CCOO y UGT han anunciado que intensificarán su plan de movilizaciones contra el “desmantelamiento” de Correos.
Ambos sindicatos achacan la pésima situación por la que pasa el servicio postal a la gestión del presidente, Juan Manuel Serrano, al que acusan de llevar a cabo “un plan de desguace” del operador público.
La “operación de debilitamiento” que denuncian ambas organizaciones, queda reflejada en un recorte del presupuesto de hasta 110 millones (el 50% desde 2018); y en el “desmontaje”, mediante el cierre de centros o el trasvase de actividad y empleo desde la matriz a la filial Correo Express.
“Tras tres años al frente de Correos, se ha demostrado el fracaso rotundo de la gestión de Serrano, que ha colocado a Correos en los mayores déficits de Correos en su historia, con casi 500 millones de pérdidas en ese periodo y con 7.000 empleos menos a consecuencia de la caída de actividad”, denuncian.
En el plano laboral, CCOO y UGT añaden que al recorte de plantilla se suma una elevada precarización con un 23% de contratos a tiempo parcial, pérdidas salariales, cambios de turnos, jornadas y horarios que, según los sindicatos, no se ajustan a la legalidad, restructuraciones de centros no negociadas, y otras prácticas como el “exterminio” de jefaturas y directivos no afines al “régimen”, afirman.
No es la primera vez que los sindicatos critican el modelo de gestión de Serrano, al que llevan tiempo denunciando por invertir en “productos estrella meramente mediáticos” y en “autobombo personal y político”. El presidente de Correos ha gastado 300 millones en campañas de publicidad en medios de comunicación que, según los sindicatos, no han servido para ganar en productividad.
“Correos pierde actividad a ritmos acelerados, inmerso en proyectos de diversificación que solo han provocado pérdidas, en una internacionalización sin dirección alguna, cuyos resultados deficitarios se ocultan, con 7 mil empleos menos (de 55 mil en 2018 a 48 mil en 2021, camino de los previsibles 46 mil en 2022), y una cuenta de resultados que refleja pérdidas de casi 500 millones desde que Serrano está al frente de la compañía, con previsiones para 2022 de otros casi 100 millones de euros, aunque las estimaciones de CCOO y UGT son de hasta los 200 millones”, resumen ambas centrales.
Por todo ello, CCOO y UGT piden al Gobierno que “deje de avalar con su pasividad a quien está colocando a Correos en un punto crítico de difícil retorno, tome las riendas del diálogo social postal y aborde el debate de un modelo postal público con financiación suficiente y que garantice la cohesión social y territorial”.
Las movilizaciones anunciadas por los sindicatos se prolongarán durante 6 meses, hasta la próxima primavera y combinarán varias acciones (rodadas postales, concentraciones, desayunos, acción parlamentaria, sensibilización social, etc.).