La denuncia contra el actor surgió a raíz de las manifestaciones que este realizó en el portal catalán de Internet e-noticies.cat el 26 de enero de 2007, en las que, en alusión a la polémica por el traslado de papeles del Archivo de la Guerra Civil, tildó a Lanzarote, alcalde del PP de la ciudad […]
La denuncia contra el actor surgió a raíz de las manifestaciones que este realizó en el portal catalán de Internet e-noticies.cat el 26 de enero de 2007, en las que, en alusión a la polémica por el traslado de papeles del Archivo de la Guerra Civil, tildó a Lanzarote, alcalde del PP de la ciudad salmantina y acérrimo defensor de no dejar salir los papeles de la ciudad, de «idiota» y «desgraciado», aseguró que «qué coño va a leer», y esperó que el regidor «se ahogue en su propia mierda».
El Juzgado de Primera Instancia número 2 de Salamanca desestimó la petición del primer edil, si bien este fallo fue revocado posteriormente por la Audiencia Provincial, que reconoció la vulneración del derecho denunciada y condenó al actor a publicar la sentencia en el citado portal durante dos días.
La sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado Xavier O’Callaghan, confirma la decisión de la Audiencia de Salamanca al considerar que las manifestaciones de Rubianes «redundan en el descrédito de la persona afectada, que por su proyección pública y política tiene trascendencia social, comportando en sí mismas una descalificación inadmisible de reputación». Añade que Rubianes «no es una persona dedicada al mundo de la política, sino un tercero ajeno a este ámbito, no resultando de aplicación en consecuencia, la doctrina relativa a lo que se ha denominado »contienda política». Se puede discrepar, censurar y criticar con toda la fuerza que se estime necesaria, pero no insultar», concluye la sentencia.
Pero lo más curioso, y lo que hace de este caso algo muy extraño, es que la sentencia haya sido condenatoria cuando el propio interesado, el alcalde Julián Lanzarote,envió un escrito al Tribunal Supremo, tras la muerte del actor, renunciando a su denuncia y pidiendo la absolución del demandado.
Todo lo sucedido hay que enmarcarlo dentro del contexto que vivía Pepe Rubianes en esos momentos. El actor catalán estaba inmerso en la polémica causada por sus declaraciones en TV3 en la que atacaba a la noción de una España trasnochada diciendo ,»a mí, la unidad de España me suda la polla por delante y por detrás, que se metan a España en el puto culo, a ver si les explota dentro y les quedan los huevos colgando del campanario». Dichas palabras surgían como consecuencia de la presentación de «Lorca eran todos», homenaje al escritor y al resto de desparecidos en la Guerra Civil. La obra, como consecuencia del ambiente creado, se vería fuera de la programación del Teatro Español y tuvo que buscar un lugar alternativo para representarse, en este caso el Auditorio de C.C.O.O.
Su hermana y heredera Carmen, ha resumido en un escrito las sensaciones que le está creando esta decisión judicial, dando por buenos los versos de Antonio Macahdo «‘Una de las dos Españas ha de helarte el corazón’.