La batería de recortes del Gobierno Rajoy le lleva a cambiar sus cálculos de hace solo dos semanas. El FMI considera ahora que el PIB caerá en 2013 un 1,2% frente al 0,6% estimado hasta ahora. El paro no mermará. La batería de recortes aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy tendrá un impacto «significativo» […]
La batería de recortes del Gobierno Rajoy le lleva a cambiar sus cálculos de hace solo dos semanas. El FMI considera ahora que el PIB caerá en 2013 un 1,2% frente al 0,6% estimado hasta ahora. El paro no mermará.
La batería de recortes aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy tendrá un impacto «significativo» en la economía española, según el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI). Tan significativo como que el próximo año caerá el doble de lo que la institución internacional había previsto hace apenas unas semanas. En 2013, el PIB decrecerá un 1,2%, frente al 0,6% estimado hasta ahora, y siete décimas más de lo anunciado por el propio Ejecutivo la semana pasada. Las perspectivas también empeoran para el presente ejercicio, con una caída estimada del 1,7%, frente al 1,5% del anterior informe.
El escenario presentado ayer por el organismo que preside Christine Lagarde en su Artículo IV sobre el Estado español prevé asimismo un incremento del desempleo como consecuencia de los ajustes que siguen, precisamente, las recomendaciones del FMI. Además, el incremento del IVA, combinado con los aumentos en los precios de la electricidad, generará tasas de inflación más elevadas.
Todo ello sitúa al Estado español ante un panorama muy complicado para los próximos años, toda vez que la tasa de paro se sitúa ya en un histórico 24,63%, según los datos de la última Encuesta de Población Activa, difundidos ayer (información detallada al respecto en la página 25). Sin embargo, el jefe de la misión del FMI en el Estado español, James Daniel, declaró que el Gabinete de Mariano Rajoy ha llevado a cabo «cambios muy positivos» en su política económica, y consideró necesario un papel «proactivo» por parte de la Unión Europea.
A juicio del Fondo, la economía española no volverá a crecer hasta dentro de dos años, con un repunte del 0,9% en 2014 y del 1,7% al año siguiente. En cualquier caso, a la vista de lo ocurrido respecto a sus últimas previsiones está por ver si esta estimación es corroborada en próximos informes.
El paro, por su parte, no bajará del 24% hasta 2015, y seguirá por encima del 20% incluso dentro de cinco años.
Lejos de los objetivos de déficit
Las últimas medidas adoptadas por el Gobierno tienen como objetivo declarado alcanzar los límites de déficit fijados por Bruselas. Sin embargo, el déficit no alcanzará el 3% acordado hasta 2016. Así, según el informe del FMI, la economía española cerrará este año con un déficit público del 6,3%, para acabar 2013 en el 4,7%, dos décimas por encima del objetivo de Madrid, y en el 3,6% en 2014, fecha en la que tendría que alcanzar el 3% de acuerdo con lo pactado con sus socios europeos. En principio ese porcentaje debía lograrse el año que viene, pero al Estado español se le concedió una prórroga de doce meses. A pesar de ello, tampoco cumplirá su objetivo.
Medidas adicionales
Más allá de las negativas consecuencias que los planes de ajuste van a tener en su economía, el FMI insta a las autoridades españolas a que adopten «medidas adicionales», sobre todo en materia de política fiscal y, concretamente, recomienda una nueva subida del IVA. Además, lanza una advertencia con la mirada puesta en las comunidades autónomas, al afirmar que «la implementación será clave y complicada, con riesgos de desvíos, especialmente por parte de las regiones».
El informe, de 81 páginas, está lleno de alabanzas a las medidas adoptadas por el PP en todos los frentes, pero que complementa con una serie de recomendaciones para seguir actuando en la misma dirección. Así, en materia laboral, el organismo internacional aplaude la reforma de Rajoy, aunque sostiene que debe ser complementada con más medidas dirigidas a los mercados de servicios y productos, y al entorno empresarial. Del mismo modo, en el ámbito financiero, el FMI se felicita por las actuaciones dirigidas a reestructurar el sector, así como por los fondos recibidos desde Europa para recapitalizar la banca, pero incide en la necesidad de seguir prestando ayuda pública a los bancos «débiles, pero viables».
Merkel y Hollande harán «todo lo que haga falta» en defensa de la eurozona
Angela Merkel y François Hollande aseguraron ayer que están decididos a hacer «todo lo que haga falta» para proteger a la zona euro. Lo hicieron a través de un comunicado conjunto en el que insistieron también en la necesidad de que todos los estados miembros y las propias instituciones de la Unión «cumplan con sus obligaciones» en materia económica. «Alemania y Francia están profundamente comprometidas con la integridad de la zona euro», apuntaron ambos mandatarios, en respuesta a la presión que está sufriendo desde hace tiempo la moneda única.
Tras una breve conversación telefónica, la canciller alemana y el presidente francés incidieron en la necesidad de que las conclusiones adoptadas en el Consejo Europeo celebrado el 28 y 29 de junio se implementen «con rapidez».
Esta declaración se produjo un día después de que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, dijera que esa institución hará «todo lo necesario» para proteger al euro. GARA
Madrid dice que perseguirá más a quien defraude tras dar una amnistía fiscal
El Gobierno español aprobó ayer un paquete de medidas sobre transparencia en los cargos públicos y endurecimento de la normativa contra el fraude a la Seguridad Social y a Hacienda. Esta última iniciativa se prevé un incremento de penas, que pasarán de la actual tipificación de uno a cinco años a una catalogación de entre dos y seis años de prisión para los casos graves, aquellos que superen los 600.000 euros de evasión o que se realicen en el marco de una «organización criminal» o mediante testaferros.
El Ejecutivo del PP presenta esta medida dos meses después de ofrecer una amnistía fiscal a todos los defraudadores, que han podido legalizar su situación pagando menos de un 10% de lo evadido.
Además, la propuesta incluye la posibilidad de que los acusados puedan eludir la acción penal si devuelven lo estafado durante los primeros dos meses que transcurran tras recibir la citación judicial.
Según explicó ayer Soraya Sáenz de Santamaría, se ampliará el período de prescripción desde los cinco años actuales hasta los diez. El propósito es «acabar en España con esa visión tolerante frente al que defrauda, no paga impuestos, da facturas sin IVA y encima te lo pregunta con total desparpajo», aseguró la vicepresidenta.
Otra de las medidas presentadas tras el Consejo de Ministros es la encaminada a acabar con el «fraude a la Seguridad Social». Por una parte, se perseguirá a las empresas que contraten a empleados sin regularizar su situación, así como a los EREs fraudulentos. Pero, por otra, también se advierte a quien realiza alguna labor al mismo tiempo que cobra el subsidio de desempleo.
Como viene siendo habitual, será necesario leer la letra pequeña que aparezca en el Boletín Oficial del Estado (BOE) para comprobar sobre quién se ejerce más presión: sobre las empresas o sobre los ciudadanos.
Finalmente, el Ejecutivo español también endurecerá el Código Penal para aquellos representantes públicos que falseen cuentas. Si generan perjuicios podrían ir a la cárcel.
La rueda de prensa de los viernes sirvió también para que la vicepresidenta española desmintiese tajantemente las informaciones publicadas por la agencia Reuters y que hablaban de una negociación entre el Estado español y Alemania para un rescate global tasado en 300.000 millones de euros. Según Reuters, el ministro de Economía, Luis de Guindos, habría sondeado esta posibilidad con su homólogo Wolfgang Schaüble durante la reunión que ambos mantuvieron el pasado martes. «No va a haber rescate, ni el rescate es una opción. Trabajamos para el debido cumplimiento a las medidas acordadas en el Consejo Europeo», fue la respuesta de Sáenz de Santamaría.
Sobre el encuentro, la portavoz del EJecutivo se remitió a la nota hecha pública por ambos ministros, y que sirvió para paliar, en parte, el despropósito que había ocurrido horas antes cuando Exteriores tuvo que retirar un comunicado después de que París y Roma negasen una estrategia conjunta.
La vicepresidenta negó en varias ocasiones la opción del rescate e incluso aventuró que no está entre sus planes solicitar que el Fondo de Rescate Europeo compre deuda española. A pesar de ello, tampoco quiso definir como «rescate» esta última opción.