Castilla León aprueba por ley un vertedero que incluye también una incineradora para la quema de distintos residuos peligrosos. Las organizaciones ecologistas y sociales se oponen.
Los vecinos de la comarca de Tierra de Campos en Palencia ven peligrar su entorno. El pasado 14 de febrero la Junta de Castilla y León dio el visto bueno al estudio de impacto ambiental del macrovertedero que se situará en el municipio palentino de Ampudia y que también albergará una incineradora.
La Junta de Castilla y León aprobó en 2010 por ley el vertedero como un Proyecto Regional de interés, lo que permite que éste salga adelante sin que las sentencias judiciales de posibles recursos puedan pararlo. Esta artimaña legal blinda el proyecto, como ya pasó con los macrovertederos de Santovenia, Valladolid y Freno del Río en Zamora que gestiona la constructora ACS.
El macrovertedero de Tierra de Campos ha sido adjudicado a la empresa Complejo Medioambiental Tierra de Campos S.L., creada ex profeso por Befesa, filial de la constructora Abengoa y una de las principales empresas de gestión de residuos tanto en el Estado español como en la UE, lo que hace que la zona se convierta en el destino de residuos de todo el país, pese a la ausencia de industrias importantes en el entorno.
El proyecto, denominado Centro de Tratamiento Integral de Residuos Industriales no Peligrosos, consta de una superficie de 18 hectáreas y una capacidad de tres millones de toneladas, y contará con una planta de estabilización, tratamiento de lodos y evaporación de lixiviados, así como un horno incinerador de residuos industriales en masa, bautizado como Planta de Valoración Energética, algo que Ecologistas en Acción de Palencia ha calificado como una «completa novedad» en Castilla y León, «no contemplada en el Plan de Residuos Industriales de la comunidad».
Se prevé que acoja 190.000 toneladas de residuos anuales, de los que solamente el 10% podrán ser reciclados, 76.000 de ellos en la citada incineradora. Ecologistas en Acción denuncia que «la mayor parte de los residuos que se pretenden quemar serán lodos industriales, que previamente habrá que desecar, lo que invalida la justificación de que quemándolos se pretende producir energía».
Además, esta organización apunta que también «se quemarán rechazos de papel y plástico de todo tipo, incluyendo plásticos clorados como PVC, lo que garantiza la emisión de importantes cantidades de sustancias tóxicas orgánicas como dioxinas y furanos, conocidos alteradores hormonales de carácter cancerígeno, además de hasta 2,3 toneladas al año de metales pesados cuyo alcance el propio proyecto se fija en 25 km», lo que supone afectar a localidades importantes, incluida la capital palentina.
Para luchar contra este macrovertedero se ha constituido la Plataforma Meseta Limpia, integrada por varios ayuntamientos de la comarca, organizaciones ecologistas, sindicatos agrarios y ganaderos, cooperativas agroalimentarias y empresas turísticas de la zona.
MÁS DE 600 ALEGACIONES
La Plataforma contra el vertedero de Tierra de Campos ha presentado 600 alegaciones, entre las que destacan que no existe un estudio sobre el volumen y características de los residuos que se generan y el tratamiento que precisan, lo que vulnera la Ley de Residuos y la Directiva 2006/12/CE, que obliga a establecer una jerarquía que prioriza la prevención de residuos, y, si no fuera posible, su preparación para la reutilización, reciclado y en última instancia otro tipo de valorización y eliminación.
También afirman que con la incineración se crea un problema mayor que el que se pretende resolver incluso si se hace caso a la calificación dada por la Junta de residuos «no peligrosos» que la empresa aplica a éstos, ya que las dioxinas sí están consideradas como residuo extremadamente tóxico.
Las alegaciones al proyecto ponen de manifiesto que en las inmediaciones se encuentra la Nava de Pedraza, una de las zonas húmedas más importantes del Estado español, una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) incluida en el Espacio Natural de La Nava Campos de Palencia. Según las organizaciones en contra del proyecto, éste también supondrá empobrecer la comarca «ya que perjudica al turismo rural y natural y el establecimiento de industrias limpias o de carácter agroalimentario, inutilizando los grandes esfuerzos a favor de un desarrollo sostenible realizados en los últimos años».
El sindicato agrario COAG señala que una planta de este tipo no puede situarse en una zona agrícola sino junto a las empresas que producen los residuos.
Además, los alcaldes de la zona han tachado de demagogo al representante de la empresa promotora, Alfredo Velasco, y le acusan de ocultar del proyecto de adjudicación y de no cumplir las condiciones para licitar el proyecto.
Las organizaciones ecologistas criticaron que el periodo de alegaciones fuese sólo de 10 días y en fechas festivas (en Navidad de 2010). Tras la declaración favorable del estudio de impacto ambiental, la Plataforma contra el macrovertedero anuncia que continuará con las movilizaciones.
CUATRO INCINERADORAS EN 125 KM.
de la Planta de Residuos Industriales de Ampudia, que contempla una incineradora de 76.000 Tonelada/año, Palencia albergará la mayor concentración de incineradoras de residuos del mundo en el mínimo espacio, ya que la provincia ha autorizado ya cuatro incineradoras, de las que actualmente funcionan dos.
Palencia va a contar con cuatro incineradoras en 125 kilómetros de distancia, tres en 55 kilómetros aproximadamente y dos separadas por una distancia de 30 kilómetros.
Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/Castilla-y-Leon-da-luz-verde-a-un.html