Hablamos con Ramón, Angela y Josep del Comitè de Suport a Lola (Comité de Apoyo a Lola), Dolores López Resina, que lleva 31 años acumulados en prisión a sus 73 años. El trabajo del comité es dar a conocer su situación, ahora encarcelada en Zaballa, Iruña Oka (Araba) y, a la vez, reclamar su liberación.
Los tres representantes de Granollers explican a Sare Antifaxista su situación. “Lola es una luchadora. Toda la vida ha estado luchando. Lleva más de la mitad de su vida en la lucha, en la cárcel, en la clandestinidad” y añaden que “ella se considera presa política catalana y combatiente vasca”. Recuerdan su trayectoria de lucha y las torturas que sufrió durante su vida activa combatiente, pero sigue firme: “no renuncia a sus principios políticos por la independencia, por la libertad de los pueblos”.
¿Quien es Lola, Dolores López Resina?
Lola es una luchadora. Toda la vida ha estado luchando. Lleva más de la mitad de su vida en la lucha, en la cárcel, en la clandestinidad. Prácticamente no ha tenido una vida normal. En los años de la Transición estuvo militando en la lucha social, en la zona nuestra, en Granollers. Padeció la represión y tuvo un primer período de cárcel por la lucha social.
Luego viendo que el tema de la lucha social y de la transición se había más o menos apagado o no tenía una salida en aquel momento, la única lucha que estaba fuerte era la lucha de liberación de Euskal Herria en la cárcel de Yeserías (Madrid) conoció a presas de ETA y por solidaridad internacionalista y de lucha se pasó a la lucha contra lo que representaba el franquismo en aquel momento.
Nació en Almería, pero vino a Granollers de pequeñita con sus padres. Ella se considera presa política catalana y combatiente vasca. Estuvo detenida en 1980 en plena democracia, en Vía Laietana –en el número 43, se encontraba la comisaría, famosa por ser uno de los principales centros de tortura durante el franquismo, pero también en décadas posteriores– estuvo incomunicada 12 días, y fue torturada salvajemente. La condenaron a 13 años de cárcel que cumplió hasta 1988, que salió en libertad. Estuvo en Yeserías, Trinitat y Carabanchel. En tres cárceles durante esos ocho años.
Hizo campaña por HB en el 1988 para las elecciones europeas. Militó a cara descubierta por así decirlo, poco tiempo. A partir de los años 90-99 entró en clandestinidad y ya no la vimos más. Aquellos años son años de gran represión en Catalunya contra los militantes de Terra Lliure, la famosa ‘Operación Garzón’. Lola se va refugiada al Estado francés, tras el asesinato en Granollers de Juan Carlos Monteagudo y Juan Felix Erezuma. El 23 de septiembre de 2001 es detenida en la población francesa de Dax. Y es cuando volvimos a saber de ella. Está en la cárcel desde entonces ininterrumpidamente.
En Francia, sobre todo, cumplió la condena en Rennes (en Bretaña) a 1200 km de casa, pero también pasó por ‘La Santé’, Fleury y Fresnes. Unos cuantos conocidos íbamos a verle a Fresnes. En el 2007 le llevaron deportada al Estado español para ser juzgada por causas pendientes. En 2018 la extraditaron, la trajeron a cumplir la condena del Estado español. Estuvo en Soto, 3 meses, en primer grado en condiciones inhumanas, luego le trasladaron a Brieva, y pasó a segundo grado y en régimen de respeto cuando la llevaron a Logroño, después de la pandemia, a raíz de los acuerdos PSOE y Bildu, y esas cosas. En marzo de 2023 la trasladaron a la cárcel de Zaballa (Iruña Oka), hace un año, con el colectivo, con las compañeras.
¿Hasta cuándo tiene que estar en prisión?
En principio, tiene cárcel hasta el 2046. Lo digo porque la Justicia española no reconoce, aunque son condenas similares, el tiempo que ha pasado en Francia y le exige que cumpla aquí. Por ejemplo, para el tercer grado necesita tres cuartas partes de la condena cumplida. Lo digo porque hasta el año 2046 tiene que estar en la cárcel. Cuando tendría casi 100 años.
Sí, tendría 95 años. Lola el 20 de febrero ha cumplido 73 años. Es la presa política del Estado español con más edad.
Es la presa política que más años lleva en Estado español. Es una persona que siempre ha sido muy fuerte. No sólo que se ha pasado casi toda su vida en la clandestinidad o luchando, etc, sino cuando tu ibas a visitarla a Rennes, a Brieva, a Zaballa… nunca le hemos visto desanimada, siempre luchando y ella te transmite ánimos a ti. Una persona muy fuerte, luchadora y concienciada políticamente. No renuncia a sus principios políticos por la independencia, por la libertad de los pueblos…
Un argumento que nos gusta explicar, porque es muy visual, es que cuando entró en Zaballa en la cárcel, un compañero preso que la fue a ver le dijo ‘hostia Lola no me reconoces. Lo mira y le dice que no. Y le explica que él iba a la cárcel de Yeserías a ver a su ama, tenía ocho años. Es para decir que Lola ha estado en la cárcel con la generación de los años 80, cuando estaba la ama de ese compañero, y está en la cárcel con la generaciones del 2000, 2010 y 2020. Es muy visual la situación entre muros lo que está viviendo esta mujer. Esta compañera.
¿Qué pretendéis con el Comité de Suport a Lola?
Que salga, que salga.
Nacimos como apoyo a ella desde el 2004-05. Como apoyo de personas, vecinos, amigos…Hemos ido a visitarle hasta 12 personas a Rennes, antes a Fresnes… y cuando la trajeron al Estado español vimos la necesidad de organizarnos más como comité y llevar a Lola a la calle y lo que representa.
Nuestro objetivo es pedir su libertad.
La mayor parte de nuestra perspectiva es enfocarlo desde un punto de vista humanitario para conseguir el máximo apoyo. En este sentido, es una presa que lleva un porrón de años de cárcel. Es la mujer presa política con más años en la cárcel en el Estado español y Francia. Se le condenó porque pertenecía a una organización, que hace años ya no existe y dejó las armas, etc. Y, en cambio, podemos decir que se puede hablar más de venganza que de justicia. Le tocaría que se le reconocieran los años encarcelada en Francia.
¿El Estado español es vengativo?
En ese aspecto diríamos que sí. Una persona que tiene esta edad, que sabes que no va a continuar porque no tiene organización, aunque ella se sigue considerada de un colectivo, pero no hacen acciones, le tocaría, incluso legalmente si le reconocen los años de cárcel de Francia. Tendría que estar en la calle.
¿Por qué no lo reconocen?
Porque al Estado español no le interesa gente que no claudica y dobla la rodilla.
Lo que tenemos claro son nuestros objetivos: pedir su libertad, dar a conocer su situación a todo el pueblo y darle voz en todos los actos que hacemos por Catalunya. Actos políticos, sociales, etc en el Primero de mayo, en el 8 Marzo, en los homenajes a Txiki, a Gustau, en actos antirrepresivos en la Diada de Catalunya. Lo que hacemos es grabar audios, y ponemos su voz en la calle. El 8 de marzo pasado su mensaje se dirigió a las mujeres trabajadoras, pero también pensando en las mujeres palestinas que sufren el genocidio. La situación de Palestina le ha afectado fuertemente a Lola. Es muy sensible a lo que está pasando en Palestina, que es muy grave.
Ella había participado mucho en cuestiones como apoyo al Frente Polisario, a los Kurdos, a la lucha de liberación de los pueblos del mundo.
En 2019 hicimos una campaña vecinal de firmas, también en Euskal Herria. Teníamos claro que con las firmas no la sacaríamos, pero era una manera de dar notoriedad al caso de Lola que mucha gente la conoce, pero no sabe que está en la cárcel.
¿Cuántas recogisteis?
Unas 1.500 firmas. No muchas. Somos un comité pequeño. Nos permitió que mucha gente supiera de su situación, que le empezaran a escribirle. Cartas le llegan de mucha gente que no la conocen, pero se solidarizan con ella. Y que la gente sabe ya lo que ocurre, y ven que es muy injusta su situación. Es una barbaridad lo que está viviendo.
Con el comité explicamos en Catalunya porqué se defiende a una presa que es de ETA. El trabajo aquí es duro, pero con las firmas y en la presentación de eventos hemos conseguido una difusión de su situación. Hemos llegado a mucha gente. La represión que ha habido contra el Procès también se ha incorporado en nuestra denuncia.
Hemos intentado presentar las firmas a las instancias oficiales como el Ayuntamiento de Granollers; en el Parlament y a diversos parlamentarios. De ERC y CUP, Montserrat Vinyets y Adrià Guevara, nos han recibido, hemos hablado, se ha hablado de su situación. La difusión ha sido grande en Catalunya y algunos sectores de Madrid, pero, sobre todo, en Catalunya ha sido muy amplia.
En el Parlament nos llamaron ellos, es lo curioso. No solicitamos. En cambio, en el Ayuntamiento de Granollers se entregaron las firmas, pero no nos han llamado, ni nos llamarán para recogerlas. La idea es presentar una moción para, si los grupos están de acuerdo, pedir la libertad de la Lola.
¿En el Parlament han hecho algo, aparte de llamaros y reunirse con vosotros?
No. Anotaron su situación y entonces les pedimos que sus partidos ERC y CUP y otros partidos independentistas intenten implicarse en instancias que afectan a la Lola y que pidan la libertad como ciudadana catalana, de Granollers.
¿Han hecho algo de eso?
De momento, no han hecho nada, pero ahora tampoco el Parlamento está a tope, porque tenemos elecciones catalanas en mayo. Suponemos que pasado el verano continuaremos con nuestra petición.
En Zaballa, ¿qué tal está ella?
Está en segundo grado, en módulo de respeto y con otras compañeras. Está bien. Hace cerámica tres días a la semana durante una hora. Hace pendientes, y otros objetos que aprovechamos. Cuando repartimos octavillas los ofrecemos a la gente que se interesa y, si quieren, ayudan a la caja de resistencia. Es una forma de ayudarnos.
Hace yoga. Está estudiando euskera y ha descubierto a nivel cultural las obras de teatro, cantantes, cosas que en toda su vida de militancia no ha conocido. Entre la vida en la cárcel y la vida en clandestinidad, eso no lo ha vivido. Cuando ve una obra de teatro, para ella es lo más. Está bien dentro de lo que es una cárcel. Es la mejor cárcel en la que ha estado.
¿Con el resto de presas se lleva bien?
Bien, forma parte del colectivo [de presos políticos vascos, EPPK, en euskera].
¿Tiene alguna esperanza de que va a salir a la calle antes de ese 2046?
No sabemos si le ofrecerán algún día el tercer grado. Se lo dijeron, ella firmó y se lo denegaron, hace un tiempo. No firmó como otros. Se lo denegaron porque llevaba pocos años de cárcel aquí, en Estado español lleva desde el 2018. Solo lleva seis años en la cárcel aquí, así que no toca. Hasta que cumpla las tres cuartas partes que sería en en 2036.
Lo tiene crudo. Ella tiene los principios muy claros y no quiere bajar de los mismos. Mantenerse en lo que ella piensa y, por lo tanto, no espera mucho de lo que le puedan dar.
¿Qué pensáis de la amnistía que se reclama en Catalunya?
Esta amnistía no toca para los presos vascos. Somos del comité de apoyo a Lola. Van a quedar miles de represaliados sin acceder.
A algunos ya les están metiendo en la cárcel. Estuvimos recientemente en un acto de apoyo a unas personas que les van a meter, y la amnistía no les pilla para nada. Y están adelantando juicios para que no puedan acogerse a la amnistía.
Tenemos el ‘caso Judas’ –en Sare Antifaxista en varias ocasiones hemos entrevistado a David Budria, uno de los encausados: https://sareantifaxista.blogspot.com/2023/10/david-budria-represaliado-catalan-lo.html–. Tienen que ir a la Audiencia Nacional. La amnistia pilla a los políticos.
Existe cantidad de gente que quizás no llegará a entrar nunca a la cárcel, no se les acusa de grandes cosas, pero hasta el momento les han puteado a ellos y a la familia. Les han represaliado, tienen antecedentes, multas, que tendrán o no que pagar. Y de estos hay muchos.
La estrategia es meter miedo para que nadie salga a la calle a reivindicar, mientras que los ‘popes’ (los dirigentes) quedarán limpios y maquillados para presentarse a las elecciones.
La reivindicación de la amnistía en Euskal Herria solo lo hace ya un colectivo muy pequeño.
Aquí el movimiento antirrepresivo también utiliza la palabra amnistía. Y mucha. Es otra amnistía, no es esta de que se habla. Nosotros ponemos esa pancarta roja que pone amnistía. Debe incluir a otros presos como Pablo Hasèl, a otros que han sido recientemente encarcelados, o a emigrantes que se ven acosados injustamente por no se sabe qué, etc. Aquí ha habido represión de todo tipo. Siempre ha habido represión.
Si la amnistía recogiera a Pablo Hasèl, al ‘caso Judas’ y a otros tantos que hay diríamos ‘bravo habéis hecho una buena jugada’. Ójala acoja a más, pero tenemos muchas dudas sobre esto. Todo este tema lo decimos a título particular, porque como comité somos gente muy diversa y de ideología muy diversa. Los amigos de Lola son muy diversos, incluso en Euskal Herria. En Durango tiene su acogida y apoyo. Lo que nos duele es la Lola.
¿Qué actos próximos vais a realizar?
En el Primero de Mayo estaremos repartiendo hojas, con la pancarta, con lo que haga falta. Depende de la manifestación en Barcelona.
Nosotros vamos allá donde nos llaman. Por ejemplo, si hay un colectivo de Ripoll que nos dice que tenemos un acto antirrepresivo, allí vamos.
Hay que ir con ideas nuevas, para que la gente se sume a la iniciativa, porque poco a poco la gente ya conoce lo que hacemos en el comité de apoyo.
Una cosa que se nos ha olvidado y es importante. Aquí fue torturada. Hay una Comisión por la Dignidad de Vía Laietana, formada por las personas que pasaron por sus instalaciones y fueron torturadas desde los años 40 aunque que no se dejó de torturar hasta el año 2020, y cada martes la Comisión por la Dignidad está allí en Vía Laietana denunciando casos de torturas, leyendo testimonios y llamando por su nombre a los torturadores. Le pedimos a Lola si quería ofrecer su testimonio sobre las torturas que sufrió en 1980, y lo hizo. En junio, en 2023, con Marina Bernadó i Bonada, otra ex presa política, se leyó. Allí salen muchas torturas a muchos compañeros y compañeras.
Fuente: https://sareantifaxista.blogspot.com/2024/04/comite-de-suport-lola-con-73-anos.html