El Ejército ha puesto miles de excusas para no traer a los dos «piratas» capturados en el lío del atunero vasco Alakrana y, dado que «no considera prioritario» traerlos ante el juez, desacatará olímpicamente el requerimiento legal del juez Garzón que ordenó su puesta a disposición judicial. Con independencia de las consideraciones que a todos […]
El Ejército ha puesto miles de excusas para no traer a los dos «piratas» capturados en el lío del atunero vasco Alakrana y, dado que «no considera prioritario» traerlos ante el juez, desacatará olímpicamente el requerimiento legal del juez Garzón que ordenó su puesta a disposición judicial.
Con independencia de las consideraciones que a todos nos pueda merecer este tema de los atuneros y los piratas (acabamos no sabiendo qué hacen allí los atuneros y quiénes son los piratas, e incluso qué hace el ejército allá cuando se supone que la misión de la defensa no es precisamente garantizar el lucro privado o los intereses comerciales de nadie).
El asunto es inaudito, porque cualquier otra autoridad que le da largas a la justicia acaba siendo encausada y aquí, como siempre, el ejército es la excepción.
Llama la atención, porque también el ejército tiene un fuero propio en materia criminal, jueces propios, código penal propio y, en fin, todo un régimen de excepción heredero del franquismo que no se justifica en absoluto en un «estado de derecho». Si a ello añadimos que a la justicia se le puede desacatar porque «no se considera prioritario» cumplir sus órdenes, resultaría que hay dos instituciones al menos que son irresponsables ante los jueces: la monarquía, que goza de esta excepción constitucional (y por cierto representa como capitán general a los ejércitos) y el ejército.
Y todos los partidos y medios bienpensantes mirando para otro lado. ¡vaya tropa!
Fuente: http://utopiacontagiosa.wordpress.com/2009/10/08/el-ejercito-desacata-a-la-justicia/