El 17 de enero se formó Podemos. Han pasado dos meses y en la balanza muchas ilusiones y satisfacciones pero también dudas razonables. Las que vamos a exponer aquí son algunas dudas compartidas con amig@s que estamos construyendo Podemos. 1.- El bagaje positivo de Podemos han sido los actos de presentación en numerosos lugares, la […]
El 17 de enero se formó Podemos. Han pasado dos meses y en la balanza muchas ilusiones y satisfacciones pero también dudas razonables. Las que vamos a exponer aquí son algunas dudas compartidas con amig@s que estamos construyendo Podemos.
1.- El bagaje positivo de Podemos han sido los actos de presentación en numerosos lugares, la participación ciudadana en las redes sociales y los círculos que se están montando en todo el Estado español gracias a la movilización de cientos o miles de activistas. Echando un vistazo en Facebook observamos la extensión geográfica y sectorial a la que hemos llegado. Desde cualquier pueblecito a las grandes capitales, desde Bruselas a Edimburgo. Eso nos trae a la memoria los primeros meses de formación de las asambleas populares del 15M.
2.- Nos sentimos orgullos@s de haber llegado hasta aquí en solo dos meses. De la receptividad con la que esta iniciativa ha calado entre gentes del 15M y, en nuestro caso, muchas personas de la Marea Blanca que han estado defendiendo -en primera línea- un modelo de salud basado en la universalidad y su carácter público.
3.- Podemos no pretende ser una operación política más. No pretende regirse por intereses particulares ni de partidos. Podemos está compuesto por gentes de todo tipo estén o no organizadas. Nacemos en un nuevo ciclo político y social cuya señal de salida la dio el 15M. Compartimos con miles de activistas de las Mareas o del 15M la resistencia a que el peso de la crisis la paguen l@s débiles, l@s jóvenes, l@s mujeres y las clases sociales excluidas de la distribución de la riqueza. También compartimos con ell@s la necesidad de una ruptura profunda del orden social y político establecido.
4.- Nos preocupa el silencio de los grandes medios de comunicación (aunque ya sabemos que no dependen de nosotr@s). Nos preocupa la intolerancia de personas de izquierda que se han manifestado en las redes sociales como si fuéramos sus enemig@s acusándonos de dividir a la izquierda o de ser agentes del neoliberalismo. Aprendimos del 15M a sumar, integrar y consensuar.
5.- Nos preocupa que, tengamos un planteamiento cortoplacista de Podemos y que la prueba de fuego sean las elecciones al Parlamento europeo. Podemos deberíamos ser un proyecto a más largo plazo y no solo electoral. ¿Qué pasaría si el 25 de mayo obtenemos malos resultados debido al desconocimiento de nuestra propuesta? ¿Habría que disolverse o integrarse en I.U? Rotundamente no. Decía el 15M: vamos despacio porque vamos lejos. Tomemos nota: solo consiguen victorias los movimientos que han mostrado coherencia, valentía y determinación como la Marea Blanca, Gamonal o la PAH.
6.- Nos preocupa que se considere Podemos un fin en sí mismo. Que no se vea que somos un medio para revolucionar, atizar y dinamizar la construcción de una alternativa política más grande capaz de construir un nuevo bloque social que acabe con la hegemonía neoliberal de los partidos del sistema. Ese desafío no lo podemos llevar a cabo solamente las fuerzas que hoy constituimos Podemos.
7.- Hemos nacido para sumar y agregar, no para dividir. El método propuesto para las elecciones europeas es bueno: que vote la gente mediante primarias. Pero el 25 de mayo debería ser solamente una estación de un largo viaje. Si queremos continuar deberíamos abrirnos al máximo a la participación ciudadana, a los colectivos en lucha, y también debatir con las fuerzas políticas que defiendan la derrota del proyecto neoliberal de la Troika. Sin prisas pero sin pausas, nuestro programa se construirá desde abajo, aprendiendo, relacionándonos, metabolizando lo que las Mareas, la PAH o el 15M han venido haciendo y elaborando.
8.- Nos preocupa una construcción de Podemos de dos velocidades. Por arriba donde se toman decisiones sin consultar y por abajo donde se debate. No hagamos de la necesidad virtud. Lo que sirvió en un primer momento (promotores del proyecto) deberá ser reemplazado por estructuras democráticas reconocidas y estables de todas las gentes que participamos en los círculos.
9.- Nos preocupa que nuestro discurso político sea una construcción colectiva. Que las palabras sean lo que son (y lo que parecen). La historia y la cultura (también política) con la que much@s nos identificamos no incluye el patriotismo sino el respeto de todos los pueblos a decidir libremente; no es el sentido común sino el sentido común a la justicia y a los derechos sociales. Sí es en cambio, la inclusividad o la igualdad de género.
10.- Podemos somos todas y todos: l@s que firmamos el manifiesto inicial, l@s que apoyamos en las redes sociales, l@s que hemos organizado círculos en numerosos lugares, l@s que nos han dicho ya que nos apoyarán o votarán el 25 de mayo. Podemos es un movimiento en marcha donde casi todo está por construirse.
Carmen San José, Javier Cordón y Jesús Jaén. Miembros del Círculo de Podemos en sanidad
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