La opinión pública en el Catatumbo colombiano amaneció (27 de marzo de 2.020) sobresaltada con la luctuosa noticia que un soldado asesino a un joven campesino.
En la vereda Santa Teresita, zona rural del municipio de Sardinata, Norte de Santander, fue asesinado Alejandro Carvajal, joven de 20 años de edad, por un soldado adscrito al Batallón de operaciones terrestres Nº 9.
El hecho esta relacionado con las protestas que se dieron en la zona rural de Sardinata del 11 al 19 de marzo, por la orden imperial y del sub presidente, de erradicación forzosa de cultivos ilícitos.
El joven era sobrino de una lideresa social que encabezó la protesta. El hecho ocurrió hace 18 horas, con posterioridad al levantamiento de los bloqueos; pero el ejército, desoyendo cualquier forma de acuerdo, continúo con las acciones de erradicación generando el caos y la confusión.
Los operativos se intensificaron y permanece la exposición al covid-19 de los uniformados y erradicadores voluntarios en los territorios.
Desde el año de 2017, por Acuerdos firmados en Sardinata y en desarrollo del Punto 4,de los Acuerdos de La habana con las extintas Farc-ep, los campesinos, agrupados en La Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat), y la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana (Coccam), materializaban la sustitución voluntaria, pese a la no implementación del gobierno. Así mismo aseguraron que el asesinato del joven se trata de una ejecución extrajudicial.
Juan Carlos Quintero (ASCAMCAT) afirmó que la represión por parte de la Fuerza Pública es constante aumentando la concentración de militares.
La militarización de la frontera en territorio colombiano va pareja a la denuncia de tráfico de armas para derrocar al presidente Bolivariano, Nicolás Maduro.
Continuan los asesinatos selectivos
Pese al aislamiento por el Covid 19, en Colombia no cesa el asesinato a lideres sociales.
Al inicio del aislamiento fueron asesinados dos lideres indígenas en sus Resguardos y en sus propias casas. Se trató de dos líderes indígenas del pueblo embera chamí en el Valle del Cauca. Iniciado el aislamiento, asesinaron al lider campesino, Marco Rivadeneira, el 19 de marzo de 2.020, en la vereda Nueva Granada, al sur del municipio de Puerto Asís, Putumayo.
La Danza de la Muerte en torno a lideres sociales apunta a la autoria intelectual del partido o secta fascista de gobierno: el Centro Democrático (CD).
Por el conflicto armado interno: “Según cifras oficiales, más de 25.000 personas se desplazaron masivamente y cerca de 27.600 permanecieron confinadas”, indicó el Comité Internacional de la Cruz Roja en su balance de la crisis humanitaria, en este año.
La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) publicó que declaraba un “toque de queda” con excepción de las personas enfermas y un “castigo revolucionario” a quienes teniendo Covid-19 no se auto-aislaran. Lo mismo hicieron grupos de las antiguas Farc que no acataron el desarme, que declaran objetivo militar a quienes estén fuera de sus casas.
El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, ha dicho que “las operaciones militares no han parado ni han mermado”
Tres civiles que estaban desde hace un mes en poder del Ejército de Liberación Nacional (Eln) fueron entregados este jueves al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), en zona rural del departamento Cauca. En el mismo Departamento se han registrado combates con milicianos del ELN y grupos no desmovilizados de las antiguas Farc-EP.