Mantener y ampliar la formación en género y comunicación es una necesidad constante para profesionales de la prensa y la comunicación pública en Cuba.
Rosana Rodríguez Ramos y Yusimí García Castellano coincidieron en el curso de postgrado de Género y Comunicación efectuado en La Habana del 3 al 13 de febrero. Organizado por la Cátedra de Género y Comunicación Mirta Aguirre, del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, el diplomado reunió a especialistas y profesionales de varias provincias de país.
Rosana y Yusimí representan dos momentos de la formación profesional: la primera es estudiante de cuarto año en Comunicación Social en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana y la segunda cursa una maestría en Desarrollo Social con un proyecto de programa radial con perspectiva de género para la emisora Radio Guamá, en la occidental provincia Pinar del Río, a unos 160 kilómetros de la capital cubana.
Ambas se animaron a cursar el diplomado en busca de conocimientos actualizados y herramientas para hacer una comunicación no sexista.
«En la Facultad sí se habla sobre perspectiva de género, pero nunca es suficiente. El curso me aclaró conceptos, me enseñó otros. Por ejemplo, fue atractivo que se hablara de las mujeres lesbianas. Fue lo que más me gustó, porque dentro de la discriminación patriarcal hacia la mujer, la comunidad lésbica es doblemente discriminada e invisibilizada», declara Rosana a SEMlac.
Durante los 10 días de trabajo, el programa incluyó acercamientos a la teoría de género y feminista, la economía feminista, indicadores de género, la violencia machista, así como la representación sexista en los medios de comunicación y también las lecciones que dejan buenas prácticas en el ámbito comunicativo.
La necesidad de vincular teoría y práctica es un reclamo de profesionales en Cuba que se manifiesta en espacios formativos y también de intercambio científico.
Para Yusimí, llevar los conocimientos a la práctica sigue siendo un desafío. Por eso afirma que «hacen falta más herramientas prácticas y buenos ejemplos que no vemos usualmente en nuestros medios».
Otra de las necesidades es ampliar la formación curricular en pregrado. Aunque en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana existen, desde hace varios años, optativas que integran la perspectiva de género, estas iniciativas no son extensivas a todos los centros universitarios del país ni se incluyen en el currículo básico.
«Incorporarlas en el pregrado lo veo necesario e idóneo para una visión a la que muchas personas hacen rechazo o minimizan y creen que es hablar solo de un tema de mujeres o defender a las personas homosexuales. Sería bueno también para que al posgrado no se llegue en cero respecto muchas de las temáticas y visones que ahí se tratan», opina la periodista radial.
Durante los debates del curso también se sugirió la incorporación de la perspectiva de género y feminista a las políticas editoriales y normas de redacción. Esta propuesta ha tenido varios antecedentes en espacios formativos y de intercambio, incluidos los encuentros iberoamericanos de género y comunicación que, cada dos años, se celebran en la capital cubana.
Durante la clausura del 13 Encuentro Iberoamericano de Género y Comunicación «Isabel Moya Richard in memoriam», en noviembre de 2019, fue noticia la intención de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec) de avanzar en redacciones periodísticas libres de todo tipo de discriminación, pero también son necesarios otros pasos institucionales.
«Ahora mismo, en mi emisora Radio Guamá, la directora está sensibilizada con estos temas y me apoya mucho en mi maestría, mi capacitación e investigación. Es una directiva sensibilizada, pero no es la generalidad en todos los medios. Es una batalla que hay que dar de a poco y todos los días», reflexiona Yusimí.