Nicaragua amaneció hoy virtualmente sin empresa distribuidora de energía, luego que la Contraloría General de la República (CGR) canceló sorpresivamente el contrato del consorcio español Unión Fenosa. La trasnacional europea no implementó las inversiones establecidas por el convenio de administración firmado en 2000 con el gobierno nacional, precisó un comunicado de la Contraloría. Además, […]
Nicaragua amaneció hoy virtualmente sin empresa distribuidora de energía, luego que la Contraloría General de la República (CGR) canceló sorpresivamente el contrato del consorcio español Unión Fenosa.
La trasnacional europea no implementó las inversiones establecidas por el convenio de administración firmado en 2000 con el gobierno nacional, precisó un comunicado de la Contraloría.
Además, criticó la CGR, es una compañía que se dedica a repartir utilidades cuando supuestamente enfrenta problemas financieros causantes de la crisis energética nacional, y en particular de la ola de apagones.
Los auditores recordaron que la firma ibérica tampoco ha cumplido con los compromisos de incrementar la cobertura del servicio gradualmente cada año, y garantizar suministro energético las 24 horas.
En Nicaragua casi la mitad de la población, de 5,5 millones de habitantes, no cuenta con abasto de energía eléctrica, sobre todo en las zonas rurales.
Aunque la concesión a Fenosa fue oficialmente revocada, aún la Procuraduría General de la República y al Instituto Nicaragüense de Energía (INE) deben pronunciarse sobre el dictamen.
Sin embargo, es conocido que el INE inició por su lado un juicio empresarial contra la defenestrada corporación, a quien acusa de varias infracciones que derivaron en cortes de energía de hasta ocho horas en Managua.
El presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, se opone a la expulsión de la sociedad española, porque su partida agravaría el déficit de electricidad nacional, consideró.
Unión Fenosa es el tercer grupo eléctrico en España, tras Endesa e Iberdrola, y tiene presencia en más de 40 países.