La ciudad es apodada «el infierno en la tierra». Miseria, contaminación, baja esperanza de vida y mucha pobreza.
Quizá resulte desconocida para muchos, pero se trata de la segunda ciudad en importancia y cantidad de habitantes de Bangladesh . Con sus 6,5 millones de habitantes (4 millones de ellos fijos), Chittagong cuenta el puerto marítimo más grande del país, pero sobre todo, es el destino elegido por las grandes potencias mundiales para una sola tarea: el desmantelamiento de grandes embarcaciones. Y es ahí, donde justamente radica su miseria.
Un dato no menor, es que esta ciudad está en cercanías de la mayor playa natural del mundo, el Bazar de Cox , con 120 kilómetros de longitud, aunque cuando usted siga leyendo, se dará cuenta que poco tienen de paradisíaco.
Operario de Chittagong
La clave de esta ciudad está en su puerto, popularmente conocido por ser un «cementerio de embarcaciones». Allí miles de trabajadores desguazan pieza por pieza de los grandes barcos, petroleros muchos de ellos, hasta reducirlos a chatarra, que luego es revendida.
Por supuesto, el gran problema de todo esto, son las condiciones inexistentes de seguridad en el trabajo, y además el tener que convivir con materiales muy tóxicos, como amianto, plomo, cadmio, por sólo citar algunos, la mayoría cancerígenos y destructivos para la salud.
Las playas de Chittagong
Los trabajadores de los desguaces respiran sin protección finísimas fibras de amianto, a la vez que les producen cáncer y enfermedades respiratorias. Al puerto de Chittagong también se le conoce por ser el lugar concentrado más contaminado del mundo.
Un trabajador del desguace, en promedio trabaja 14 horas por día, ganando en promedio 1 dólar por jornada. Mientras que el Gobierno de Bangladesh factura unos 1500 millones de dólares anuales gracias a esta industria. La mayoría de los clientes son provenientes de Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Gran Bretaña, Canadá y Australia.
Vivir en Chittagong
En el proceso de desmantelamiento de los gigantes del mar, cada uno de estos monstruos puede «soltar» hasta unas 100 toneladas de elementos altamente tóxicos. Casi todo va a parar al mar, las playas, y por supuesto los operarios de desmantelamiento.
Los operarios ganan 1 dólar por día
Se estima que trabajan en estas playas, unos 150 mil operarios, que realizan su tareas en las peores condiciones jamás imaginadas. Descalzos, sin protección de ningún tipo, y casi siempre usando la fuerza de sus músculos como herramienta.
No hay registros serios por parte del Gobierno de Bangladesh, pero hay accidentes todos los días, y también muertes.
La expectativa de vida de los trabajadores directos del desguace es de 40 años promedio, bajísima.
Vista aérea de un sector del «desguace»