De Juana es un rehén, técnicamente un secuestrado, por decisión política del gobierno y de los tribunales políticos españolas (Audiencia Nazional, sucesora del Tribunal de Orden Público de Franco). El gobierno dio la orden, los fiscales se inventaron el delito y los jueces obedecieron., como han reconocido en privado, ante críticas recibidas también en privado. […]
De Juana es un rehén, técnicamente un secuestrado, por decisión política del gobierno y de los tribunales políticos españolas (Audiencia Nazional, sucesora del Tribunal de Orden Público de Franco).
El gobierno dio la orden, los fiscales se inventaron el delito y los jueces obedecieron., como han reconocido en privado, ante críticas recibidas también en privado.
Nos decían los fachas, que De Juana vivía a cuerpo de rey, con una planta del hospital «para él solito»…
Gracias, como en época de Franco, a la prensa extranjera (británica en este caso) hemos sabido y visto algo de la verdad. Hemos visto un cuerpo que no sólo no es «de rey», sino que en nada se parece al rollizo y subido de alcohol de su majestad de España.
Los presos de ETA entran en luchas más bien simbólicas, ya que, encerrados en más de ochenta cárceles, pueden matarlos a palos y ni siquiera habrá un periodista inglés que lo cuente. Los españoles…, je, je,…
Una lástima tanto sacrificio y riesgo. Sobre todo si uno se hace una molestísima pregunta, molestísima para todos: ¿Por qué ETA no está interesada en el crecimiento del movimiento independentista vasco, hasta el extremo de que lo boicotea con sus acciones provocadoras, a favor del nazionalismo español?
Posible respuesta, dados los hechos: porque tal crecimiento depende, en esta coyuntura, justamente, de su descalificación. Sólo la descalificación de ETA como cómplice del nazionalismo español, puede derribar las barreras de contención que impiden el crecimiento cuantitativo y cualitativo del independentismo vasco.
Todo lo cual, nos llevaría a otra pregunta:
¿Quiénes, en la dirección de ETA y Batasuna, desde exactamente 1987 (atentado de Hipercor que liquidó de un oportunísimo y sangriento plumazo -27 trabajadores muertos- la influencia abertzale en Cataluña), constituyen el grupo objetivamente (¿subjetivamente también?) provocador-españolista, incrustado en su dirección, cada una de cuyas decisiones, cada una de cuyas acciones redunda en detrimento del fortalecimiento del movimiento independentista vasco y constituye un desprestigio y una bunkerización del mismo?
Recordemos, así por puro ejercicio de memoria, que antes de Hipercor, en las elecciones europeas, la entonces Herri Batasuna consiguió unos 44.000 votos en Cataluña, suficiente para tener un diputado en el Parlament. Tras Hipercor, por cierto a apenas tres semanas de unas nuevas elecciones europeas, su apoyo quedó reducido a 4.000.
Toda una pequeña obra maestra de inspiración gubernamental-españolista para dar el primer gran paso hacia el aislamiento del independentismo vasco, empezando por la comunidad autónoma donde más simpatías tenía. Desde entonces, en multitud de ocasiones parecidas (atentado en Vallecas, Miguel Ángel Blanco, y un largo etcétera provocador), se dice que, en susurrada voz y en emocionado boca a boca, en las filas del más acendrado nazional-españolismo se oye una admonición: «gracias ETA». ¡La de votos que ganó el PP en España, en Cataluña y en Euskadi al calor de la pólvora! Con lo de Barajas, hemos oído de nuevo el susurro ¿Hasta cuándo se seguirá oyendo ese susurro? Yo lo sigo oyendo.
Si fuese un preso de ETA arriesgando la vida por reconducir la negociación me sentiría sumamente mosqueado.
PD: Que se concreten propuestas
A. Otegi, de la ilegalmente ilegalizada Batasuna – con leyes a capricho ilegalizo yo al rey, cuya ilegitimidad como cómplice de Franco y sus desmanes aun no se ha saldado – Otegi, digo, ha hecho una oferta razonable, al margen de que quien escribe pueda o no estar de acuerdo con ella. Crear una nueva autonomía en el seno del Estado español, conjuntando el País Vasco y Navarra y eso siempre que se cuente con la aceptación mayoritaria de la población de ambas autonomías. Me parece mucho más democrático que la situación actual, que jamás fue aceptada en las urnas por el pueblo vasco.
Un amigo donostiarra me dice: «Ahora esperaremos a ver cómo ETA dinamita la propuesta».
Los hay pesimistas.
La propuesta del PP-AVT también es conocida: quieren vencedores y vencidos (además de subvenciones a manos llenas). Eso ya lo consiguió Franco y así estamos.
¿Y la propuesta del PSOE? Misterio . Sólo recuerdo la de Felipe González : el GAL.