Además, exige la implantación de una Renta Básica Universal estatal, para lo que recientemente recurrió a la Iniciativa Legislativa Popular.
Cada día son más las personas que ante la creciente situación de desempleo, precariedad y desempleo salen a la calle no sólo a manifestarse en contra, sino a pedir soluciones a los responsables políticos.
Hace tres días, la Asociación de Parados en Movimiento de Valladolid convocó una manifestación secundada por organizaciones sindicales (CGT y CNT), el movimiento 15-M, y otras organizaciones vecinales y de desempleados. En esta ocasión el motivo fue la denuncia de la situación social ante la convención nacional del Partido Popular.
Ayer, fueron organizaciones sociales como la Plataforma de Afectadas por la Hipoteca y las Marxes de la Dignitat 22M, partidos políticos como Compromís y EUPV y los sindicatos que forman la Intersindical Valenciana y CGT quienes convocaron esta «salida de la población a las plazas». Esta vez ante la presencia de la Ministra de empleo, Fátima Báñez en la Comunidad Valenciana, la población decidió salir a la calle para hacer visible su malestar frente al desempleo y las políticas de austericidas del Gobierno.
La primera, terminó con disturbios que pretendían disolver la concentración de personas ante las autoridades. La segunda, ha hecho que sean las autoridades las que se disuelvan, impidiendo su comparecencia.
La población, harta de la situación en la que vivimos y consciente de que el discurso de buenas noticias de cara a la crisis social no reflejan su realidad, toma sus medios democráticos de protesta y se empodera para exigir a los responsables políticos. No más desempleo, no más trabajos precarios, no más políticas que reprimen los derechos que deberían cubrir las situaciones más primarias y una renta básica que permita vivir con dignidad. Éstas son las consignas que de forma creciente se escuchan en la calle.
Y es que cuando aquellas personas encargadas de velar por la población hacen que el bienestar social se difumine y reprimen las capacidades democráticas, se abren de par en par las puertas de la consciencia colectiva. Y por esta vía, se sale a las plazas para denunciar y exigir cambios.
El Movimiento Contra el Paro y la Precariedad expresa su máximo apoyo a estas manifestaciones pacíficas y denuncia los intentos de ponerles freno por parte de las autoridades. Este colectivo declara expresamente que «la base de la democracia está en la capacidad de hablar y decidir por parte de la población» para continuar diciendo que «si la población no encuentra solución a su situación en las políticas actuales, está en su pleno derecho de salir a la calle a manifestarlo».
Este Movimiento social presentó el pasado 15 de enero una Iniciativa Legislativa Popular por la Renta Básica Estatal ante la Mesa del Congreso y espera respuesta de la Cámara para la recogida de firmas. Así, considera esta iniciativa como «una herramienta para sacar de la intemperie a miles de personas, pero también para combatir el miedo y la desmovilización social».