«Consideramos que el PSOE ha cedido ante las presiones de Estados Unidos tras la retirada de las tropas de Irak, aunque lo justifiquen con el argumento de que la legalidad internacional avala la presencia de las tropas españolas en Afganistán». Así de tajante se ha mostrado la Plataforma Aturem la Guerra, que acoge a más […]
«Consideramos que el PSOE ha cedido ante las presiones de Estados Unidos tras la retirada de las tropas de Irak, aunque lo justifiquen con el argumento de que la legalidad internacional avala la presencia de las tropas españolas en Afganistán».
Así de tajante se ha mostrado la Plataforma Aturem la Guerra, que acoge a más de 250 organizaciones sociales y ONG, ante la reciente decisión del Parlamento español de enviar más soldados a este país a través de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF), comandada por la OTAN y con mandato de la ONU, para reforzar la seguridad de cara a las elecciones de octubre. Según las entidades, las fuerzas militares que ocupan un país, aunque realicen actos humanitarios, no dejan de ser tropas de ocupación. «Por más que haya resoluciones de la ONU, ésto no convierte las políticas de intervencionismo militar en aceptables porque no quedan desvinculadas de los intereses de potencias como EE.UU.».
En el comunicado, las organizaciones critican que la guerra y ocupación de Irak haya colocado en segundo término la realidad de Afganistán, dónde tras más de tres años de ocupación la situación es caótica, y recuerdan que sólo una parte reducida del territorio está bajo control real de las tropas ocupantes mientras que el resto está dominado por los diferentes «señores de la guerra». «Las ayudas de los EE.UU. y otros países para la reconstrucción del país son exiguas y la mayoría de la población vive en la miseria»(…) «Tanto la ocupación militar de Afganistán como la de Irak tienen un objetivo económico y geoestratégico», añaden. Por estos motivos, la Plataforma considera la decisión un «grave error político» y exige al Gobierno del PSOE que lleve a cabo una auténtica política internacional de paz, de respeto a la soberanía de los pueblos y que rompa con la política belicista y agresiva impulsada por Estado Unidos.
Además, Aturem la Guerra afirma que «la ocupación que realizan las tropas de la OTAN en Afganistán tienen el mismo objetivo que las tropas rusas en Chechenia. Y el hecho de que el ejército español partice directamente en la ocupación de Afganistán, comporta el silencio diplomático ante el genocidio que está llevando a cabo el Gobierno ruso en Chechenia para garantizar la salida del mismo petróleo por el Mar Negro».
Dudas de las ONG ante el desplegue de la OTAN
Por otra parte, varias ONG que trabajan en Afganistán han expresado a IRIN, la red informativa de la ONU, sus dudas ante el despliegue de nuevas tropas de la OTAN al norte y oeste del país con el argumento de garantizar la seguridad electoral. Según las organizaciones, la expansión de los Equipos de Reconstrucción Provincial (PRT por sus siglas en inglés) del ISAF «no mejorarán necesariamente la situación de seguridad».
Según Sally Austan, de CARE International, «es decepcionante que la OTAN continue su tarea a través de los PRT sin que haya un cambio en el mandato» que le da la ONU. Austan defiende que el despliegue se tendría que centrar en dar respuesta a las causas que provocan la inseguridad en el país, como el narcotráfico, los señores de la guerra o la carencia de formación de la policía afgana, pero sin embargo, los PRT no tienen competencias en ámbitos como la lucha contra las drogas.
La representante de la ONG Mercy Corps, Lynn Renkes, aun cuando le parece bien la iniciativa de la OTAN, duda que los PRT puedan proporcionar la seguridad necesaria mientras mantengan un mandato doble que incluye tareas de seguridad y humanitarias a la vez.
Feisel Ginalli, coordinador en Afganistán de la ONG italiana Cooperaziones Internazionale, considera que el aumento de tropas puede mejorar la seguridad durante el proceso electoral en determinadas áreas, pero a largo plazo «no sabemos como ayudará a la comunidad internacional a continuar su tarea, habremos de esperar y ver si hay alguna mejora».