¿Qué impacto tiene sobre la salud humana la contaminación atmosférica? El 96% de la población urbana de la UE estuvo expuesta, en 2020, a concentraciones de partículas finas (PM2.5) superiores a los niveles (orientativos) establecidos por la OMS, según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA).
Cerca de 238.000 personas murieron prematuramente en 2020, en la UE, por la exposición a PM2.5 por encima de los citados criterios; 49.000 fallecimientos prematuros por el dióxido de nitrógeno (NO2) y 24.000 por el ozono, según el informe La calidad del aire en Europa 2022; a ello se añaden otros efectos negativos, por ejemplo sobre los bosques, los cultivos o la biodiversidad
Elx en Bici y Ecologistas en Acción organizaron una bicifestación -el pasado 23 de septiembre- que partía de la plaza Barcelona de la ciudad de Elche, con el lema #ConBiciNiUnPasoAtrás (se adhirieron más de 30 entidades sociales, ecologistas, sindicatos y partidos); los participantes rechazaron la eliminación de carriles bici promovida por el Gobierno municipal de coalición entre el PP y Vox.
Otra perspectiva de interés son las investigaciones de los movimientos populares; Valencia se halla entre las ciudades del estado español más contaminadas en partículas finas PM2.5, según las mediciones realizadas por València en Bici-Acció Ecologista Agró, dentro de la iniciativa de ciencia ciudadana Cycling With Clean Air (proyecto de la coordinadora Con Bici, que reúne a más de 70 asociaciones ciclistas del estado español).
Los datos fueron recogidos por personas voluntarias en 16 ciudades españolas, entre enero de 2022 y mayo de 2023, con cerca de 3.000 horas de medición. Los resultados se hicieron públicos el pasado 13 de septiembre.
Según el reporte, “aunque la media de concentración de partículas PM2.5 se mantiene en 9 ug/m³ en España, lo que está en el rango amarillo según nuestros estándares, supera los límites recomendados por la OMS”; respecto al promedio de concentración de PM2.5 (ug\m3) según el horario, las cotas más altas -en las ciudades analizadas- corresponde a las 7, 8, 9 y 21 horas (debido al aumento del tráfico).
La nota informativa de Acció Ecologista Agró subraya que, junto a Valencia, ciudades como Vitoria registran una mala calidad del aire, frente a otras como Burgos con menores niveles de polución.
“El 68% del tiempo de medición en Valencia el voluntariado estuvo expuesto a niveles de contaminación más alto del sugerido por la OMS”, según el comunicado; en una cartografía adjunta, puede observarse cómo el peor resultado corresponde al recorrido por algunas de las arterias principales de la ciudad (avenidas de Giorgeta, Ausiàs March y la Plata).
Tal vez la conclusión pueda visualizarse en la comparativa con otras ciudades, como Santiago de Compostela; en Valencia el 32% de las mediciones cumplen con las directrices de la OMS (concentraciones medias anuales de PM2.5 que no superen los 5 ug/m3), mientras que en la ciudad gallega el porcentaje se sitúa en el 53%; asimismo en Valencia el 17% de las medidas recogieron entre 16 y 25 ug/m3, porcentaje muy superior al de Santiago (5%).
València en Bici-Acció Ecologista Agró plantea, para mejorar la calidad del aire, iniciativas como las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), en las que se restringe el acceso a determinados vehículos -los más contaminantes- por la ciudad entera o un sector de ésta.
Las agencias Efe y Europa Press informaron de que sólo 14 municipios españoles de los 151 que tienen la obligación de implantar las ZBE (según la Ley de Cambio Climático de 2021), ya lo han hecho, mientras que otros 122 han iniciado los trámites (datos de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente, septiembre 2023); en ciudades como Valencia, el partido de extrema derecha Vox ha rechazado la activación de las ZBE.
Si se considera la veintena de ciudades analizadas por Con Bici, el promedio de concentración de partículas PM2.5 es de 8,9 ug/m3; muy por encima se sitúan Valencia, Vitoria y Cartagena (11,4 ug/m3), Gijón (11 ug/m3); Zaragoza (10,6 ug/m3) y Barcelona (10,2 ug/m3); en el reverso del listado se ubican Albacete y Burgos (5,9 ug/m3) y Santiago de Compostela (6,7 ug/m3).
Las PM son un material particulado (partículas sólidas y líquidas) suspendido en el aire: sulfatos, nitratos, amoniaco, cloruro de sodio, carbono negro, minerales y agua, explica la Página Web de Con Bici; las partículas PM10, gruesas, pueden penetrar hasta los pulmones; las finas, PM 2.5, “pueden atravesar la barrera pulmonar y entrar en el sistema sanguíneo”.
El PM se genera, sobre todo, en los procesos de quema de combustible en el transporte, el sector energético, los hogares y tanto la agricultura como la industria; más en concreto, en las ciudades pueden detectarse tanto las PM10 como las PM 2.5, “siendo el tráfico una de las principales fuente de emisión de estas últimas”.
El estudio Cycling With Clean Air recuerda que, en 2013, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) de la OMS calificó como “cancerígenas” las partículas en suspensión y la polución del aire exterior.
A pesar de este diagnóstico, a finales de septiembre el Consejo Europeo acordó su propuesta de Reglamento denominado Euro 7 sobre emisiones de vehículos de motor, que mantiene los límites de emisión para los vehículos ligeros (turismos y furgonetas particulares) y los reduce para los pesados (autobuses, autocares y vehículos comerciales pesados); se trata de cambios respecto al planteamiento inicial de la Comisión Europea (noviembre de 2022).
El Consejo Europeo señala que el transporte produce cerca del 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero en la UE; del porcentaje citado, el 71% corresponde al transporte por carretera, el 14% a la aviación, el 13% a los buques y el 0,5% a los trenes.
Fuentes comunitarias añaden que el sector del automóvil representa más del 7% del PIB de la UE, segundo fabricante -tras China- de vehículos de motor.
¿Qué alternativas plantea el movimiento ciudadano? La coordinadora Con Bici inició en julio una campaña de recogida de firmas digitales Por los carriles bici y la movilidad sostenible de tu ciudad; se rechaza, por ejemplo, la eliminación de medidas que desincentiven el uso del automóvil privado; cerca de 13.000 firmas han respaldado la iniciativa.
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