La Comisión Europea teme que la medida decretada el lunes, 1º de Mayo, por el presidente Evo Morales dispare aún más los precios del petróleo mientras en la Bolsa las acciones de Repsol YPF sufrían ayer caídas. Por su parte, el Gobierno español reiteró preocupación por la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia y su […]
La Comisión Europea teme que la medida decretada el lunes, 1º de Mayo, por el presidente Evo Morales dispare aún más los precios del petróleo mientras en la Bolsa las acciones de Repsol YPF sufrían ayer caídas. Por su parte, el Gobierno español reiteró preocupación por la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia y su vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, anunció ayer que se reunirá con los empresarios hispanos radicados en ese país.
Esa reunión, dijo la vicepresidenta, será convocada a lo largo de esta semana por el ministro de Industria, José Montilla, una vez que el Gobierno conozca los detalles del decreto. Según declaró, la convocatoria se realizará dentro de un espíritu de diálogo y consenso. Poco antes Montilla había dicho que el anuncio de Morales «no es una buena noticia», y que «al Gobierno de España nos preocupa por el impacto que pueda tener en las empresas españolas».
En algunos medios diplomáticos se estimaron amenazantes las declaraciones de Montilla al expresar que la nacionalización «es una mala señal para los mercados, que puede desincentivar la inversión extranjera en Bolivia» que ese país necesita. Medios de difusión españoles aseguran que la medida afecta a empresas como Repsol YPF, la británica British Petroleum y la francesa TotalFinaElf, y señalan que la comisión Europea ha lamentado que el Gobierno boliviano no le haya consultado antes de aprobar el decreto.
El presidente de Bolivia decretó el lunes la nacionalización del gas y del petróleo y ordenó a todas las empresas extranjeras en el país entregar su producción a la compañía estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos. Las compañías tendrán 180 días para regularizar sus contratos. De no hacerlo, deberán abandonar el país. Repsol YPF dijo estar dispuesta a abrir con el Gobierno boliviano un proceso de renegociación de sus contratos de explotación en el país andino.
Izquierda Unida respalda la legitimidad de la nacionalización de los hidrocarburos
Pedro Chaves, miembro de la Comisión Permanente Federal de IU y responsable de formación y de la Fundación por la Europa de los Ciudadanos respaldó la ‘legitimidad’ de la nacionalización de los hidrocarburos decretada por el presidente de Bolivia. ‘La decisión tomada se ha realizado por un poder democrático y soberano y de acuerdo a la legalidad vigente en Bolivia. Por lo tanto, no es el momento ni el lugar de cuestionar una decisión que viene avalada por el programa electoral con el que Evo Morales concurrió y ganó las elecciones en su país’, dijo.
En opinión de Chaves, el Gobierno español ‘no debería confundir los intereses generales de nuestro país con los de algunas empresas transnacionales. La cuenta de resultados de Repsol YPF no es homologable a los intereses y necesidades de nuestra sociedad. Es más, estos intereses cortoplazistas son, muy a menudo, el principal obstáculo contra la recuperación de nuestro papel de puente entre latinoamérica y Europa’.
El dirigente de IU dijo que los intereses de la formación ‘pasan mayoritariamente ahora por apoyar ese proceso político de cambio, por estar del lado de las mayorías en Bolivia que han sido olvidadas por los poderes tradicionales, y por ser respetuosos y solidarios con las decisiones del Gobierno de Evo Morales’, subrayó.
‘Conviene recordar que durante este período de tiempo las empresas transncionales han olvidado por completo su responsabilidad social y no han contribuido en absoluto al desarrollo de ese país. Se abre en consonancia un proceso esperanzador de recuperación y reparto de la riqueza que reequilibre el pasado insostenible tanto económica como ecológicamente que ha sufrido el pueblo y el territorio de Bolivia como otros tantos del centro y el Sur de América’, concluyó.
Repsol-YPF admite que hay «consternación» por la medida de Evo Morales
El presidente de la empresa Repsol -YPF, Antonio Brufau, fue la voz encargada de cuestionar duramente la nacionalización de hidrocarburos decidida por el presidente de Bolivia Evo Morales.
Brufau, señaló que la medida se tomó con «consternación» y «preocupación» al tiempo que calificó a la decisión de «injusta» con las empresas que tienen inversiones en el país. A su vez reconoció que en el plazo de 180 días, que otorgó el gobierno de Morales, para las petroleras extranjeras, la firma hispano argentina definirá si se queda o si se retira de Bolivia.
«No hubo tiempo de negociación para todas las petroleras interesadas en la instalación de hidrocarburos. Es una medida injusta con las compañías internacionales que han estado trabajando en Bolivia», señaló. «No tuvimos tiempo de discutir. La verdad es que desconozco como seguirá pero el tema trajo consternación, ya que se ha sacado (la administración de hidrocarburos) de la lógica empresarial».
Bolivia representa el 18 por ciento de las reservas de hidrocarburos de la española Repsol YPF, el 10 de su producción y menos del 3,0 de su beneficio neto, que el año pasado fue de tres mil 120 millones de euros.