Juan Gimeno, rector de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), abre expediente disciplinario a una periodista un día después de que ésta informara de su estado de embarazo. El motivo: un reportaje que no fue del agrado de Telefónica, empresa socia de la universidad pública. El 2 de junio de 2011 se celebraron […]
Juan Gimeno, rector de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), abre expediente disciplinario a una periodista un día después de que ésta informara de su estado de embarazo. El motivo: un reportaje que no fue del agrado de Telefónica, empresa socia de la universidad pública.
El 2 de junio de 2011 se celebraron en Madrid, organizadas por la cátedra UNED-Telefónica, las jornadas «Valorando económicamente la responsabilidad social corporativa». El 24 de junio, el Centro de Medios Audiovisuales de la UNED (CEMAV) colgó en internet el reportaje que había realizado sobre el acto. El mismo día se emitió en el programa de la UNED en La 2. Sin embargo, el funcionamiento normal del CEMAV se vio alterado el 22 de julio, cuando la redactora-locutora del CEMAV y guionista del reportaje, Tania Gálvez, se dio cuenta de que el reportaje había sido suprimido de la web de RTVE, del canal de Youtube y del buscador de la web de la UNED. Lo mismo había ocurrido con el reportaje «Armas bajo control», que aborda la campaña de varias organizaciones, entre las que se encuentran Amnistía Internacional e Intermon Oxfam. Sorprendida, solicitó por escrito una explicación de los motivos que habían llevado a ocultar sus trabajos.
Su solicitud nunca encontró respuesta, y Gálvez siguió ejerciendo su trabajo hasta que el pasado 12 de septiembre informó a la empresa, de nuevo por escrito, de su estado actual de embarazo, de cara a las medidas legales correspondientes. Al día siguiente, la UNED le hacía entrega de un documento firmado por el rector, Juan Gimeno Ullastres, en el que se ponía en conocimiento a Gálvez de la apertura de un expediente disciplinario por «indicios razonados de responsabilidad disciplinaria por motivo de publicación indebida de documentos o información a que ha tenido acceso por razón de su cargo o función y de incumplimiento de las órdenes o instrucciones de los superiores y de las obligaciones concretas de su puesto de trabajo». El 26 de septiembre, en un nuevo documento entregado a Gálvez, Gimeno concretaba a qué se refería: «la entrevista al responsable de Telefónica» que aparece en el reportaje, su edición y el reportaje del que forma parte, así como la inclusión de éste en el blog personal de Gálvez: lasinterferencias.blogspot.com.
Reportaje no complaciente
Parece claro que el expediente disciplinario ante el que se encuentra Gálvez, y que podría terminar en una suspensión de empleo y sueldo que durara incluso varios años o en su despido, viene motivado porque el reportaje sobre las jornadas no gustó en las altas esferas de la UNED y de Telefónica.
El vídeo hace mención a la multimillonaria remuneración del presidente de Telefónica, César Alierta, los despidos masivos emprendidos por dicha compañía y a un piquete del sindicato CNT a las puertas de las jornadas sobre Responsabilidad Social Corporativa en el que varios sindicalistas criticaron los acuerdos entre empresas privadas y universidades públicas. Luis Abril, secretario general técnico de la Presidencia de Telefónica, se refería a varios de estos temas al ser entrevistado en el reportaje. Al respecto de los altos salarios de los directivos de la compañía, admitía que «es verdad que hay cantidades que se nos antojan a todos altas», excusándolas en el nivel salarial del sector de las comunicaciones, la responsabilidad que según él asumen sus directivos y el derecho de los consejos de administración a gestionar estos aspectos.
También se refería a los despidos. «Estas cosas para hacerlas bien hay que hacerlas cuando se tiene dinero, cuando no se pueden hacer bien es cuando no se tiene. Precisamente la sostenibilidad, a plazo medio y largo de la compañía, pasa por que el modelo productivo se ajuste, y se ajuste con la compensación debida para todo el mundo. Eso es realmente responsabilidad. El problema no es que ahora se gane dinero y por ganar dinero no se pueda despedir. El problema es que no hay despidos, hay acuerdos con quien quiera aceptarlos», afirmaba Abril.
Sindicalismo sin derechos
La trayectoria de Gálvez, de 30 años de edad, como trabajadora de la UNED no ha estado exenta de problemas. En 2008, la periodista realizaba el mismo trabajo pero estaba en nómina de Laya Producciones. Tras denunciar a esta empresa por cesión ilegal de trabajadores y ser elegida como delegada de la sección sindical de CNT, Gálvez fue despedida en junio de 2008. Tras un conflicto laboral que terminó con su readmisión como trabajadora de la UNED en junio de 2009, la redactora volvió a constituir la sección, que se vio constantemente boicoteada por la empresa en cuanto a derechos sindicales: sin un local donde reunirse y constantemente marginada de las reuniones entre sindicatos y UNED. Con el expediente disciplinario, la UNED parece decidida a castigar de nuevo a la joven periodista. Cuestionada por DIAGONAL sobre el expediente disciplinario, Gálvez se muestra incrédula: «No sé de qué se me acusa, yo he hecho bien mi trabajo». Mientras tanto, la UNED y Telefónica ni saben ni contestan. José Matías Hernández, vicegerente de Recursos Humanos, afirma que «no puede ni debe hacer ningún comentario», y Gerardo Ojeda, director técnico del CEMAV, señala no estar autorizado para dar su opinión. Telefónica ha declinado responder a las preguntas de DIAGONAL.
Noticia relacionada: La Uned expedienta a una trabajadora por supuesta desconsideración a un directivo de Telefónica
Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/La-UNED-castiga-a-una-trabajadora.html