Los prostíbulos de Valencia han encontrado en la Entidad de Transporte Metropolitano (ETM), empresa de titularidad pública, la mejor forma de exhibirse y captar clientes. Desde hace días, algunos autobuses -nueve líneas en total- publicitan casas de citas en la parte trasera, con unos anuncios gigantes y que hacen bien visible la imagen de las […]
Los prostíbulos de Valencia han encontrado en la Entidad de Transporte Metropolitano (ETM), empresa de titularidad pública, la mejor forma de exhibirse y captar clientes. Desde hace días, algunos autobuses -nueve líneas en total- publicitan casas de citas en la parte trasera, con unos anuncios gigantes y que hacen bien visible la imagen de las mujeres como objetos de consumo.
Esta publicidad, que incluye direcciones, números de teléfono y webs de clubes que ofrecen servicios de prostitución, recorren las principales calles de la ciudad, dejando a la vista de todos y todas -también menores- la apología de un negocio que, pudiera incluso -no sería la primera vez que se una red fuera descubierta siguiendo el hilo de los anuncios- estar relacionado con la trata con fines de explotación sexual.
Según aseguró ayer Laura Seara, secretaria de Estado de Igualdad, las instituciones «ya han iniciado los trámites para que esos anuncios sean retirados». El Observatorio de la Imagen, dependiente del Instituto de la Mujer no había recibido ninguna noticia, pero ha decidido actuar de oficio, «como corresponde».
En marzo de este año un informe del Consejo de Estado determinó que había que vetar los anuncios de contactos en prensa a través de una ley específica. Pero ni siquiera el contundente informe consiguió acelerar los trámites. Después de varias reuniones con los grupos parlamentarios, el Gobierno propuso finalmente modificar la Ley General de Publicidad para incluir la prohibición de estos anuncios en los medios escritos y digitales. Antes del verano, los grupos aún esperaban una reunión conjunta con el Gobierno para debatir la propuesta. Y ahora, con la convocatoria de elecciones, será una de las leyes que el Gobierno socialista deje sin aprobar.
No obstante, esta mañana Seara defendía la importancia del «trabajo hecho» y, especialmente, «del acuerdo y el consenso político existente en esta materia». Por otra parte, la socialista ha destacado que el programa de su partido recoge de manera explícita, «la eliminación de los anuncios de contacto, no solo de la prensa escrita, sino también en otro tipo de soportes, como vallas publicitarias, televisión e Internet».
Los autobuses valencianos ya estuvieron envueltos en otra polémica relacionada con la publicidad. En marzo de 2009, los autobuses de la EMT del Ayuntamiento de Valencia fueron los que vetaron una campaña de la Unión de Ateos y Librepensadores (UAL), con el lema «Probablemente Dios no exista. Deja de preocuparte y disfruta de la vida».