La Asamblea Popular de Moratalaz ha convocado una concentración el viernes 10 de febrero a las 12.30 p.m. en la puerta de los Juzgados de Plaza de Castilla en solidaridad con una vecina del barrio denunciada por la Policía Nacional por pararse delante de una redada racista. Es la segunda convocatoria de estas características que […]
La Asamblea Popular de Moratalaz ha convocado una concentración el viernes 10 de febrero a las 12.30 p.m. en la puerta de los Juzgados de Plaza de Castilla en solidaridad con una vecina del barrio denunciada por la Policía Nacional por pararse delante de una redada racista.
Es la segunda convocatoria de estas características que se produce en Madrid en menos de 15 días, puesto que el pasado día 31 de enero la CNT ya convocó una concentración semejante frente a los mismos Juzgados para solidarizarse con un compañero del Sindicato de Artes Gráficas de la Federación Local de Madrid denunciado en circunstancias muy parecidas.
Desde hace unas semanas, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, con la connivencia de las autoridades judiciales, han intensificado esta estrategia represiva con la intención de acallar las voces que cada vez más frecuentemente se alzan en plena calle contra las redadas y controles por perfil étnico que la Policía Nacional y Municipal realiza a diario en las estaciones de metro, los intercambiadores, las calles y las plazas de Madrid. Esa estrategia es muy sencilla: identifican a cualquier persona que se pare, aunque sólo sea a mirar lo que la Policía está haciendo, posteriormente la denuncian, y al cabo de un par de meses la someten a un juicio por una supuesta falta de desobediencia a la autoridad.
Este tipo de prácticas intimidatorias, que ya habían sufrido desde hace meses colectivos como Brigadas Vecinales de Observación de Derechos Humanos, se están extendiendo de forma flagrante y, desde diversos colectivos del 15-M, asambleas barriales y organizaciones sindicales como CNT, se está haciendo el esfuerzo por denunciarlas públicamente.
En el caso de la concentración del próximo viernes, el objetivo es mostrar solidaridad y apoyo a Hortensia, una compañera de la Asamblea Popular de Moratalaz y del sindicato de Enseñanza e Intervención Social de la CNT de Madrid, que se enfrenta a un juicio de faltas en el Juzgado de Instrucción nº 52 a las 12.45. Se le acusa de desobediencia a la autoridad, por los siguientes hechos que ella misma relata en el blog de la asamblea popular de su barrio:
El 10 de noviembre en el metro de Pavones vi a 4 policías rodeando a un hombre de aspecto sudamericano, el hombre estaba pacíficamente sacando [sus] papeles y temblando como una hoja al viento. Me quedé observando y me pareció muy intimidatorio tanto policía rodeándole con actitud prepotente. Me acerqué y le pregunté al hombre qué le pasaba. No me enteré de la respuesta porque la policía me dijo que circulara. Entonces yo pregunté por qué le habían parado. Ellos se llevaron al hombre, quedó un policía rezagado y le dije que me parecía excesivo 4 policías, que sólo los pobres tenemos tanto control, que ser migrante no es un delito, que ahora nuestros jóvenes también están emigrando. Que las cámaras y los controles están haciendo falta en donde se mueve el dinero y el poder, no en el metro. El policía me dijo que era su trabajo y yo le dije que si ese es su trabajo hace falta tener tripas. Me pidió el carnet y me dijo que me llegaría a casa una denuncia. Le pedí el número de placa y no me hizo ni caso. No me arrepiento de lo que he hecho. Aunque tenga que pagar la multa volveré a hacerlo. Me fui con mucha rabia y cada vez que me acuerdo me pongo furiosa.
Los organizadores esperan contar con el mayor número de personas posible arropando a su compañera. En esta ocasión, la concentración ha sido legalizada por los miembros del Grupo de Migraciones de la Asamblea Popular de Moratalaz.