El Colectivo de Presos y Presas Políticas Vascas (EPPK) ha trasladado al Foro Social en un mensaje en vídeo en euskara que está dispuesto a una hoja de ruta común «para vaciar las cárceles». «Ha llegado la hora», subraya, recordando que está inmerso en un debate interno con ese horizonte y remarcando que el epicentro […]
El Colectivo de Presos y Presas Políticas Vascas (EPPK) ha trasladado al Foro Social en un mensaje en vídeo en euskara que está dispuesto a una hoja de ruta común «para vaciar las cárceles». «Ha llegado la hora», subraya, recordando que está inmerso en un debate interno con ese horizonte y remarcando que el epicentro de ese acuerdo debe ser la sociedad vasca.
El Foro Social de Donostia ha comenzado apostando por una triangulación entre instituciones, sociedad civil y agentes relacionados con personas presas y huidas para buscar una solución a partir de una hoja de ruta común. Y en la misma sesión se ha constatado la disposición de EPPK a construirla, adelantada ya en sus últimos mensajes. «Ha llegado la hora de concretar una hoja de ruta para vaciar las cárceles, cada uno haciendo aportaciones constructivas desde su espacio particular», dice el mensaje emitido en el IV Foro Social.
Asume el Colectivo que esos acuerdos deben ser «transversales e inclusivos» y que «el sujeto principal tiene que ser la ciudadanía vasca. Ha llegado la hora de poner un cierre firme, estable y aceptado por todos al anterior ciclo político. Tenemos que hacer lo posible y lo imposible para ofrecer a nuestros hijos e hijas una Euskal Herria en paz, reconciliada y justa. Y hay que crear el camino para todo eso, porque es el futuro de Euskal Herria lo que está en juego».
En consecuencia, EPPK subraya su «disposición» a hacer ese camino con la ciudadanía, los partidos, los sindicatos, los agentes sociales y las instituciones: «Construir la paz y la convivencia en nuestro pueblo es tarea de todos. Y para que ese proceso sea firme, creíble y permanente, necesitamos una Euskal Herria sin presos y presas», señala.
En la primera parte de su mensaje, el Colectivo recuerda la declaración de diciembre de 2013 y lamenta que «su potencialidad quedara debilitada» por los ataques represivos, dado que establecía una posición (apuesta por afrontar las vías legales) que debía desarrollarse con la compañía de la sociedad vasca. Considera que ahora se han abierto nuevas condiciones para seguir desplegándola, y ubica aquí el debate interno que está desarrollando.