Otro auténtico acto de provocación. Decenas de miles de familias en una situación económica muy complicada, millones de desempleados… pero el Gobierno comprando blindados para mandar a las tropas de ocupación. El Ministerio de Defensa que dirige Carmen Chacón comprará otros 50 blindados antiminas LMV Lince, que serán enviados a los dos escenarios internacionales con […]
Otro auténtico acto de provocación. Decenas de miles de familias en una situación económica muy complicada, millones de desempleados… pero el Gobierno comprando blindados para mandar a las tropas de ocupación.
El Ministerio de Defensa que dirige Carmen Chacón comprará otros 50 blindados antiminas LMV Lince, que serán enviados a los dos escenarios internacionales con mayor número de tropas desplegadas: Líbano y Afganistán. El coste de la adquisición rondará los 16 millones de euros.
Pese a que la medida estrella del Consejo de Ministros de este miércoles era la ansiada reforma del mercado laboral, cuyo punto fuerte todavía no ha sido aclarado, el Gobierno de Zapatero dedicó unos minutos para intentar solventar una pequeña parte de las necesidades que tiene el ministerio de Defensa y las tropas españolas en el exterior, asfixiados econonómicamente, y a los que el propio Ejecutivo ha contribuido.
Así, aprobó la compra de otros 50 vehículos blindados antiminas LMV Lince, tipo escuadra (con capacidad para cinco personas), fabricados por la empresa italiana Iveco y cuyo coste asciende a 15.786.960,64 euros. De este modo, las Fuerzas Armadas contarán con más vehículos de alta movilidad táctica, con un elevado nivel de protección balística y contraminas, con el objeto de asegurar las condiciones adecuadas de seguridad y protección en el movimiento de personal desplazado en las zonas de operaciones en el exterior. En este caso, en Líbano y Afganistán.
Los LMV Lince son todo terrenos 4×4 especialmente diseñados para aguantar la explosión de minas y IED (artefactos explosivos improvisados). Cuentan con un sistema de protección balística y antiminas certificada por la normativa STANAG de la OTAN, su cabina tiene una estructura deformable con función antiaplastamiento, los asientos tienen su propia configuración antiminas y el depósito de combustible está protegiado para evitar que se vea afectado por las deflagraciones de minas o de un IED.
Actualmente, las tropas españolas tienen desplegados 98 vehículos Lince en Afganistán, que comenzaron a ser desplegados en la zona de operaciones asiático en 2008, para comenzar a sustituir junto a los RG31 a los obsoletos BMR.