El coordinador general de IU, Cayo Lara, ha presentado hoy en Valencia, junto al secretario de Acción Política de la misma formación, José Luis Centella, la Convocatoria Social para salir de la crisis y alcanzar la democracia real, «entendida como una gran alianza a largo plazo que implique reencontrarnos con la clase trabajadora y los […]
El coordinador general de IU, Cayo Lara, ha presentado hoy en Valencia, junto al secretario de Acción Política de la misma formación, José Luis Centella, la Convocatoria Social para salir de la crisis y alcanzar la democracia real, «entendida como una gran alianza a largo plazo que implique reencontrarnos con la clase trabajadora y los movimientos sociales, entre otros, el 15-M»; «De hecho, Izquierda Unida forma parte de los indignados de este país», han explicado.
Cayo Lara ha definido la Convocatoria social como «una aportación de IU a las luchas y movilizaciones que pretendan configurar, por un lado, un Bloque Social y Alternativo al neoliberalismo y, asimismo, una nueva agenda política para la acción de la izquierda; Ciudadanos y colectivos podrán presentar sus propuestas para elaborar este Programa en las asambleas que IU va a impulsar en el conjunto del estado y a través de las redes sociales».
«La Convocatoria Social pretende ser, sobre todo, un programa con gran carga anticapitalista y antineoliberal -ha resumido Lara-, elaborado a partir del debate y la participación de las bases y respetando las diferencias de personas y colectivos; es el momento de ofrecer respuestas concretas y reales a cuestiones como el desempleo, los embargos de viviendas, el modelo productivo que queremos, las amenazas sobre el sistema público de pensiones, la igualdad de genero o el modelo de estado», ha añadido el coordinador general de Izquierda Unida.
En comparación con la atonía y la desmovilización que reinaban en 2007, ha subrayado Cayo Lara, «ahora la gente sale a la calle para defender sus derechos, vivimos tiempos de rebeldía». En este punto, el coordinador de la formación de izquierdas, se ha referido al Movimiento del 15-M: «muchas de sus propuestas coinciden con las de IU; debemos tener por ellos el máximo respeto; la idea es acompañar, en ningún caso liderar ni manipular; nuestro objetivo es llevar sus planteamientos a las instituciones y contribuir a la politización de los elementos del movimiento que se califican como apolíticos«. A título de anécdota Cayo Lara regaló ayer a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, un ejemplar de «Indignaos», uno de los libros de referencia del 15-M.
Sin embargo, el dirigente de Izquierda Unida y miembro del PCE ha alertado del peligro de incluir a todos los partidos en el mismo saco o declararse antipartido o antipolítico, ya que IU se opone a los discursos y prácticas neoliberales tanto del gobierno socialista como del PP. «También es necesario respetar las instituciones democráticas por las que tanto hemos luchado», ha asegurado Lara.
Por último, Cayo Lara ha recordado que en la actual coyuntura histórica «la batalla ideológica y la lucha de clases están más vigentes que nunca». Para ello, se ha apoyado en una cita de Warren Buffet, el tercer multimillonario del mundo en el año 2010: «hay una lucha de clases, por supuesto, pero es mi clase, la clase de los ricos, la que dirige la lucha, y nosotros ganamos». «Este personaje ha estudiado el marxismo mucho mejor que nosotros», ha ironizado Lara.
Por su parte, secretario general del PCE y secretario de Acción Política de IU, José Luis Centella, ha explicado que el objetivo de la Convocatoria Social es «darle la palabra a la gente, que los ciudadanos sean los protagonistas reales de la política». Esto se traduce en cuestiones tan prácticas como la elaboración del programa para las próximas elecciones generales -«que sea algo vivo, no una tesis doctoral»- y el control sobre su aplicación efectiva, ha explicado José Luis Centella. «Tampoco aspiramos a que la Convocatoria sea una sopa de siglas, sino a la participación activa de la gente del 15-M, la que se implicó en la última huelga general y la que lucha en los barrios y en las fábricas», ha agregado.
Es ahí donde radica una de las cuestiones esenciales: la coherencia. Según el secretario general del PCE, «la credibilidad ha de estar muy por encima de las palabras, es decir, nuestros cargos electos en las elecciones han de cumplir escrupulosamente los compromisos adquiridos con los ciudadanos». Ahora bien, esto es muy difícil de conseguir sin romper «el cerco mediático, político y cultural al que nos somete la hegemonía neoliberal».
Además, el autor del libro «Construir socialismo en el siglo XXI. Alternativa a la dictadura del capital» ha resumido los cuatro grandes objetivos de la Convocatoria Social impulsada por IU: Poner la economía al servicio del ser humano («actualmente es una marioneta en manos de los mercados»); potenciar la democracia participativa, frente al voto cada cuatro años como único compromiso político; el entendimiento de la cultura como factor de transformación social; y la defensa de la paz en oposición a la guerra como instrumento de rapiña de los recursos naturales.
Centella ha reivindicado, por último, el papel de la política y de la participación como elementos esenciales de la democracia. Son principios que se están poniendo en cuestión en una coyuntura, como la actual, de «lucha de clases sin matices». «Esto no es nuevo, no hemos de ser ingenuos, pero los denominados mercados están quitándose la careta y son los principales interesados en que la gente rechace la política»; «no hay más que ver cómo en Grecia, Portugal y los países de la periferia europea determinan la actuación de los parlamentos», ha concluido el secretario de Acción Política de IU.
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