- Un nuevo informe del Centro Delàs de Estudios por la Paz desvela que, en lo esencial, las relaciones militares con Israel se han mantenido tal y como venían siendo antes del 7 de octubre de 2023, identificando tanto exportaciones como importaciones posteriores a esa fecha.
- Desde octubre de 2023, se han adjudicado contratos públicos para equipar a las fuerzas armadas a empresas de seguridad y defensa israelíes o sus filiales en España por valor de 1.027 millones de euros.
- Entre enero de 2022 y junio de 2023 España exportó armas a 109 países, por valor de 5.845 millones €, de los cuales 1.282 millones fueron a Oriente Medio.
- El informe recomienda una modificación de la normativa española de control del comercio de armamentos (Ley 53/2007) para incluir expresamente la posibilidad de que se acuerde un embargo de armas a un determinado país (tanto para exportaciones como para importaciones).
A
pesar de la extrema gravedad de la actuación de Israel en la Franja de
Gaza, las relaciones militares entre España e Israel no se han alterado
de manera sustancial a partir del 7 de octubre. Estas relaciones no se
limitan a las importaciones y a las exportaciones de material de defensa
entre ambos países, sino que se desarrollan en los siguientes ámbitos:
1) Exportaciones; el material de defensa exportado a Israel desde
España; 2) importaciones; el material de defensa importado por España
desde Israel; 3) la adjudicación a empresas israelíes de contratos de
productos y servicios para las fuerzas armadas o los cuerpos de
seguridad en España; 4) la colaboración empresarial entre empresas
españolas e israelíes para acceder a terceros mercados; 5) la
colaboración entre universidades, empresas e instituciones en proyectos
de investigación y formación; 6) la colaboración bilateral entre los dos
países en materia de inteligencia y seguridad, y en un marco más amplio
de la UE y la OTAN.
En noviembre de 2023 se exportaron desde España 987.000 euros en
municiones a Israel. Lo hizo Nammo Palencia, la filial de la
multinacional noruego-finlandesa Nammo, y las municiones son para la
empresa Elbit Systems, una de las principales proveedoras del Ejército
israelí. En diciembre se exportaron más municiones/proyectiles, aunque
en este caso con la finalidad de ser reexportadas a Filipinas. España
también ha exportado a Israel material relacionado con vehículos
blindados en octubre, noviembre, enero y febrero, en estos últimos dos
meses también en relación con reexportaciones a Filipinas.
Las importaciones, por su parte, no se han suspendido, tal y como
reconoció en febrero la Secretaría de Estado de Comercio, y es que España no ha dejado de adquirir armamento israelí, como venía haciendo antes del 7 de octubre, concediendo desde entonces a empresas israelíes y sus filiales en España contratos valorados en 1.027 millones de euros, entre
los que destacan el sistema de lanzacohetes SILAM (consorcio con Elbit)
o los misiles SPIKE (PAP Tecnos, filial de Rafael), ambos publicitados
como “probados en combate”.
Las exportaciones de Nammo desmienten las declaraciones del ministro Albares de diciembre y enero que negaban que se estuvieran produciendo ventas de armamento a Israel. Tanto las exportaciones como las importaciones identificadas desmienten asimismo al Presidente Sánchez,
quien en abril respondía a una interpelación del portavoz de ERC en el
Congreso, Gabriel Rufián, diciendo: “Quédese tranquilo, que desde el 7
de octubre España no desarrolla ninguna operación de compraventa de
armas con Israel, ninguna”.
El investigador del Centre Delàs d’Estudis per la Pau y coautor del informe, Alejandro Pozo, alerta: “Es
difícil saber qué es lo que ha exportado España, pero lo que hemos
podido encontrar e identificar es muy preocupante. El Gobierno debería
ser transparente y detallar las exportaciones que ha realizado España
desde el 7 de octubre de 2023”.
Por todo ello, desde el Centre Delàs y la campaña Fin al Comercio de Armas con Israel, demandan:
- La modificación de la normativa española de control del comercio de armamentos (Ley 53/2007) para incluir expresamente la posibilidad de que se acuerde un embargo de armas a un determinado país (tanto para exportaciones como importaciones).
- La revocación de todas las autorizaciones vigentes de material de defensa y doble uso cuyo destino u origen sea el Estado de Israel.
- Una mayor transparencia en el comercio de armas español en general, y con Israel en particular.
“Si
en una situación tan excepcional como la de Gaza, el Gobierno no aplica
la legislación para parar el comercio de armamento con Israel,
deberíamos preguntarnos para qué sirve esta normativa.
Hasta ahora únicamente para legitimar la política de fomento de
exportaciones de armamento del Gobierno y para dar seguridad jurídica a
las empresas exportadoras. Es evidente que la protección de los Derechos
Humanos no está en la agenda del Gobierno”, apunta Eduardo Melero, también investigador del Centre Delàs y coautor del informe.
También es prueba de esto cómo España, en un clima de conflictividad y
tensiones a nivel global, vendió entre enero de 2022 y junio de 2023
armamento a 109 países. En ese periodo se realizaron exportaciones de
armamento por valor de 5.845 millones €, entre las que destacan 1.282
millones € (el 23% del total) con destino a Oriente Medio. La
publicación señala como especialmente preocupante que en el
primer semestre de 2023 el 55% del total las autorizaciones a la
exportación de material militar español hayan tenido como destino países
de Oriente Medio, en especial Arabia Saudita (534 millones), Emiratos Árabes Unidos (321), Israel (44) y Omán (40).
El análisis que publica hoy el Centre Delàs bajo el título “Business as usual. Análisis del comercio de armas español de 2022-23 y argumentos para un embargo de armas a Israel”
alerta también de que el Gobierno aprobó en el mismo periodo 2.975
autorizaciones, mientras que únicamente denegó 2 exportaciones. Ante
ello, los autores apuntan que el escaso número de denegaciones solo
puede interpretarse como falta de voluntad política para aplicar de una
manera rigurosa la ley de control del comercio de armas.
Tica Font, también investigadora del Centre Delàs y coautora del informe, declara al respecto que “en
plena ofensiva israelí sobre Palestina, con conflictos en Yemen y
Siria, ataques a población kurda en Turquía e Irak, y teniendo en cuenta
las enormes tensiones en la región, las exportaciones de material
militar español con destino a Oriente Medio son cuestionables moral y
legalmente”.
La investigación concluye que pese a la probable ilegalidad de muchas de
estas operaciones, y su contribución a violaciones de Derechos Humanos,
la política del Gobierno para fomentar la industria militar y facilitar
al máximo las exportaciones lanza un mensaje muy claro a la industria:
no hay trabas para la venta de armas ‘Made in Spain’.