El Frente Polisario ha denunciado que los subsaharianos fueron abandonados por las autoridades marroquíes después de haberles «maltratado ydesposeído de sus pasaportes». El Frente Polisario anunció haber encontrado a más de 80 inmigrantes subsaharianos que habían sido abandonados en el desierto del Sáhara por las autoridades marroquíes después de haberles «maltratado, desposeído de sus pasaportes, […]
El Frente Polisario ha denunciado que los subsaharianos fueron abandonados por las autoridades marroquíes después de haberles «maltratado ydesposeído de sus pasaportes».
El Frente Polisario anunció haber encontrado a más de 80 inmigrantes subsaharianos que habían sido abandonados en el desierto del Sáhara por las autoridades marroquíes después de haberles «maltratado, desposeído de sus pasaportes, dinero e incluso de sus vestimentas».
Las patrullas saharauis que operan en la zona han ido encontrando diversos grupos de hasta 16 inmigrantes en las últimas horas. En la mayoría de los casos, los subsaharianos tuvieron que realizar cuatro jornadas en autobús y dos o tres a pie por el desierto.
Según fuentes saharauis estas personas se encontraban «exaustas, sedientas, hambrientas y en una situación de completo agotamiento», la misma fuente añadió que «otros grupos, perdidos desde el último lunes, todavía no han sido encontrados».
Las autoridades saharauies indicaron que «continuarían las búsquedas a pesar de la falta de medios» y «sobre todo a pesar de que las autoridades marroquíes hubieran repartido a cientos de personas sobre varios puntos del muro de defensa [que marca los territorios ocupados por Marruecos al Sahara Occidental] de más de 2.300 km».
Para el Gobierno saharaui, «Marruecos debe ser sancionado para estas prácticas inhumanas», considerando que si no se toman medidas internacionales urgentes para realizar la búsqueda de estas personas condenadas a muerte por Rabat, salvarlas, alimentarlas y albergarlas, hasta poder repatriarlas hacia su país, circunstancias que garantizan su seguridad y su dignidad, se podrá asistir a una tragedia humana.
El ciudadano ghanés Yaco Ampoma, de 35 años, ha relatado su trayecto desde el norte de Marruecos. «Eramos alrededor de 160 inmigrantes de varias nacionalidades. Fuimos detenidos en Rabat o Nador la mayoría, encadenados como animales, reagrupados en Oujda, transferidos de comisaría en comisaría como criminales, hemos sido finalmente transportados en cuatro autobuses escoltados por gendarmes marroquíes que nos llevaron a un destino desconocido», señaló.
CEAR se desplaza a la zona
Por su parte tres equipos de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) se encuentran en las zonas fronterizas donde las autoridades marroquíes han expulsado a cientos de inmigrantes subsaharianos en los últimos días.
Un primer equipo, coordinado por la Fundación CEAR, se establecerá en Nouadhibou, frontera sur del Sáhara Occidental con Mauritania. Otros dos equipos de asistencia prestarán sus servicios en las ciudades de Guelmim, en territorio marroquí, y desde donde podrían partir hacia Smara, y en Tinduf, Argelia. En esta última ciudad, los equipos de CEAR prestarán asistencia a los cerca de ochenta inmigrantes subsaharianos que el Frente Polisario ha socorrido después de encontrarles, en condiciones deplorables, a lo largo del muro construido por el gobierno marroquí en territorio del Sahara Occidental.