Recomiendo:
0

Euskal Herria territorio libre de sionismo

Fuentes: Rebelión

Askapenaren prentsa-bulegoa El pueblo palestino y todos los demás de la zona están obligados a entenderse con la entidad sionista-israelí ocupante. Esto es lo «pragmático» considerando el poder que ha adquirido. Sin embargo este «pragmatismo» significa lo contrario de justicia para el pueblo palestino y lo opuesto de solidaridad con las personas originarias de estas […]

Askapenaren prentsa-bulegoa

El pueblo palestino y todos los demás de la zona están obligados a entenderse con la entidad sionista-israelí ocupante. Esto es lo «pragmático» considerando el poder que ha adquirido. Sin embargo este «pragmatismo» significa lo contrario de justicia para el pueblo palestino y lo opuesto de solidaridad con las personas originarias de estas tierras.

En la semana del 23 al 30 de noviembre fueron asesinados 15 personas palestinas por el ejercito sionista, 7 eran civiles, entre ellos un niño. 49 palestinos, de estos 19 niños, han sido gravemente heridos y 57 civiles y 8 niños han sido detenidos. Sin embargo ha sido una «buena» semana. Solamente 27 de sus casas han sido destruidas y 80 donums de tierra agraria han sido arrasadas. Ha habido muchas semanas mucho peores.

La población de Gaza, 1.300.000 personas, dependen de la ayuda internacional para no morir en esta gigantesca cárcel al aire libre. Los 11.000 presos en las cárceles israelíes son dispersados y torturados legalmente. A los más de 4 millones de exiliados se les impide volver a sus hogares y sobreviven en campos de refugiados. A todos y todas las palestinas se les invita a marcharse haciéndoles imposible la formación, el acceso a la sanidad, al agua potable, a la electricidad, al trabajo, al comercio, a la cultura, a cualquier desarrollo.

La comunidad internacional y la ONU están enviando ayuda humanitaria y están formulando decenas de resoluciones que la entidad sionista simplemente no cumple, … Por otro lado están manteniendo el comercio militar, promoviendo negocios con los sionistas en base a un acuerdo comercial preferente, perseverando en las relaciones políticas y los intercambios culturales, invitando delegaciones oficiales y no-oficiales de todo tipo, colaborando y honrando sus autoridades. Miran para otro lado para no dañar los beneficios que sacan de esas relaciones.

Si se les recrimina esta complicidad argumentan que «no todos los israelíes son criminales», que «hay que entenderles por el Holocausto» , y cuando se torna demasiado evidente que esto no son argumentos para exonerar una complicidad de tal envergadura se escudan en la propia «libertad» y en la «competitividad» de nuestro sistema: «Si no lo hago yo, lo harán otros».

¿Qué es lo que podemos hacer antes de tener que aceptar la victoria final de los sionistas como hecho consumado, no por «pragmatismo» sino porque ya no hay alternativa?

Es imprescindible no perder más tiempo con interminables debates seudo-ideológicos. No podemos repetir los errores de las grandes plataformas de «Paremos la Guerra»: no hemos parado ninguna guerra. Necesitamos una iniciativa sencilla, sin ambigüedades y suficientemente radical con la que presionar a la entidad sionista, no simbólicamente sino, de forma real y pragmática hasta que acepten una paz justa, duradera y con garantías. Pero ¿cómo?.

Nos responden más de 170 organizaciones sociales, políticas y sindicales palestinas: Campaña Internacional de Boicot Total a cualquier expresión sionista-israelí. Con el ejemplo de África del Sur han visto que el boicot total contra cualquier expresión Boer-sudafricana ha logrado que Mandela y su lucha pudiera destruir el sistema racista del apartheid y negociar con los blancos un marco político donde todas las opciones tuvieran algunas oportunidades y garantías democráticas. La campaña de boicot total es posible y será victoriosa si todos damos algo más de nuestra parte para que en ninguna colaboración o negocio la opción israelí-sionista sea la mejor. Así los palestinos no tendrán que darlo todo, para sentar a los sionistas a una mesa con garantías.

«Boicot» se asocia en nuestra sociedad a no comprar determinados productos. Sin embargo, esto sólo es una parte del BOICOT TOTAL. Mucho más eficaz es comenzar a romper toda colaboración en el ámbito académico con cualquier entidad académica o representante sionista-israelí. Lo mismo hay que conseguir en todos los demás sectores: el cultural, el artístico, el deportivo, el científico-tecnológico, el institucional, político, sindical, social, el mediático y desde luego el armamentístico, financiero, empresarial y comercial.

Mucha gente se preguntará ¿qué tendrán que ver una canción de amor, un estudio científico del escarabajo pelotero o un partido de baloncesto del Tau contra el Macabi-TelAviv con los 31 niños que en los últimos 5 años nacieron muertos en los check points porque a las y los soldaditos israelíes no les dio la gana dejar pasar a la mujer palestina embarazada?

El gobierno y la sociedad sionista invierten muchísimo dinero y esfuerzo en aparentar en el ámbito internacional ser un buen Estado democrático, de derecho y de bienestar, moderno y acorde con los tiempos y fingir normalidad. Participan en Eurovisión o en Euroligas como si fueran europeos. Financian la colaboración universitaria y científica civil, aunque sean un simple efecto colateral de sus investigaciones militares. Gastan dinero en compartir arte y cultura, como si su cultura y su arte no estuvieran manchados de sangre. De esta forma la «inocente sociedad civil» de la comunidad internacional no incomoda a sus gobiernos y empresarios cuando estos hacen sus negocios con la entidad sionista.

Tenemos que boicotear ampliamente y en todos los sectores. Para ello necesitamos no sólo el boicot individual de cada uno y cada una sino que es necesario que informemos y delatemos cualquier movimiento de los sionistas-israelíes y de sus cómplices vascos. Sólo así no seremos cómplices por cómoda omisión.

No somos nosotras y nosotros sino las y los palestinos los que tendrán que ser pragmáticos -y lo serán, les va la vida en ello. Mientras tanto para ellas y ellos -y así nos lo han dicho- es mucho más importante el boicot total sobre la entidad sionista que toda la ayuda humanitaria.

Siempre habrá otros que colaboren con los sionistas y aunque toda la sociedad vasca se sume al boicot sabemos que no es suficiente, pero es imprescindible. No es solamente una cuestión ética: El peligro que supone la existencia de un estado sionista en Oriente Próximo para la paz mundial es innegable.

Por todo ello nos sumamos a la iniciativa ISRAELI BOICOT EUSKAL EKIMENA y a sus movilizaciones. Así, declaramos cualquier presencia israelí-sionista comoNon Grata’ hasta que podamos proclamar a Euskal Herria territorio libre de sionismo y lo mantendremos así mientras las palestinas y palestinos necesiten este Boicot para lograr una paz justa, duradera y con garantías.

* Walter Wendelin es militante de Askapena (www.askapena.org)