Este martes se ha presentado el manifiesto Intelectuales por la III República, que exige un referéndum para decidir entre monarquía o república como una «urgente necesidad de regeneración democrática». El documento lo suscriben personajes públicos como la escritora Rosa Regás, el politólogo Vicenç Navarro, o el director en España de Le Monde Diplomatique, Ignacio Ramonet. […]
Este martes se ha presentado el manifiesto Intelectuales por la III República, que exige un referéndum para decidir entre monarquía o república como una «urgente necesidad de regeneración democrática». El documento lo suscriben personajes públicos como la escritora Rosa Regás, el politólogo Vicenç Navarro, o el director en España de Le Monde Diplomatique, Ignacio Ramonet.
Más de un centenar de personas se han congregado este martes en el Ateneo de Madrid para asistir a la presentación del manifiesto Intelectuales por la III República, firmado por una treintena de personajes públicos entre los cuales se cuentan la escritora Rosa Regás, el politólogo Vicenç Navarro, el director en España de Le Monde Diplomatique Ignacio Ramonet o el filósofo y director de la institución Carlos París, recientemente fallecido.
El acto, que ha durado aproximadamente una hora, se ha iniciado con la lectura del manifiesto por parte de la actriz Amparo Climent, que ha reivindicado en nombre de los firmantes la necesidad de establecer un régimen republicano y laico y ha exigido la convocatoria de un referéndum para elegir entre monarquía y república. «No es una utopía» alcanzar la III República, ha asegurado Climent, que ha calificado el cambio de modelo de Estado como una «urgente necesidad de regeneración democrática» y ha asegurado que «no es una cuestión de personas, sino de la institución monárquica en sí, a la que consideramos obsoleta, anacrónica y contraria a los principios de la democracia».
«35 años después de aprobada la Constitución que ha regido desde entonces la vida de nuestra sociedad, tenemos la firme convicción de que ha llegado el momento de poner fin a la anomalía» que supone que un rey «impuesto por el dictador» sea el jefe del Estado, señala el manifiesto, que también asevera que la imposición de la monarquía fue «el principal precio que se pagó en el proceso de Transición de la dictadura a la democracia, al no tener lugar la ruptura democrática y articularse una reforma pactada, bajo la presión ejercida por el Ejército surgido del golpe de Estado de 1936 contra la II República, los poderes económicos y la larga mano de los EEUU».
Por su parte, Alejandro Villa ha aseverado como representante del Ateneo Republicano de Asturias -institución que también ha suscrito el manifiesto- que «puede haber república sin democracia, pero no puede haber democracia sin república». Villa ha celebrado que se hayan puesto por escrito «los sentimientos de un republicanismo tan esperanzador como difuso», pero ha pedido que se dé difusión al documento y se emprenda una recogida de firmas para que los ciudadanos puedan suscribir el manifiesto.
En un sentido parecido se ha expresado Pedro Montes, representante de la Asociación Socialismo 21, que ha explicado que su organización apoya el manifiesto para mejorar una «democracia de ínfima calidad» como la que, a su juicio, impera en España. Montes, que ha recordado que recientemente «las luchas y movilizaciones populares han alcanzado algunas victorias y los ciudadanos parecen darse cuenta del poder decisivo de sus deseos», ha exigido «romper» con la monarquía, a la que ha tachado de «clave de bóveda del régimen, causa fundamental de insostenible estado de nuestro país».