El Ayuntamiento de Madrid quiere establecer más control policial en uno de los barrios más rebeldes y mestizos de la capital: Lavapiés. El coordinador general de Seguridad y Emergencias del consistorio madrileño, Jesús Mora, ha anunciado que el año que viene se instalarán cámaras de vigilancia en un barrio «con una importante población inmigrante, elementos […]
El Ayuntamiento de Madrid quiere establecer más control policial en uno de los barrios más rebeldes y mestizos de la capital: Lavapiés.
El coordinador general de Seguridad y Emergencias del consistorio madrileño, Jesús Mora, ha anunciado que el año que viene se instalarán cámaras de vigilancia en un barrio «con una importante población inmigrante, elementos antisistema y con algunos miembros cercanos en algunos aspectos a radicalismos religiosos».
Estas cámaras de vigilancia se unirán a las puestas en marcha recientemente en Montera, Gran Vía y en el triángulo de Ballesta, así como las existentes previamente en el entorno de la Plaza Mayor.
Mora ha matizado que la mayor parte de incidentes se producen en la tarde y en la noche, por lo que ahora existen más agentes destinados en estos turnos.
Percepción de seguridad
El coordinador general de Seguridad municipal destacó la importancia de la seguridad subjetiva entre la población y que en ésta también deben intervenir otras factores como los servicios sociales, educación o vivienda.
«Aunque haya buenas cifras estadísticas, si el ciudadano no tiene percepción de seguridad, no sale a la calle y ésta es ocupada por otro tipo de personas. Por eso es importante la integración de los jóvenes y de la inmigración para evitar roces culturales y problemas de convivencia, con una relación constante entre los agentes y los madrileños, porque son los que mejor conocen los problemas», dijo.