Recomiendo:
0

El Islam, entre Viridiana y Gila

Fuentes: Rebelión

Hace ya años, en 1961 una película se cuela y pasa burlando a los centinelas de la censura española y gana La Palma de Oro de Cannes y más de media docena de premios internacionales. Sin embargo el escándalo que Viridiana, la película de Buñuel, creó en las mentes cristianas españolas ocasionó un cerrar filas […]

Hace ya años, en 1961 una película se cuela y pasa burlando a los centinelas de la censura española y gana La Palma de Oro de Cannes y más de media docena de premios internacionales. Sin embargo el escándalo que Viridiana, la película de Buñuel, creó en las mentes cristianas españolas ocasionó un cerrar filas en torno a defender unos «valores» de dudosa ética occidental cristiana de la misma cultura y religión europea, pero que supuso la persecución y la prohibición de la película por los defensores -fanáticos- de la legalidad de la dictadura político religiosa.

Viridiana no era ningún insulto, ni burla, ni escarnio, simplemente una crítica a un modelo de religiosidad y puede que a un fariseísmo muy al uso en aquellos años. Estaba hecha por una persona de genio y de seriedad probada y nacido en tierra de raíces cristianas y occidentales. Era en todo caso una crítica desde adentro de nuestra cultura a nuestra propia cultura, no era ningún enemigo.

Las caricaturas de Mahoma, no son ninguna crítica, simplemente ofenden a una creencia religiosa islámica al mostrar su figura y además, y sobre todo, lo presenta a él y a su doctrina como violento y terrorista, con una bomba con la mecha encendida en el turbante y armado de daga, amparando todo esto en la tergiversación de lo que llaman libertad de prensa, que incluye la ofensa a las creencias de los demás. Correcto.

Que a cualquiera se le ocurra pasear con una caricatura insultante relacionada con el Islam por las calles de cualquier ciudad y no pasará nada, le reirán la gracia, esto es libertad de expresión o prensa. Pero haga lo mismo con la bandera del club de fútbol del pueblo llevándola en actitud simplemente irreverente, le inflarán a ostias sin más preámbulos ni miramientos y tendrá como mínimo un juicio de faltas por alteración del orden y ofensas a los hinchas. Si esto lo hace con la bandera del país, autonómica o local supongo que serían años de cárcel. Esto también es libertad de opinión, pero claro tiene su límite: el respeto a los demás, a sus instituciones y cultura, pero sólo cuando los demás somos nosotros y nuestros intereses, esto no vale para los otros, que son malos y perversos, incluyendo sus creencias. Ataque preventivo.

Miguel Gila, gran humorista, que lo era entre otras muchas cosas, por la desconfiguración que hacía en sus chistes del enemigo rompiendo los esquemas de maldad propios sólo del enemigo. El enemigo concebido y diseñado como el personaje maligno, traidor, sucio, maloliente, fanático y sin principios, podríamos seguir degradándolo con todo lo que se nos ocurriera que todo sería adecuado para fabricar un enemigo lo más enemigo posible y, a partir de ahí, cualquier cosa que le hiciésemos sería válida y correcta, pues tal enemigo ni tendría la condición de humano sino de bestia. Cuando Gila con su teléfono desde la trinchera hablaba con el enemigo para convenir la hora del bocadillo, que le pasaran los planos, que esperaran pues a los cañones les faltaba el agujero y no recuerdo cuantas ocurrencias más, simplemente estaba rompiendo la imagen de nuestro subconsciente y deshaciendo la perversidad creada y necesaria para la existencia real del enemigo, que dejaba de serlo pues era ni más ni menos como nosotros. Pero como sin enemigo no hay guerra y como las guerras interesan nos hace falta crear enemigos, Esta es la realidad de la nueva libertad de información, no otra.

Todo el mundo árabe, trescientos millones, más el resto del mundo islámico que casi llegará a los mil millones, occidente les ha colgado a todos el cartel con todo lo inimaginable. Nada ni nadie se salva. Todos culpables, ni siquiera sospechosos y así se actúa y podemos utilizar cualquier método, ataque preventivo, armas, cárceles, torturas, asesinatos, con todo tipo de bombardeos, guerras y ocupaciones y todo legalizado, pues el enemigo, ya lo hemos visto, es peor que una bestia y como tal se la ha de tratar.

¿Por qué no se retiran los cientos de miles de soldados, las docenas de bases militares, las decenas de miles de barcos, submarinos, aviones, misiles y abandonamos todo ese fanático mundo árabe y que se pudran? ¡Qué nos importan a nosotros! ¿O es que estamos allí por algo, será por lo de la ayuda humanitaria? Mejor sería irnos y cerrar el grifo.