiene previsto comunicarse hoy con la sociedad propietaria del piso recuperado en la tarde de ayer. Les avala la solución obtenida para cinco familias que en junio de 2013 entraron en un edificio de la calle Puigcardener, también en Manresa, propiedad de la Caixa de Pensions. La PAHC consiguió que la caja realojara a las cinco familias y se comprometiera a ceder el inmueble al Ayuntamiento para que éste lo gestionase como vivienda social.
El edificio ocupado en el barrio de La Parada es el número 25 recuperado por la Obra Social de la PAH y el sexto que pertenece a la Sareb. Desde la PAHC se entiende la ocupación «como necesaria» en Manresa, que «es la ciudad con más vivienda vacía de Catalunya». Hasta 8.000 pisos están desocupados, casi una cuarta parte del parque de vivienda de la ciudad, que apenas cuenta con cuarenta pisos de alquiler social. Esta situación, y la presión de la asamblea de afectados por las hipotecas, llevó al ayuntamiento a aprobar la moción de multar a los propietarios de inmuebles vacíos. Pero, como indican desde la PAHC, su trabajo es vigilar que se lleven a cabo las medidas aprobadas, «tienen que entender la ocupación como necesaria y, en caso de desalojo, deben dar apoyo político», resume un integrante de esta asamblea, quien pide al poder político que «no siga pajareando y temblando delante del poder bancario».
La asamblea, en la que cada domingo participan entre 150 y 200 personas, trabaja de manera integral en la vivienda, tanto con personas afectadas por las hipotecas, como en ocupación y en alquileres. De hecho, apuntan desde la PAHC, la mayoría de la gente que se está acercando en las últimas semanas llega con problemas para pagar el alquiler.