No habrá aterrizaje suave. El ladrillo cae en picado y acaba con la orgía inmobiliaria. Pero los promotores no pagarán los platos rotos. El Ministerio de Vivienda cubre las espaldas a los responsables de la crisis. Más ladrillo para resolver la crisis del ladrillo El Ministerio de la Vivienda paga a las empresas del boom […]
No habrá aterrizaje suave. El ladrillo cae en picado y acaba con la orgía inmobiliaria. Pero los promotores no pagarán los platos rotos. El Ministerio de Vivienda cubre las espaldas a los responsables de la crisis.
Más ladrillo para resolver la crisis del ladrillo
El Ministerio de la Vivienda paga a las empresas del boom
Nuevos ajustes amenazan a la plantilla del BBVA