Suele ser un tópico utilizado por quienes tienen intereses en la privatización de la sanidad que la gestión privada consigue ahorros sustanciales en la prestación de los servicios sanitarios porque, se dice, lograría una mayor eficiencia. Este tópico, que no se sustenta en ninguna evidencia científica, ha vuelto a ser repetido como un «mantra» por […]
Suele ser un tópico utilizado por quienes tienen intereses en la privatización de la sanidad que la gestión privada consigue ahorros sustanciales en la prestación de los servicios sanitarios porque, se dice, lograría una mayor eficiencia. Este tópico, que no se sustenta en ninguna evidencia científica, ha vuelto a ser repetido como un «mantra» por las presidentas de las comunidades autónomas de Castilla La Mancha y Aragón, que basándose en estos supuestos ahorros de la gestión privada y la iniciativa publico-privada pretenden impulsar las llamadas «colaboraciones público- privadas» (iniciativas de financiación privada y/o concesiones administrativas) para la construcción de hospitales, y el paso a la gestión privada de cuatro ya existentes en Castilla La Mancha.
Conviene ante estas propuestas tener en cuenta que no es cierto que la gestión privada de los hospitales sea mas barata, salvo que se realicen recortes de las prestaciones y selección de riesgos (es decir trasladar a a los centros de gestión pública a los enfermos con mayores problemas de salud y/o patologías mas complejas), de hecho los centros de gestión privada tienen menos dotación de personal, derivan mas enfermos a los centros de referencia y son peor valorados por los ciudadanos que los de gestión publica.
Un buen ejemplo de lo dicho son los presupuestos de la Comunidad de Madrid de los años 2010 y 2011. En esta Comunidad el presupuesto/cama/año de los centros públicos fue de 277.375 euros frente a 434.686 de los centros de gestión privada o semiprivada, en 2010; en 2011, el presupuesto cama/año fue de 307.187 euros de los centros públicos frente a 485.970 euros de los privados y semiprivados, es decir 173.783 euros/año de sobrecoste (un 58,2% mas caros), por lo tanto afirmar que la gestión privada de los hospitales es mas barata es falso.
Igualmente ocurre cuando se habla de los supuestos ahorros de la construcción de hospitales con el modelo publico-privado. En Madrid los 7 hospitales abiertos por modelo PFI tenían un coste de construcción de 701 millones de euros, cuando finalice 2011 se habrá pagado por parte de la Comunidad de Madrid a las empresas constructoras 761,3 millones de euros y quedara todavía una deuda pendiente de 4.284 millones de euros, y además las empresas constructoras reclaman una deuda de 80 millones de euros por un exceso de actividad en este periodo y un incremento de 9 millones de euros en el canon anual. Es decir el coste real esta siendo exorbitante y produce una deuda muy importante que pagan todos los ciudadanos.
Como efecto de esta deuda y de los sobrecostes de la gestión privada se esta produciendo una progresiva descapitalización de los centros públicos que ven como sus presupuestos disminuyen año a año, en 2011 un 9,58% menos, en 2012 un 1,5% de descenso, con lo que se deteriorara inevitablemente el nivel de la asistencia prestada.
En resumen, contra lo que se nos pretende hacer creer tanto la gestión privada de los hospitales como la construcción de los mismos por los modelos de la llamada «colaboración publico- privada» (concesiones administrativas, PFI, etc.) no solo no disminuyen gastos sino que los incrementan notablemente a costa del deterioro de la red sanitaria pública, poniendo en cuestión el derecho constitucional a la protección de la salud.
Marciano Sánchez Bayle es portavoz de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública